No voy a decir que fracasamos en materia ambiental porque no pudimos resolver el problema de la recolección de desechos sólidos, porque algunos funcionarios (no servidores) le concedieron mayor importancia a la adquisición de equipos en vez de una óptima política de saneamiento que incluyera el reciclaje y tampoco insistiré en ese fracaso cuando ahora es que alguien por allí con sentido –aunque retardado en el tiempo- habla de que hay que cuidar las cuencas, cuando hace varios años atrás entrevisté a una socióloga y experta en cuencas, graduada en la UCV, y quien planteaba que lo que había que cuidar eran las cuencas de nuestro país.
Me pregunto si tenemos un retraso, si quienes tienen en sus manos el problema se creen que son los únicos que saben, si hemos tenido algunos funcionarios (no servidores) ignorantes o que no les interesa para nada la revolución bolivariana y mucho menos a las personas. No hacemos un análisis, solo escribimos sobre algunos aspectos de la realidad circundante.
Sigo creyendo que eso forma parte del fracaso que nunca debimos tener en las elecciones para elegir a una gran mayoría en la Asamblea Nacional, pero ocurrió, como lo que sigue ocurriendo es que tenemos a un equipo defensor del neoliberalismo y padrino de las guarimbas en el legislativo, mientras el otro que cree en las personas y que le corresponde ponerle el hombro a Nicolás Maduro ha tenido sus bemoles y cuya eficiencia trata de acometer ahora el presidente con los motores que ha preparado –en consulta- para enfrentar la crisis que nos afecta.
Hemos tenido malas respuestas, tantas como esa del Café colombiano, que en una feria, invita a que lo prueben, subrayando que no es cocaína, lo cual indica que se deja en manos poco decentes la promoción de proyectos de gran envergadura y fundamentales a la sociedad.
Pero que nadie se crea que eso solo ocurre del lado allá de la frontera, pues la sociedad mediática es cómplice de eso y mucho más y hasta asume rol protagónico como se ha hecho en Venezuela y otros países.
¿Fracasamos en la revolución?
No lo creo. Por el contrario, cada día se fortalece mucho más, porque como decía el Comandante Chávez, es la gente la que hace la revolución y los lideres son una expresión e interpretación de lo que las grandes mayorías despertadas sueñan.
Por años se dijo, mejor dicho lo dijeron líderes naturales de importancia, como con quien compartíamos –aunque poco- como Alí Primera, que es el pueblo quien debe salir siempre adelante porque ha sido el más agredido, desde que llegaron los europeos, antes de nacer Simón Bolívar y después de su muerte.
En estos días muchos dicen ser seguidores de Bolívar, de Simón Rodríguez, de Zamora, de Castro y unos cuantos mas, siempre que –mentalmente lo desean- le pongan “donde haiga”, porque hay que decirlo, ciertas personas lo han hecho mal, aprendieron esa conducta malsana que les heredó el bipartidismo gobernante y degradó al país y que determino el conocido “Caracazo”.
El asunto de la basura o desechos –que no difiere de la mala política- nos dice que, en 16 años de gestión revolucionaria, no lo hemos podido conocer bien. ¿Por qué no comprendemos lo ambiental y entendemos que es un desarrollo beneficioso, como la buena política, para los habitantes de un país y de paso genera una cultura del respeto, la adecuada salud y la protección?
Y digo que no ha fracasado la revolución porque Hugo Chávez, ese gran Comandante, sembró una semilla –nada transgénica- en el corazón y mente de los venezolanos, que hoy apoyan al presidente obrero y mantienen férrea esperanza de que las cosas pueden ser hechas mejor que antes.
Lee el siguiente blog: wwwpertinentes.blogspot.com (Premio Aníbal Nazoa/2010) Mención Opinión)