Una brecha que arrecha

El cerrado resultado de las elecciones presidenciales que diera la primera magistratura al candidato de la patria Nicolás maduro Moros tiene a pesar de nuestra sorpresa, una explicación razonable y hasta una providencial llamada de atención para la dirigencia política revolucionaria que tras la partida física del comandante Chávez, se estrena ante las mismas fauces del fascismo opositor, controlado y maniatado en 14 años de cambios estructurales hacia la construcción del socialismo del siglo XXI, pero respaldado por un amor infinito de un pueblo hacia un líder carismático, capaz de quemar las patas de su cama para cocinar, tras los ataques despiadados por estos mismos días de abril.

Se conjugaron muchos factores para estrechar la brecha electoral entre simpatizantes y opositores al cotejar el futuro de la revolución, entre ellas:

1-La impunidad, que permitió a la misma dirigencia opositora reeditar los sucesos del Abril 2002.

2-El desabastecimiento, que permitió a pesar de los esfuerzos del gobierno, las estrategias desestabilizadoras de grandes monopolios empresariales privados.

3-La corrupción, que permitió la existencia de nuevos burgueses “revolucionarios” en las empresas estratégicas del Estado y la absorción en todos sus niveles de familiares y amigos, sin ninguna conciencia de socialismo o patria, salvo los cantos en campañas electorales.

4- La ineficiencia, que permitió el saboteo de la electricidad, la baja producción petrolera, la baja producción de materiales de construcción, textiles, etc.

5-La inflación y la Especulación, que permitieron el alto costo de la vida, la degradación del salario, la desinversión, la ausencia de oferta y la demanda y otros.

6- El contrabando de extracción, que permitió la permeabilización fronteriza de productos de la cesta básica sin control.

7- Los medios de comunicación, que permitieron secuenciar por enésima vez las estrategias golpistas y el servicio de redifusión gratuito de sus integrantes.

8-Las empresas mixtas, que permitieron a los reinos español y norteamericano hacer labores de desestabilización en territorio venezolano

9-Campaña electoral floja en las empresas estratégicas del estado, que permitió la ausencia o desgano participativo del personal activado.

10-Falta de formación revolucionaria, que permitió que los empleados nuevos, desconocedores de la historia reciente de las luchas obrero patronales, carecieran de la conciencia necesaria para asumir el compromiso.

11-La muerte del Comandante Chávez, que permitió tras la incertidumbre del liderazgo emergente de Nicolás Maduro, la migración de votantes al lado opositor de un sector abstencionista por excelencia.

12-Focalización de beneficiarios de la revolución, que permitió la indiscriminada entrega de viviendas, créditos, autos, presidencias, gerencias, direcciones, empleos (SISDEM), etc. a personas no comprometidas con el proceso y potenciales opositores-beneficiarios.

13-La falta de conciencia y disciplina de los cuadros, que permitió un triunfalismo mortal.

Estas son algunas de las razones bajo la punta del iceberg, que conllevaron a la brecha que nos arrecha y que llevan a reflexionar como colectivo el futuro de nuestra revolución socialista. Nuestro presidente Nicolás Maduro, emulará al comandante Chávez en la titánica tarea de resurgir como el ave fénix, llevando en sus garras 20 gobernaciones, la mayoría de las alcaldías, la mayoría de la Asamblea Nacional, un barril de petróleo a precio justo, una envidiable posición en el ámbito geopolítico y un plan de la patria presto a cumplir, para retomar la senda del bienestar y la máxima felicidad de un pueblo que quiere seguir invicto.

#Viva Chávez, Viva Maduro

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Elías Antonio Martínez


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