Las elecciones municipales del 8D serán más importantes que anteriores procesos del mismo tipo. La abstención seguramente bajará. Sin embargo, y eso debe preocuparnos, no se estarán confrontando dos modelos de sociedad, la confrontación será entre dos estrategias electorales… Seguimos inmersos en la “cultura capitalista”. No hemos sido capaces, como lo expresan las Líneas Estratégicas de Acción Política, de trascender hacia la “militancia socialista”. Tampoco de cumplir el objetivo histórico del Plan de la Patria, ahora convertido en Ley de la República, de “continuar construyendo el socialismo bolivariano del siglo XXI, como alternativa al sistema destructivo y salvaje del capitalismo”.
El impulso al consumismo, esencia del modelo capitalista, es lo que prevalece en la acción de gobierno y lo que hemos fortalecido desde el punto de vista ideológico. Se debate políticamente sobre los precios de los electrodomésticos o de los carros, los cánones de arrendamiento de los locales comerciales o el volumen de las importaciones. Un alza de las tasas de interés para el ahorro de 3.5% y la campaña publicitaria “Bájale dos al consumo y súbele cuatro al ahorro” no pueden valorarse como propuestas serias. Los Centros Comerciales que, de ahora en adelante, tendremos que identificar con mayúsculas, compiten con las Plazas Bolívar de las capitales de estado, como centros de la vida política y económica de nuestras ciudades. Desde estos espacios declaran ministros y ministras, y funcionarios de toda índole, y se realizan las inscripciones en el Registro Único de Pequeños y Medianos Comercios.
La estrategia electoral del gobierno se centra en reconquistar algunos sectores de la clase media y en proteger la capacidad adquisitiva de los electores, la estrategia de la oposición, en identificar las elecciones como un plebiscito en torno a la gestión del Presidente Maduro. Las campañas publicitarias, el manejo de los medios de comunicación y la maquinaria electoral están presentes, por igual, en ambos bandos. ¿Quién obtendrá mejores resultados con estos instrumentos técnico - electorales propios del capitalismo? La frase del Che, tantas veces citada por Chávez, advirtiendo que “no se puede construir el socialismo, con las armas melladas del capitalismo” quizás nos dé una respuesta.