Tres cosas perturban a quien esto escribe, y a través de este medio pudiera uno exorcizar esos malos pensamientos que seguramente el Demonio mete en la mente y hecha a perder todo el cuerpo; pero más bien son preguntas que tal vez alguien del alto gobierno se atreviera a responder respecto a las universidades, no digo el Presidente Chávez que en estos momentos viene saliendo de los infiernos del dolor, de la noche oscura del alma, cuestión que ha lanzado a los abismos de la mezquindad a tantos que habitan las moradas inmundas de la oposición, pero ya veremos que el Comandante-Presidente retomará el mando próximamente y dejará a esas aves de mal agüero heridas y mascullando sus argumentos falaces; sí, regresará el Comandante con su “Llama de amor viva”, como dice San Juan de la Cruz… Y atenderá como se debe el problema de las universidades, que uno percibe como que alguien por esos predios de Miraflores y el despacho del Ministerio del Poder Popular de Educación Universitaria, pareciera guardan mal querencias o reconcomios hacia los centros históricos venezolanos de formación académica, donde, por cierto todos los que somos ya de edad crecida nos hemos educado.
Por otra parte, pareciera también que existe la percepción de que los nuevos dispositivos universitarios nacidos de la misión Alma Mater como las universidades politécnicas territoriales y los convenios que las universidades experimentales intervenidas, como la UNELLEZ, Rómulo Gallegos, Francisco de Miranda y algunas otras con la Fundación Misión Sucre, con amplísimos programas de formación, constituye un esbozo que no termina de cuajar, como se dice, desde el punto de vista curricular y organizacional; sobre todo por esa implementación por vía de los decretos que sin un fortalecimiento de las potencialidades internas en cuanto a la necesidad de valorar los recursos humanos y su capital intelectual, así como superar los sectarismos y tomar en cuenta a los liderazgos locales, estas universidades no alcanzarán su estructura curricular y organizacional definitiva. Ergo, debe democratizarse los procedimientos de elección de autoridades en tales universidades, ya como reza el refrán el efecto demostración del ejemplo debe empezar por casa: que las nuevas universidades y la ampliación de la cobertura de otras elijan a sus rectores y tren de vicerrectores, entre otros, uno a uno, con el voto universal y secreto, a modo de plan piloto a ver cómo les va o cómo le quedan los giros, permitiendo, además, la beligerancia de los consejos de trabajadores, comunas y demás formas novedosas de participación popular, ¿así podría ser Vicerrector de Postgrado Ronald Blanco La Cruz en la UNEFA? ¿Ese capitán dónde ha hecho carrera académica? Por decir algo y nombrar a alguien, así también: el rector de esa misma universidad González González, ¿tiene título de doctor? En otras palabras, estos nuevos dispositivos universitarios, ¿no introducen una distorsión al sistema educativo venezolano y en particular al subsistema de educación superior? Ello más allá de que se han convertido en un mecanismo de ampliar la oferta educativa a la población superando así lo que algunos como Tulio Ramírez dieran en llamar la contracción de la oferta educativa, y eso está muy bien… Pero como dicen que cuando el pobre lava llueve, ahora el problema es otro y es ahí donde el indio es bruto y no se logra comprender a cabalidad varias cosas y una alumna, muy revolucionaria y lúcida ella, de corazón, me lo explicó de la siguiente manera: mire, eso es dialéctico, ya que la revolución remienda algo por un lado y la cosa revienta por la otra, por ejemplo con la apertura de mayor cantidad de cupos en las universidades de los últimos años se ha tenido una explosión curricular nunca vista, tanto con la municipalización de la educación universitaria, vía Misión Sucre o las exigencias de la nueva política de asignación de cupos por la OPSU, donde hasta en la UPEL-IPB ha crecido la matrícula y abrieron un turno nocturno, una estrategia de esta organización para adaptarse al entorno, pero de eso se han derivado otras demandas: los graves problemas de infraestructura nueva o refacción de la ya existente y que requiere grandes inversiones, la atención al docente universitario que subsiste en un ambiente adverso, por la malquerencia que hemos señalado previamente que algunos altos funcionarios muestran hacia la universidad tradicional; pero en las nuevas universidades tampoco se observa, a menos que se esté equivocado y nuestros informantes clave mientan, el personal docente y de investigación tampoco es tratado muy bien y menos los colegas de la Misión Sucre, salarios muy bajos y pagos discontinuos como en los mejores tiempos del neoliberalismo, que propuso la flexibilización de las relaciones laborales y la precarización del trabajo, por eso uno pregunta, ¿cuándo el alto gobierno revolucionario solventará esas situaciones y aumentará a los docentes universitarios?
La universidad venezolana, pues, va en estos tiempos desarrollando su proceso a trancas y barrancas, unos negándola y otros afirmándola, pero tal vez a unos y otros tal vez abría que decirles: no la quieran tanto compadres y permítanle que esta noble institución desarrolle sus funciones con normalidad. Así, nosotros quisiéramos ver en lo concreto la fulana transformación universitaria, cómo opera esa idea en la realidad, ¿ah con la Misión Alma Mater y Misión Sucre o con las territoriales? Son cosas que uno no entiende, es decir, cuál es la diferencia de la universidad de estos tiempos de la revolución bolivariana y la de otros tiempos; en fin, quienes nos hemos formado hasta de manera autodidacta o asistiendo a clases formales como se ha podido y sin cooperación oficial consideramos que la universidad en estos tiempos de la revolución bolivariana es un ente muy importante pero ha sido subvalorada: unos, en general sus autoridades electas democráticamente quieren convertir este recinto en una caja de resonancia de la MUD, y otros, los compas del PSUV que en agente de las políticas públicas del gobierno, con la investigación tutelada, como dijo la otra vez el Dr. José Pascual Mora García y en ese tejemaneje hemos estado todos estos tiempos, con la frente en alto y los bolsillos vacíos, para recordar a Joselo… Esos aspectos, pues, son cosas que nos perturban y al permitir que las digamos uno se alivia, además de señalar que al regresar nuestro hermano querido, el Presidente Chávez, tendrá que dar solución, como estamos seguros que lo va a hacer, Dios mediante, ya que nos da una gran alegría lo señalado por Maduro de que ya se levanta y hace ejercicios.
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