El apoliticismo de Su Santidad El Papa Benedicto XVI es un mal chiste, es una tachadura histórica, es un pensar irrealidades.
¿Está Su Santidad desorientado al extremo de atacar a la dama de Brasil Dilma Rousseff?
Cuando una persona se ensimisma corre el riesgo de perderse hacia adentro-no parece ser el caso-pero puede perderse hacia afuera cuando se la pasa inventando conspiraciones que pone a andar. Hay quienes se extravían indefinidamente porque viven en un mundo que ya no existe.
Convengo en que el mundo de las sensaciones es difícilmente perceptible a distancia pero es inferible que aquellos quienes viven bajo el peso de tantas miserias acumuladas por un dogmatismo incurable, deben vivir muy mal, amargados, son quienes no suelen dejar su bilis en casa, tal como los prelados de la Conferencia Episcopal Venezolana-CEV-émulos de Su Santidad El Papa Benedicto XVI y que andan con los ojos irritados, enardecidos de odio por no poder derrocar a Chávez.
Lo peor de vivir en este mundo es no poder abrazar a una mujer. El colmo de la estulticia es que quienes viven de ese modo hagan del tema del aborto un arma política; hoy se la dedicaron a Dilma Rousseff en Brasil, para tratar de impedirle llegar a la presidencia, tal como ayer lo hicieron acá en Venezuela contra Chávez, para evitar la aprobación de nuestra Constitución Bolivariana de 1999. Fracasaron y seguirán fracasando.
Su Santidad El Papa Benedicto XVI no tiene autoridad moral alguna para abordar el tema del aborto porque se supone que Él nunca ha abrazado a una mujer-¡biiiichooo!- mal podría comprenderla, el tema del aborto es un tema de enorme complejidad pero que debe ser asumido en primer término por esa mitad del mundo a la que El Vaticano excluye. No hay sacerdotisas ni papisas ni cardenalas ni obispas ni arzobispas; para El Vaticano, la mujer es menos que un cero a la izquierda.
Supina hipocresía la del Vaticano, embestir contra la mujer esgrimiendo derechos que a ellos les son ajenos, nada tienen que decir del aborto. De lo que se trata es de mantener su precaria y menguante hegemonía colonial y evitar los procesos de liberación política y social que se desarrollan en Suramérica.
La Alba, la Caricom, el Mercosur y, particularmente la Unasur y todas las organizaciones multilaterales integracionistas son objetivos a destruir por parte del imperialismo vaticano, tanto como por el imperialismo norteamericano.
Ya es observable el desesperado cabildeo del Pentágono, de la Casa Blanca y del Departamento de Estado norteamericano para generar conflictos entre países de la región y con ello apelar a la OEA para tratar de reposicionarla, hacerla participar en las “soluciones” y exhibirla como el non plus ultra de la diplomacia internacional, siendo que la OEA no es más que “un cadáver inmortal”, un “Cid” del aparato militar norteamericano, “un ministerio de colonias”-como diría Fidel-o acaso, simplemente una mierda.
Y El Vaticano no deja de jugar su papel desestabilizador, injerencista, contra toda nuestra región, no sin comulgar con el “Consenso de Washington”. Desestabilizar a Brasil juega en los planes para asolar a Venezuela. El conflicto entre Nicaragua y Costa Rica es parte de esa tramoya. El Cardenal Jacinto Berloco tendió una trampa a Noriega en Panamá, lo asiló en su nunciatura y luego lo entregó a los gringos pero acá, el mismo Berloco tuvo a Nixon Moreno y no lo entregó a la justicia venezolana que lo reclamaba con toda justificación, por violador y asesino.
El consuetudinario abuso infantil por parte del alto clero no es tema de discusión para ellos; en cambio, por lo del aborto forman una alharaca injustificada.
¡Hay que descorrerles el velo!
Hay una velada ofensiva imperialista contra la consolidación de la Unasur, que se reunirá a mediados de este año, y hay que estar atentos para desbaratarle el juego al muñequito de torta que el imperialismo instaló en la secretaría general de la OEA, para torpedear la integración suramericana. Ellos inventarán escenarios de conflictos interpaíses para darle protagonismo a Insulsa, SS El Papa jugará su papel y cobrará su parte, pero nuestros pueblos y nuestros gobiernos deben estar atentos por anticipado, para desbaratarles su criminal arremetida.
Brasil es el país del mundo con mayor número de católicos. Que Su Santidad El Papa Benedicto XVI haya sido derrotado allí, precisamente, y por una dama, denota que esa iglesia adolece de una severa crisis de identidad con sí misma.
Hace pocos meses apagué mi cerebro para ciertas reparaciones, yo había comprobado que no todo ahí estaba en su lugar, así que me eché a los cuatro vientos y me dejé llevar. Es fascinante que el viento le dé a uno en la cara, con fuerza, nada es mejor que conectarse con la naturaleza para renovar el coco; es bueno estar en cero de vez en cuando, cada cierto tiempo y después, poner a funcionar ese bicho. Es la razón por la que no estuve enterado de cómo el Papa atacó con desparpajo a la dama de Brasil que aspiraba la presidencia; y, afortunadamente triunfó y le dijo en cierta forma al alto prelado: ¡Tooooma tu tomateeee!
Nadie debe sentirse ofendido por una sana crítica para que, sí está desorientado, pueda resituarse frente a la realidad. La diferencia entre un loco y otro es que algunos de vez en cuando se van a pescar al río o al océano mientras que otros viven enclaustrados, urdiendo maledicencias, desperdiciando la vida.
Disfrutar los beneficios del aire puro es reconfortante para la cabeza.
SS El Papa Benedicto XVI podría irse a ver el mar-tan sólo eso-y/o a sembrar una matica de mango, a hacer siquiera un trabajo comunitario y le sentaría muy bien.
El hombre debe trabajar para poder tener la cabeza sobre los hombros. Y, abrazar a una mujer para llenarla de ternura, entonces, sólo así adquirirá el derecho a opinar sobre los sentimientos y sobre la vida.
Nota: Aclaro que SS significa Su Santidad, no la SS nazi cuyos integrantes cometieron tantas atrocidades, tantos crímenes.
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