“Para una persona no violenta, todo el mundo es su familia”
Mohandas Gandhi…
Hay muchas interrogantes sobre el curso que tomará el conflicto colombiano, por los resultados de la reciente acción quirúrgica militar denominada "Operación Sodoma" , en un ataque con tecnología electrónica de ultima generación en la Serranía de La Macarena, poniéndole fin a la existencia de Jorge Briceño, el ‘Mono Jojoy’, comandante del Bloque Oriental de las FARC.
Se habla si entre los cuerpos trasladados al Instituto de Medicina Forense de Bogotá, estaría el de el alias “Romaña”, el estratega de las ‘pescas milagrosas’ según el gobierno colombiano, autor de los secuestros masivos de viajeros en las carreteras colombianas; también intentan precisar la suerte que pudiera haber corrido Tanja, la guerrillera holandesa integrante de la guardia personal del mono Jojoy.
“Sodoma”, nombre escogido por las fuerzas militares colombianas para denominar la operación militar, asociando a La Macarena, una zona altamente privilegiada ambientalmente por la naturaleza, por cuanto en ella confluyen los ecosistemas andino, amazónico y orino cense, y de la histórica influencia (zona madre) de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), asociándola con la ciudad bíblica arrasada por castigo divino. Muchos libros de la Biblia utilizan este pasaje de la historia de Sodoma como ejemplo de cómo los pecados son castigados.
El Presidente Juan Manuel Santos desde Nueva York calificó a ‘Jojoy’ como “el símbolo de la sevicia, de la crueldad, de la inhumanidad de una organización que, por casi medio siglo, ha jugado con la vida y la libertad de los colombianos”, y llamando a las FARC a desmovilizarse o atenerse a las consecuencias. “Las FARC se están desmoronando por dentro”. El éxito de esta operación se debió a la colaboración de gente de las propias FARC, (compradas con millones de dólares; o sea la corrupción revolucionaria) del permanente asedio de nuestras fuerzas armadas. Les notifico a los cabecillas de las FARC y a los guerrilleros: “vamos por ustedes, no ahorraremos esfuerzo alguno; personalmente seguiré al frente de la estrategia”. Finalizó el Presidentes Santos.
En Colombia las reacciones se cruzaron en algunos casos, en muchos hubo regocijo; en otros, escueta satisfacción, también los que manifestaron mucho temor por lo que pueda significar este revés para la guerrilla, tras el bombardeo al “campamento madre” de la FARC, como lo catalogó el ministro de Defensa, Rodrigo Rivera. Llama mucho la atención del generalizado ambiente festivo por la muerte de un ser humano, independientemente de su signo ideológico, el hecho sintomático de lo que fue su accionar en esa lucha armada, viéndose todavía una inmensa herida, por la que atraviesa este hermano país.
Este ha sido el golpe más duro sufrido por la guerrilla de las FARC, en toda su historia con la muerte de uno de sus principales jefe militar.
La baja del mono ‘Jojoy’, un figura “irremplazable, y de mucho carisma ante sus hombres significa “un punto de quiebre muy importante” para las FARC, que están en un proceso de “demolición”, por parte del gobierno de Juan Manuel Santos, y con la pérdida del mando centralizado, muchos de los miembros del secretariado están fuera de Colombia, y otros secretarios comandantes aislados por el asedio de las fuerzas militares y policiales. Esto no significa que esté liquidada la guerrilla, o que no puedan seguir combatiendo.
Tras la baja de ‘Jojoy’, basta saber quién será su reemplazo en la jefatura militar de las FARC, y si la confrontación bélica se agudizará o habrá espacio para una real pacificación.
Desde que Raúl Reyes, fue dado de baja por las fuerzas militares colombianas en el bombardeo de su campamento, en territorio ecuatoriano, y tras la muerte natural, del líder histórico de las FARC, Manuel Marulanda, así como el asesinato de Iván Ríos, miembro del Secretariado, por uno de sus escoltas para cobrar una millonaria recompensa. Alfonso Cano pasó a la jefatura máxima, y el mono Jojoy, era el segundo lugar en la dirección.
El próximo objetivo militar del gobierno colombiano, parece ser es Alfonso Cano, quien es rastreado electrónicamente, por tierra y aire en la zona del cañón de Las Hermosas, en el departamento de Tolima.
Analistas políticos/militares no descartan que sectores de la ultraderecha, se mimeticen en la previsible reacción guerrillera para desencadenar una ola de atentados en Colombia.
Percasita11@yahoo.es