En realidad, a veces uno escucha asuntos que lo ponen a pensar, mientras otros sueltan sus puntos de vista, sobre esos mismos asuntos, sin pensarlo dos veces, tal vez porque tienen eso que llaman olfato o tienen conocimientos de algunos antecedentes que los demás ignoran.
Por lo menos, nosotros, lo que hemos aprendido es a desarrollar nuestro olfato periodístico, a lo que le añadimos siempre razonamiento y reflexión con las respectivas dosis de lógica y sentido común. Y, en consecuencia, me parece bien disparatado que este gobernador larense piense, aspire, medirse con el líder de la revolución bolivariana.
Lo que si vemos con claridad, es que hay un mensaje muy parecido a otros que han sido esgrimidos en el ámbito oposicionista desde el 2002, es decir, “que no es posible construir un país con desunión”, cuando tal “desunión” ha sido establecida desde hace añísimos por los sectores del poder económico en Venezuela y el resto de este continente y el mundo.
Este señor habla de los escombros de la desunión y uno se pregunta, ¿Hemos vivido en unión en el país con tanta desigualdad? A no ser que la desigualdad silenciosa que estuvo viviendo la nación venezolana en el pasado sea para este gobernador sinónimo de unión.
¿Rivalidad fratricida? ¿Quién ha puesto los muertos en esta rivalidad a la que este señor hace alusión? ¿En el caracazo del 27 de febrero de 1989 y en el golpe de Estado de 2002 perecieron los representantes y líderes de la oligarquía, gobernadores y ministros? Los muertos siempre los pone la gente humilde.
¿Desencuentro? ¿Cuando se han encontrado en este país y continente los pendejos y la gente de poder político y económico, la rancia oligarquía? Los únicos momentos en que han logrado encontrarse han sido -¡Si acaso!- en los tristes días de cobro de los jornales, y decimos tristes porque siempre estuvieron mal pagados.
¿Falta de autocrítica de Chávez?, cuando hasta ahora es el único en reconocer en el país sus propios errores. Revisen los programas “Aló Presidente”, para que vean las veces que Chávez los ha reconocido y ha enfatizado en la necesidad de que critiquemos.
¿Quién va a inhabilitar a este señor? En primer lugar, él se inhabilita solo. De hecho ya está inhabilitado. En segundo lugar, ¿A quien ha inhabilitado el gobierno? Ellos mismos se inhabilitan o ¿es que acaso no recuerdan a su vecino Rosales?
¿Chávez irrespeta al estado Lara? ¿En qué? ¿Porque no hacen una encuesta real y tratan de comprobarlo? ¿Qué es eso de que el país reclama conciliación? Este señor hace uso de un lugar común, si acaso el de algunos periódicos, con eso de que el país clama, ¿De qué país habla? ¿Del mismo que habla Rosales, los pocos adecos seguidores de Henry Ramos, de Primero Justicia, de la cúpula de la conferencia episcopal, de los adoradores de súmate, de Nixon Moreno, de lo poco que queda de Copei?
¿Que Chávez escuche el rumor de una nación? Pues precisamente eso es lo que ha hecho el líder de la revolución bolivariana, escuchar no solo el rumor, sino el clamor de una nación cuya mayoría estuvo excluida, siempre despojada, humillada y también ofendida en Venezuela.
Cuando este tipo de cosas ocurren, ahí es cuando el pensamiento se torna en palabras, ¿Este señor aspira a liderar a toda la oposición? ¡¡ La cuestión se le va a hacer cuesta arriba!!
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