Los elementos visuales del mensaje se identifican mucho con la realidad superficial pero suelen tener conexión con lo de adentro; hay que buscar con lupa esa conexión para descifrar el mensaje en cuestión, sobre todo si se trata de mensajes envenenados.
Todo parece relacionarse con todo y, a partir de ello, si uno quiere conocer a profundidad la realidad tiene que hacer un esfuerzo de búsqueda, indagar acerca de lo relacional de las cosas, de eso se trata con esta reflexión.
Hace poco durante una reunión de la Organización de Estados Americanos -OEA- nuestra Canciller “Dulce” Rodríguez tuvo el infortunio de sentarse al lado de Insulza; mas eso no fue óbice para que ella descollara con elocuente brillo en su desempeño; sin embargo, a medida que ella iba desplegando su argumentación, Insulza acusaba su descontento y animadversión con gestos inapropiados y modales antihigiénicos brincando como pollo con moquillo y soplándose los mocos, aunque en justicia, no con la mano pelá como Ismael García sino con un pañuelo.
Y eso no fue todo sino que luego Insulza declaró a la prensa, necedades que cayeron muy mal entre el gentilicio venezolano.
Valdría la pena saber si Insulza exhibiría ese comportamiento estando al lado de Obama.
Estimo que Maduro debería llevarle de obsequio a Insulza un ejemplar del “Manual de Carreño” tal como el Comandante Chávez a Obama con un ejemplar de “Las venas abiertas de América Latina”, de Galeano.
Y no es que el “Manual de Urbanidad y Buenas Costumbres” o simplemente “Manual de Carreño” de Manuel Antonio Carreño (1850), me cale; no que no, tampoco yo me inscribo en modales afectados, pero yo no soy señorón ni nada que se le parezca. Eso sí, defiendo el fondo del asunto, el respeto al gentilicio de la patria venezolana, a buen entendedor pocas palabras bastan e Insulza, falta´e respeto, que vaya a lavarse ese paltó (con ace).
Por otra parte, Insulza olvida que él accedió a Secretario General de la OEA gracias a la determinación de Venezuela, que en conjunción con la mayoría de nuestros países tuvo una puja bestial contra el representante de México que era la ficha de los gringos, para entonces cuando él fue electo, y luego dejó la peluca para arrodillarse ante el imperio.
Dicho de otra manera, una vez electo por nosotros, Insulza se derrapó de rodillas ante USA.
¡Que le vaya bien!
