Hace 8 años del golpe de estado contra Chávez. Chávez sigue al mando y seguirá.
Nuestro comandante presidente se dirigió al pueblo en la avenida Bolívar, donde juramento a la milicia armada que comienza a cumplir el rol del ejército del pueblo armado para defender nuestra revolución.
Yo recuerdo que yo estaba haciendo una cola en el banco, hace unos años y por supuesto los escuálidos hablaban. Hablan siempre, aprovechan cualquier momento en las colas para sus campañas mediáticas y de rumores y chismes…Yo solamente le dije a una de las personas que tanto replicaban que mi comandante había logrado una facultad gigante entre los políticos, hablar en un lenguaje que entendía el pueblo. Esa gran facultad sigue siendo la fuerza de nuestro proceso. A quienes se escudan en los parlamentos prefabricados que van contra el culto a la personalidad debe dolerles bien fuerte cuando la voz y el verbo de Hugo Chávez se agiganta en los parlantes y llena los corazones de todo un pueblo que está dispuesto a defender sus sueños y sus logros.
Muchos apuestan al cansancio de Chávez y al agotamiento del pueblo. Tan solo basta su palabra clarificadora, su estrategia colosal y su mando meridiano para renovar con mucho más ardor las fuerzas de cambio, las fuerzas del pueblo, el poder cada día más grande los explotados y los desposeídos en toda nuestra patria y en el continente.
Todos llevamos grabado aquellos dos días en que un golpe de estado nos quitó al comandante. Los países del mundo nos vieron tomar las calles, bajar los cerros y marchar a rescatar nuestra democracia. Todos tenemos el retumbar de la alharaca que estos burgueses montaron en el Palacio de Gobierno donde sin el más mínimo precepto democrático por un decreto firmado por Pedro Carmona se quitaba de un plumazo la validez de la nueva constitución aprobada por todos, como se destituía a la Corte Suprema de justicia, como se pretendía regresar al pasado del poder neoliberal y todos recordamos como corrieron como gallinas cuando el clamor de un pueblo enardecido tomaba el Palacio de Miraflores para exigir que regresara nuestro Hugo Chávez Frías.
No ha nacido nadie que pueda parársele enfrente con algún nivel de palabra siquiera para oponerse a nuestro comandante en jefe. Cualquier otro 11 tendrá su trece y de ahora en adelante con la diferencia de que desde ahora el pueblo también es el ejército armado que saldrá al frente a mínimo intento de agresión por parte del imperialismo yanqui o cualquiera de sus lacayos de Colombia.
Hay hombres en los procesos históricos llamados a cumplir misiones de liderazgo y que no se pueden reemplazar hasta tanto no cumplan su misión. El pueblo de Venezuela tiene bien claro quien es éste hombre en nuestra historia. Hoy ha salido a las calles para mostrarle al mundo entero que la revolución bolivariana llego para quedarse. Desde hoy hasta la gran victoria de Septiembre seguiremos creciendo y respaldando nuestro desarrollo revolucionario. Ante lo cual las fuerzas del pasado no harán más que conspirar tratar de activar las campañas sucias de siempre, prepararán denuncias de fraude cuando los resultados nos den la victoria, conspirarán de la mano del imperio mediático y de las zancadillas que montarán con los gobiernos pitiyanquis de Colombia, Perú y Panamá, el imperio pondrá a navegar sus barcos de guerra e intentará de nuevo decir que Venezuela es el país que trafica la droga en el mundo, y sin embargo, les repetimos sin cansancio: cada 11 tendrá su 13, ¡Venceremos!
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