El presente documento intenta aportar algunas ideas para el debate que deberá realizar el IV Congreso del PSUV.
El evento se desarrollará en una coyuntura extremadamente compleja. La situación económica está presentando graves perturbaciones que afectan notablemente las condiciones materiales y espirituales de nuestro pueblo. La guerra económica, la caotización de los servicios públicos, el acoso internacional y la corrupción han configurado un cuadro dantesco que amerita ser atendido sin más dilación, con sentido estratégico y táctico simultáneamente.
Frente a la primacía de estos males, el IV Congreso está obligado a proporcionar a nuestro gobierno un conjunto de decisiones que potencien la gobernabilidad y la recuperación del bienestar común y la estabilidad en todos los órdenes. Sin duda alguna, la economía debe ser el gran tema. El hecho económico es decisivo. Lenin decía: la política es economía concentrada. Nos jugamos la continuidad de la revolución si no asumimos con seriedad revolucionaria la economía.
Por supuesto, también se abordará un conjunto de temas tales como: la transición al Socialismo Bolivariano, la defensa de la soberanía e independencia de la patria, la relación partido-gobierno, el nuevo modelo económico productivo, la estructura organizativa del partido, la ética y la contraloría social, la democracia interna, sus estatutos, la política internacional, la eficiencia revolucionaria en el ejercicio de los cargos públicos, la formación política y la calidad militante, la comunicación y la información a los militantes, entre otros.
Parto del reconocimiento de los avances democráticos significativos, que en un corto período histórico de dieciocho años, la Revolución Bolivariana ha logrado conquistar, pese al feroz ataque del imperialismo norteamericano, a la acción mediática y a una oposición conservadora, apátrida y oligárquica. También en la constatación de nuestras debilidades y nuestros errores que amenazan la prosecución del proceso revolucionario. Como revolucionarios, se debe promover un análisis que desempolve todo, porque dependiendo de la claridad del mismo, se podrá identificar nuestras potencialidades para consolidar el avance de la revolución.
¿Cómo debe concebirse al PSUV?
Lo concebimos como el instrumento político de la Revolución Bolivariana, cuyo propósito fundamental es la construcción del Socialismo Bolivariano o Socialismo del Siglo XXI. A tal efecto, debe ser el motor de la organización del pueblo, convirtiéndose en una poderosa herramienta para la unidad, la coherencia y la cohesión del accionar emancipador y liberador de los obreros y obreras, campesinos y campesinas, jóvenes, estudiantes, artistas, profesionales y técnicos, amas de casa, pequeños y medianos productores, comerciantes, intelectuales y pueblo en general.
Propuestas.
1. El PSUV debe ratificar su carácter socialista, anti-imperialista, anti-capitalista, humanista y bolivariana, orientada y guiada por la teoría marxista, el pensamiento de nuestro Libertador Simón Bolívar, el legado histórico del Comandante Hugo Chávez Frías y los aportes progresistas y emancipadoras producidas en la relación cultural iberoamericana. Su carácter será pluralista desde la perspectiva de las referencias teóricas que lo sustentan.
2. El PSUV reafirma su propósito en la construcción del Socialismo, acelerando su transición, así como también, la defensa irrestricta al gobierno bolivariano, a la profundización de la legitimidad del liderazgo del Presidente Nicolás Maduro, a la defensa del legado del Comandante Chávez, mediante la conformación de una gran fuerza revolucionaria con la capacidad de transformar la sociedad venezolana.
3. El PSUV ratifica su existencia en la lucha contra el capitalismo y toda forma de explotación del ser humano. En consecuencia, desarrollará condiciones para que el Estado Bolivariano procure el mantenimiento de un estado mayor de felicidad posible a nuestra población, con la profundización de las misiones y el sistema social.
4. El PSUV es y será una gran plataforma política para la unidad, la coherencia y cohesión de la praxis revolucionaria. Los retos que supone la construcción de la sociedad socialista requiere de la participación orgánica de todos los actores que intervienen en el proceso emancipador. Sería nefasto caer en la tentación del sectarismo, la exclusión y la prepotencia como características del accionar del partido respecto de sus aliados, compañeros de camino, actores coincidentes u organizaciones que se identifican igualmente con el socialismo.
5. El PSUV se propone la consolidación de la democracia bolivariana, mediante el ejercicio del poder popular protagónico. Es inherente a nuestro socialismo que el pueblo ejerza el poder político a través de organizaciones tales como los consejos comunales, las comunas, los consejos de trabajadores, los sindicatos, entre otros. La democratización del poder político para la toma de decisiones por parte del pueblo organizado en el ejercicio directo de su capacidad transformadora resulta una condición indispensable en esta etapa de transición. Asimismo, el PSUV nunca deberá actuar para adueñarse, secuestrar o subordinar la voluntad política soberana del poder popular a los intereses específicos de la organización. Sería un comportamiento contra natura que afectaría la construcción de unos de los componentes esenciales del socialismo.
6. El PSUV luchará por la transferencia de la mayor cantidad de atribuciones y competencias en la planificación, ejecución, evaluación y control de políticas públicas a los gobiernos locales, comunas y consejos comunales por parte del Estado Bolivariano.
7. El PSUV se propone construir un nuevo modelo económico productivo, diversificado, fundado en los valores humanísticos de la cooperación, solidaridad y privilegiando al ser humano y nunca a la lógica de la acumulación del capital. Modelo que debe liquidar el rentismo, el latifundio, los monopolios y oligopolios, así como también, las diferentes formas de producción que vulneren nuestros esfuerzos para el trabajo social y colectivo, no alienado. Deberá comprometerse con el impulso de cambios estructurales para garantizar una base económica que otorgue bienestar a nuestro pueblo y estabilidad política, que eleve la producción de bienes de primera necesidad y optimice la prestación de los servicios públicos.
8. El PSUV deberá tomar decisiones que conduzcan al gobierno en el enfrentamiento eficaz contra la hiperinflación, la especulación, el contrabando de extracción. Igualmente, deberá decidir sobre la producción, la política cambiaria, la política monetaria, el decrecimiento económico, el precio de los combustibles, entre otras variables que definen la guerra económica.
9. El PSUV deberá proponer un conjunto de iniciativas políticas que logren enfrentar con eficiencia la ofensiva del estado colombiano y su oligarquía. La apropiación indebida de bienes esenciales venezolanos constituyen un delito internacional (Contrabando). El partido propondrá al gobierno la eliminación del convenio cambiario entre ambos bancos centrales. También, solicitar al gobierno interponer ante órganos judiciales internacionales una demanda al estado colombiano por la comisión de delitos en contra de la estabilidad y la paz social del país. Asimismo, la puesta en escena de una política fronteriza con Colombia.
10. El PSUV asumirá una política para preservar la naturaleza. El capitalismo niega la condición humana y atenta contra la permanencia de la especie y el planeta. Por ello, el partido luchará por construir iniciativas organizativas orientadas hacia la defensa del ambiente, lo ecológico.
11. El PSUV defenderá nuestra revolución, nuestra soberanía nacional y mantendrá la unión cívico-militar. Ello comporta el desarrollo de los comités de defensa de la Revolución en los consejos comunales, unidos con la reserva, así como también, la organización de las milicias populares.
12. El PSUV deberá profundizar su democracia interna, consagrando en sus estatutos la eliminación del mecanismo de la Cooptación para la selección de los candidatos a cargos de elección popular y para los cargos correspondientes a las estructuras del partido. Igualmente deberá garantizar: a) la definición de la plataforma política como resultado de la voluntad mayoritaria de los miembros del partido y no la imposición de las cúpulas; b) la representación proporcional por género; c) Tutelar los derechos fundamentales de los militantes; d) consagrar normas y procedimientos que permitan un verdadero ejercicio político, mediante la concreción de instituciones tales como: la revocatoria del mandato de las autoridades, la rendición de cuentas, reconocimiento del debate de ideas y la conformación de tendencias alrededor de ellas, consulta permanente a la base militante y simpatizante para la escogencia de candidatos a los órganos de dirección y a cargos de elección popular; e) La temporalidad de los cargos de dirección.
13. El PSUV establecerá en sus estatutos la creación de un sistema de justicia interna con figuras e instituciones tales como: El Contralor Interno, La defensoría de los derechos del Militante y el Tribunal Disciplinario y de Ética. Ellas se expresarán en los niveles nacional, estadal y municipal.
14. El PSUV deberá limitar o condicionar las aspiraciones de los altos funcionarios, que correspondan al nivel nacional, estadal o municipal, de elección popular o designación ejecutiva, cuyas funciones y competencias se caractericen por acción de gobierno, a cargos de dirección del partido.
15. El PSUV deberá establecer en sus estatutos los principios y mecanismos para la lucha contra el burocratismo y los estilos de trabajo hegemónicos, excluyentes y sectarios, que vienen cercando el debate, ubicándolo casi exclusivamente en las cúpulas directivas de la organización, alejado del saber y sentir protagónico del colectivo militante y de nuestro pueblo.
16. El PSUV declarará su lucha frontal contra la corrupción en todas sus expresiones. Son formas de corrupción: el empleo del poder y la autoridad para obtener beneficios propios, ejercicio de presiones para el logro de resultados impropios o favores indebidos, el mal uso y la inobservancia de los dineros públicos, favorecimiento del entorno de intereses, las prácticas de nepotismo, entre otras. El IV Congreso deberá debatir las situaciones irregulares que se presentan en las estructuras derivadas de las políticas sociales de la revolución. También, los niveles de corrupción en sectores y miembros de nuestras FABN. Impulsará líneas de trabajo tales como: el impulso y fortalecimiento de la contraloría social, simplificación de la metodología administrativa, universalización de la información sobre las compras y adquisiciones de bienes mediante sistemas de acceso abierto, democratización de la toma de decisiones, rendición de cuentas periódicas y transparentes, entre otros.
17. El PSUV deberá solicitar la realización de una auditoría pública a todos los entes que administraron divisas hasta el año 2.017. Esta iniciativa tendrá como responsables al Ministerio Público y la Contraloría General de la República. Con ella, se descubriría la gran estafa que le han causado al país empresarios y funcionarios.
18. El PSUV establecerá en sus normas a la UBCH cómo la estructura territorial y sectorial de base más importante de la organización. Deberá incorporarse a dicha estructura los jefes de comunidad. La jefatura de la UBCH y toda su estructura durará en sus funciones dos (2) años, pudiendo ser reelecta por un periodo más. Igualmente, deberá ocurrir con los CLP.
19. El PSUV consolidará la formación política e ideológica de sus militantes. La superación de una visión pragmática, individualista, mezquina, con afán al lucro y a la ganancia fácil, resulta una tarea insoslayable. Debe ser una actividad central del partido.
20. El PSUV trabajará enfáticamente por la creación de la V internacional socialista y anti-imperialista como expresión política de la geometría multipolar.
Chávez Vive y Vive. Venceremos