De nuevo los EEUU nos toman como pendejos y creen que lo de Macondo es tal cual como lo describió Gabriel García Márquez en Cien Años de Soledad. Todavía piensan que con espejitos pueden hacernos creer que el verde es azul o que el 1 es 5.
Primero para atacar a Afganistán se valieron del cuento de las mujeres con la burka, las cuales según ellos eran obligadas por los talibanes a mantener su cara tapada. Lo que no dijeron fue que sus aliados de Arabia Saudita obligan a sus mujeres también a usar la burka. Claro estos son aliados y si pueden. Luego en el primer ataque a Irak hablaron de las armas de destrucción masiva y una muchacha relato como estos malvados iraquíes habían bombardeado y torturado a unos niños en un hospital. Con el tiempo se supo que no existían las armas de destrucción masiva en Irak y que la tal muchacha era la hija de un embajador de Qatar y que era un burdo montaje lo dicho por esta chica. Posteriormente, engañaron al mundo entero con lo de la caída de las torres gemelas. Armaron la historia de que unos terroristas entrenados y pagados por Irak habían destruido el Central Park con dos aviones que habían secuestrado. Los que nos gusta la investigación de siniestros, la estadística y las teorías probabilísticas sabemos que es casi imposible que en un mismo evento se caigan tres edificios de la misma manera si las condiciones en que se desarrolla el incendio son diferentes. En este caso, los aviones chocaron con las torres en diferentes pisos y con inclinaciones distintas y al tercer edificio no le impactó ningún avión; sin embargo, las tres edificaciones colapsaron de la misma forma, es decir, como una explosión controlada. Diríamos que la probabilidad de que esto se dé es muy cercana al cero.
Otra historia de espejito de los EEUU fue el de la toma de la Plaza Verde de Trípoli en Libia por parte de los supuestos opositores al gobierno de Gadafi. Se descubrió que era un montaje digno de las películas gringas. En Doha, Qatar, se realizó la filmación de estas imágenes falsas. Toda esta truculencia sirvió para apoyar el ataque a Libia.
Ahora el actual gobierno estadounidense se estrena con un espectacular montaje digno de la guerra de las galaxias. Según ellos lanzaron la madre de las bombas no nucleares (11 toneladas de dinamita, la bomba de Hiroshima era de 15 toneladas) a un centro de túneles usados por terroristas, matando a 36 miembros del Daesh. Según los propios militares estadounidenses el Daesh o Estado Islámico cuenta con más de 1500 militantes en Afganistán. De aquí nos surgen varias interrogantes:
1. Si los estadounidenses sabían de estos túneles, ¿por qué usar una bomba tan costosa y tan poderosa para destruir tres (3) túneles y sin saber si en ese lugar iban a estar los terroristas en ese momento? Se supone que los usaban como vía de traslado. Por otra parte, qué tan profundos y sofisticados pueden ser unos túneles cavados por un grupo terrorista. Según datos aportados por los mismos gringos, el Daesh tiene poco tiempo actuando en Afganistán, como es que se dieron abasto para construir una red de túneles tan gigantesca y a la vez llevar a cabo acciones terroristas. ¿Es fácil hacer un túnel para vivir y trasladarse de un lugar a otro?
2. Siendo esta una bomba tan potente como es que en menos de dos días ya saben cuántos muertos ocasionó la explosión. Se supone que el poder explosivo destruyó todo, incluyendo las personas que allí se encontraban. Lo cual dificultaría el determinar el número de muertos. Esto requeriría un trabajo arduo de identificación de cadáveres; igualmente el saber cuántos túneles destruyeron.
3. Según la información emitida por los militares estadounidenses, en el lugar estaban todas las armas del grupo de terroristas. ¿cómo lograron saber esto luego de lanzar la madre de las bombas no nucleares?
4. ¿El costo de la bomba en dólares justificaba su uso en unos túneles? ¿No era más fácil, económico y hasta estratégico el conocer la extensión de estos túneles ingresando con tropas especiales o robots?
5. ¿No era mejor capturar vivos a estos terroristas e interrogarlos a fin de determinar sus planes y otros datos pertinentes a su neutralización?
6. Cuando vemos, las imágenes emitidas por el gobierno estadounidense del lanzamiento de la bomba se observa que fue lanzada en un área casi desértica (un peladero de chivos), lo que nos deja imaginar que se trataba más bien de una prueba militar, y, por otro lado, de un mensaje al mundo en relación a que el actual gobierno utilizara cualquier armamento cuando lo decidan sin pedir permiso ni autorización a la ONU ni ningún organismo mundial.
7. Las justificaciones e informaciones emitidas por el presidente Trump y sus voceros no son lo suficientemente claras en relación a las razones de lanzar esa bomba contra uno de los grupos terroristas que usa el islamismo como bandera para ocultar sus verdaderas intenciones. ¿Usar un arma tan potente para destruir tres túneles, un puñado de armas y 36 terroristas de 1500?
En conclusión, creemos que esta nueva farsa proveniente del imperio tiene un mensaje tácito y es que los EEUU están dispuestos a atacar a cualquier país del mundo, cualquier movimiento político usando sus armas más poderosas y sin importarles la opinión pública mundial ni lo que digan los organismos multilaterales.
Y a propósito de estas acciones vemos que la derecha venezolana ha arreciado sus ataques con más virulencia al proceso revolucionario, a las instituciones gubernamentales, universidades y ha iniciado una ola de saqueos y destrozos en distintos sitios del país. Estos hechos en conjunción con las declaraciones de distintos voceros militares estadounidenses en contra de Venezuela y la detonación de la famosa madre de las bombas debe ponernos en alerta en cuanto a la posible intervención militar de los gringos en nuestro país.