Ya están apareciendo las primeras consecuencias para nuestra industria petrolera, luego de que algunas semanas atrás los Estados Unidos informara a cerca de la imposición de la licencia 44A.
Mientras el ministro Tellechea por desconocimiento e ignorancia, celebraba dicha licencia [ Einstein Millan Arcia on X: "No sabemos de qué realidad, ni de que "licencia 44A" está hablando el ministro #tellechea, pero de la emitida el día de ayer no es. Hasta el 31/05 tienen para reducir actividad e inversión. De allí cada caso será considerado individualmente. #PDVSA https://t.co/SLmHdZIvZL" / X (twitter.com) ], en realidad se engendraban nefastas consecuencias para nuestra patria.
La primera de ellas se acaba de divulgar a través de reuters, donde se refleja un desplome en el nivel de exportación nación del 38% hacia 545,000 BPD, respecto a cifras del mes anterior de 873.5 MBD [ Einstein Millan Arcia on X: "Caen en 38% exportaciones de #PDVSA en Abril a 543,000 BPD desde 873,000 BPD (manipulados con inventario por cierto) en Marzo. De alli nuestra prediccion de un desplome del 16% en los ingresos brutos para fin de 2024. Pero el novato estaba feliz. Lea: https://t.co/Y1BmwD44hU" / X (twitter.com) ].
Ese desplome de nuestras exportaciones se traduce en una perdida monetaria de al menos $683 millones solo para el mes de Abril. De mantenerse dicha tendencia para el resto de 2024 significaría una pérdida de alrededor de $5,400 millones. Pero Tellechea celebraba risueño la imposición de la licencia 44A. Sin embargo, pensamos que la brecha se ira normalizando.
Mas allá de ello, tal y como aseguramos en artículo anterior [ Tellechea por desconocimiento de la licencia 44A, pasa de la euforia a la frustracion. Impacto real - Por: Einstein Millán Arcia @EinsteinMillan (aporrea.org) ], lo que está en juego es un desplome de al menos 16% en los ingresos de PDVSA para 2024. La industria se verá crecientemente obligada a mirar hacia el mercado negro y a buscar clientes furtivos en operaciones riesgosas. PDVSA obligatoriamente tendrá que otorgar grandes descuentos por la percepción de hacer negocios con una empresa sancionada.
Además del desplome en los ingresos por concepto de exportaciones petroleras, la producción propia excluyendo Chevron, ira paulatinamente debilitándose por la dificultad de acceso a naftas y diluyentes, así como a bienes y servicios.
Los anuncios de pequeñas operaciones de empresas desconocidas y otras de maletín, no darán el empuje suficiente a la alicaída producción propia como para marcar una diferencia notoria. Una de estas empresas desconocidas y que apareció de la noche a la mañana informa que apenas produce 625 BPD [ GoldPillar - PDVSA Joint Venture: Oil Field Update (venezuela-news.com) ], mientras que otra de ellas; la de un tejano que anunciaron con bombos y platillos, al parecer lo está pensando mejor. Es compleja la situación de PDVSA [ Einstein Millan Arcia on X: "Siempre hemos sostenido que acuerdos solo significan intenciones y no compromisos desembolso de capital. #PDVSA y sus bots perdieron el galillo diciendo a los 4 vientos sobre la empresa del millonario y ahora resulta, que "lo estan evaluando" Lea: https://t.co/IRRztRGM52 https://t.co/6PvTQfcoO3" / X (twitter.com) ]. No nos alegramos, pero todo indica que los negociadores involucrados por el lado de nuestra industria no parecieran ser los mejores.
No olvidemos que PDVSA tiene apenas 3 taladros activos y que solo para compensar la declinación de su producción requiere añadir entre 80,000 y 110,000 BPD al año, mientras que para crecer requiere de una mayor y distinta actividad que no esta por ahora a su alcance.
Lo cierto es que la meta del 1,200,000 BPD ofrecida por Tellechea para 2024 no será posible. Es otra oferta fallida del ministro de petróleo, tal y como todas sus ofertas anteriores. La recuperación de nuestra industria no será fácil. Requerirá de acciones poco ortodoxas y de un esfuerzo que; a juzgar por los hechos, no está en capacidad de ejecutar la directiva actual.
Dicha recuperación requerirá de acciones que solo podrán ser ejecutadas por una directiva preparada y experimentada, en sincronía con un gobierno que genuinamente sea reconocido como respetuoso y respetable y de unas instituciones que garanticen la justa, oportuna y balanceada aplicación de las leyes.