Todas las medidas preconizadas por el presidente bolivariano, Hugo Chávez Frías, se le consideran como un batacazo y, lo más importante, asume la responsabilidad de abrir tentáculos para conformar una economía aceptable, donde, la historia busca transformar un Estado hacia un eje más profuso y lograr coincidir los discursos políticos en una vena ideológica capaz de aleccionar la imagen reformista que aspira el Sur,
Solo existe, una circunstancia adversa, todo esta en papel y nadie desea asumir el liderazgo, solo el presidente acomete algunas determinaciones. Hay que romper muchas piernas para requesbrajar las opiniones contrarias en el sentimiento socialista que en nada colaboran con el pensamiento del liderazgo unificado. Las propuestas, deben ser tomadas en cuenta y mantener una dinámica para la movilización del fervor bolivariano. Son jornadas de trabajo para considerar las dinámicas de una movilización disciplinada como doctrinal. Hay que desenmascarar el engaño al presidente. El celo esta más que justificado, la respuesta esta en el 26S.
Los partidos principales de la oposición .todavía se encuentran vinculados con algunas fuerzas y se vienen beneficiando de los fondos públicos, en contraste, con la militancia del PSUV, ya que muchos carecen de viviendas y empleo fijo. Se le debe dar mayor excitación a las próximas elecciones del 2012. La democracia exige cambios constitucionales y algunas reformas jurídicas.
La historia, nos indica que debemos cambiar para avanzar tecnológicamente. Debemos avanzar a la par de la economía mundial asumiendo nuevos retos y cristalizar un país totalmente capitalizado al servicio de los sectores populares. Un nivel de carácter social que debe ser atendido con suma urgencia para transmitir un mensaje utilitario y que, los cambios a experimentar debe llevarnos a una nueva dimensión de lo que verdaderamente refleja una concepción de nación.
Se debe lograr una sustentable de la nueva economía, donde todos los venezolanos y extranjeros confiemos en la nueva dimensión del poder político para construir vías de desarrollo que permitan la valoración cierta de nuestros recursos y seguir, construyendo nuestra propia historia.
Hay que sentar responsabilidades para avanzar ideológicamente. La oposición debe trabajar más por Venezuela e identificarse más con su tierra, ya basta de sentirse extraños en su propia tierra. Deben unificar criterios para gobernar con su gran opositor, Acción Democrática. Es darle peso a la ley y no contravenir las leyes democráticas. El presidente sentirá el compromiso de domesticar de nuevo los linderos del poder.
El misticismo quedó atrás, necesitamos un mayor dinamismo en la cultura política venezolana y seguir avanzando en el cumplimiento de los programas trazados en el Plan Simón Bolívar. El mapa electoral es bastante claro.
