Camarada Elías Jaua Milano; leí su articulo y coincide con cosas que muchos hemos venido diciendo; creo que una revolución tiene que ser profundamente ética y la ética no es un pendón colocado en la entrada de las oficinas listando una variedad de valores. Y lo digo en una de mis reflexiones; http://www.aporrea.org/ideologia/a225590.html “Hemos lamentablemente transitado la política sobre los mismos principios éticos burgueses y desde allí es imposible construir una nueva gramática que le de significado liberador a ciertos conceptos que son determinantes para un salto revolucionario, tales como: Poder; Gobierno, Protagonismo, Participación y Trabajo.”
Asuma Camarada Elías Jaua Milano la vocería de esta rebelión en marcha con el valor que otorga la fidelidad a la moral revolucionaria, antes que el tren de la historia lo arrolle a usted también.
Eso pasa por entender que en el marco de la militancia oficializada, (líderes institucionales nombrados en el partido, o que ocupen cargos públicos y una militancia mercenaria de operadores políticos) que se ha convertido en una estructura perversa para privilegiar a grupos de poder muy ajenos a la esencia socialista, es imposible desde allí generar los cambios que exige la patria. Cualquier extraordinaria idea esa estructura se la traga y luego la regurgita convertida en un esperpento creando mas desesperanza a nuestro pueblo, y sino vea todas las iniciativas del presidente Maduro desde la Ofensiva Económica hasta el Congreso de la Patria, eso sin hablar de las iniciadas por el Comandante Eterno.
Comience camarada Elías convocando un Nuevo Congreso de la Patria donde asista la otra militancia.
La de los indignados de la revolución, digo los indignados de la revolución no estoy diciendo los indignados contra la revolución. Hablo de una inmensa militancia que estoicamente aguanta las colas, algunas veces sin esperanza pero sin intención de valerse de un carnet o un amigo empleado para eludirla. Una militancia que aun con las angustias no se suma al coro de maldiciones como si lo hace la militancia mercenaria que de todo programa social hace un negocio. Una militancia que ya no se emociona con los anuncios oficiales porque la misma militancia corrompida es la encargada de cumplir lo anunciado; hablo de una militancia que esta en silencio, en su martirio tejiendo sueños, y que en cualquier momento renacerá como un nuevo 4 de febrero, cansada de tanta podredumbre, igual como lo hizo el heroico soldado. (http://www.aporrea.org/actualidad/a226421.html ).
Rompa las barreras del sectarismo camarada Elías y reencuéntrese con los Trotsky de la revolución Bolivariana.
No creo que cueste mas tenderle la mano a Giordani, Navarro, Ana Elisa, Vanessa Davies, que a Ricardo Sánchez. Vayamos al encuentro con esa inmensa cantidad de camaradas que la estructura gansteril no solo los apartó sino como lo hizo Lavrenti Beria en la época de Stalin, los acuso y los sentenció.
Vayamos al encuentro también de esa cantidad de colectivos y movimientos políticos como Marea Socialista que revindican el pensamiento y la acción de Chávez.
Abrebrecha y después hablamos