La Facultad de Odontología de la UCV está entre las dependencias universitarias más deterioradas, en relación con la consolidación en el ejercicio del gobierno académico-administrativo institucional, de una verdadera mafia que, a través de los más perversos mecanismos, logran perpetuarse hegemónicamente en la dirección institucional, manteniendo a la comunidad de la facultad totalmente sometida y sin ninguna capacidad de respuesta, al tiempo que desarrollan alianzas externas con grupos similares de otras facultades, hasta llegar a conformar toda una red mafiosa, que puede alcanzar a ser mayoritaria en muchos casos, dentro del máximo organismo de dirección ucevista.
Basan su dominio absoluto en actividades delictivas, que van desde la compra de voluntades en el sector estudiantil, el disfrute de privilegios por parte de la cúpula y sus cómplices, la alianza con organizaciones terrorista, como Bandera Roja en el caso que nos ocupa, y las amenazas hacia sus posibles opositores: Desde la agresión académica hasta la física y el descrédito propagado a los cuatro vientos, mediante instrumentos como la calumnia y las acusaciones perversas. Es usual la utilización de grupos estudiantiles quienes, actuando como violentos mercenarios, insultan, agreden y aterrorizan, a quienes osen enfrentar los designios de la mafia.
Recientemente, una alumna de dicha facultad se atrevió a denunciar el acoso sexual de que estaba siendo víctima por parte de un miembro del clan de los mafiosos y, no sólo no se ha producido investigación alguna de la denuncia, sino que la mafia ha cerrado filas en defensa de su mafioso y ha comenzado a difamar a la joven estudiante con el cuento de que fue ella quien quiso seducir al profesor. De nada ha valido que la estudiante sea hija de una profesora jubilada de Odontología, ni que el “profesor” tenga antecedentes de denuncias por casos similares en el pasado. ¡Hasta esos niveles de perversión llegan estos degenerados! ¿Qué demuestra la existencia de un caso como éste en una universidad? Que la podredumbre universitaria es grave y que los delincuentes han tomado la institución para colocarla a sus servicios, disfrutar de privilegios y enriquecerse fraudulentamente.