En las palabras de apertura de las “VI jornada nacional de soberanía técnica, científica y tecnológica” de la Universidad Bolivariana de Trabajadoras UBTJR del 23 al 25 de noviembre de 2016 que tienen lugar en Maturín; el trabajador petrolero Jesús Montilla, integrante del Equipo Fundador de la UBTJR, expresó con mucha claridad cómo, porqué y para qué surgió la UBTJR.
Aquí les muestro lo expresado por el camarada Montilla en este link: http://www.aporrea.org/educacion/a237588.html
De esas palabras del camarada Jesús Montilla que describen una historia corta y digna de admiración, por ser la UBTJR producto de las manos y el ingenio de la clase trabajadora, quisiera advertir de una gran amenaza que aun sin mala intención atenta contra esa libertad creativa y de participación revolucionaria que ha caracterizado desde su génesis a la UBTJR.
El camarada Montilla en la historia contada de la Universidad de los Trabajadores nos dice que entre “2008 al 2010 se logra la aprobación del Reglamento Ejecutivo”, este reglamento permite elegir con la participación de toda la comunidad universitaria todas las responsabilidades en la estructura de la UBTJR. Lamentablemente hoy desde una rectoría designada sin ser consultada con la universidad, es decir con los trabajadores, hoy desde esa rectoría, se designaron a dedo voceros regionales; refirmándose así un viejo adagio de la cuarta republica; “gaceta mata a poder popular”.
Hoy la UBTJR se encuentra en una encrucijada; o seguir avanzando en el proceso de gestión directa y democrática de los trabajadores o postrarse a la voluntad de unos pocos, que sólo quieren utilizarla como un simple pasaporte en sus aspiraciones grupales dentro del despreciable mundillo de la burocracia, donde el lobby, la lisonja y exhibición de charreteras es la practica común.
Debemos de tener claro que luchar contra esas prácticas de sustituir ejecutivamente, desde la institucionalidad a la participación popular, a la voluntad popular, al protagonismo de los trabajadores, es luchar contra el burocratismo. Esa es la línea justa y los trabajadores forjados en la lucha con su universidad, no vamos a permitir que se ultraje nuestra corta y gloriosa historia.
ABREBRECHA Y DESPUES HABLAMOS
