La primicia la dio el diputado Carlos Escarrá hoy en el programa mañanero de VTV y nadie ha salido a desmentirlo, por el contrario, Globoterror en su página en Internet destaca esta información:
CICPC no ha recibido ninguna orden para aprehender a Manuel Rosales
“El director del CICPC, Wilmer Flores, informó que su institución no ha recibido ninguna orden de aprehensión contra el alcalde de Maracaibo Manuel Rosales. Aclaró que este tipo de medidas son notificadas a la dirección de aprehensión por parte de un tribunal y que esto no ha ocurrido.”
Suficiente mensaje para confirmar la huída anunciada de ese sujeto, a quien el Tribunal que recibió las denuncias de sus corruptelas con los dineros públicos, debió haberle dictado privativa de libertad.
Con este personaje ocurrió exactamente lo mismo que con el célebre diputado Luis Velásquez Alvaray, quien luego de ser señalado y, si mal no recuerdo, imputado, también, por ante un tribunal de Control, por graves delitos de corrupción cometidos con la compra de varias sedes del Poder Judicial en distintos lugares del país, optó por huir de la justicia.
Es por ello que siempre hemos dicho que el terrible flagelo de la corrupción jamás lo extirparemos de nuestra sociedad, en tanto existan las complicidades en todos los estamentos del Estado, las que logran y siempre con éxito, que este tipo de cosas ocurran.
Hay que tomar nota que si, por error alguno, tales alimañas no logran evadir la justicia y son llevados a prisión, de inmediato se fugan en un dos por tres, tal y como lo hizo Eduardo Lapi, a quien, sin duda alguna, el dinero del soborno le permitió salir de la cárcel e irse del país sin que nadie se diera cuenta (¿?).
oliverr@cantv.net