… "Yo tengo pruebas irrefutables del tino del pueblo

en las grandes Resoluciones, y por eso es que siempre

he preferido sus opiniones a la de los sabios.

… Es la unión la que nos falta para completar

la obra de nuestra regeneración…" .

(Simón Bolívar)

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Por demás interesante es el actual panorama político que se vive en la nación Incaica. Van a presidenciales (balotaje) este domingo 6 de Junio. Dos opciones totalmente opuestas. Por una parte, está la candidata KEIKO FUJIMORI; expresión clara de la corrupción, demagogia y del neoliberalismo, apoyada por los sectores corruptos y adinerados del país junto a los dueños de los medios de comunicación. Es la candidata de la embajada americana y de los sectores reaccionarios de la Fuerza Armada de esa nación. Hija del bandido, déspota y ex dictador Alberto Fujimori, quien actualmente paga condena en una cárcel por sus innumerables fechorías (delitos de lesa humanidad). Esta candidata llegó a una segunda vuelta con un discurso "moderno y populista", imbuido de un rancio anticomunismo. Debemos recordar que el Ministerio Público de ese país ha solicitado 30 años de cárcel para esa señora por su dantesco prontuario. Si funcionaran las instituciones en esa nación, ella no debería ser candidata, debió ser inhabilitada. Pero prevaleció la complicidad y la corrupción. Por otra parte, está el candidato PEDRO CASTILLO, que viene de las filas del magisterio e hijo de campesinos. Llegó a la segunda vuelta con un discurso nacionalista; cuestionando a los corruptos, a la clase política y bajo la consigna "No más pobre en un país rico". Su discurso es anti neoliberal. Pedro Castillo capitaliza todo un descontento acumulado por décadas de exclusión y explotación que la oligarquía se resiste a aceptar. Al candidato del Lápiz lo apoyan todos los movimientos sociales agrupados en la coalición PERÚ LIBRE, incluyendo a partidos y sindicatos de Izquierda.

Perú, un país que sin bloqueo ni sanciones exhibe índices de extrema pobreza y crisis a todos los niveles, ha recibido en las últimas décadas la inclemencia de medidas neoliberales de los distintos presidentes, en su mayoría bañados por el charco de la corrupción hasta el punto que muchos de ellos están tras las rejas, otros se han suicidado y otros los protege los estados unidos en su territorio. No es nada halagador el panorama de ese país, cuyos gobernantes se han prestado además para la conjura imperial (Grupo de Lima, etc.) contra la patria Bolivariana. Este país ha sido vendido a nivel internacional con un supuesto crecimiento macroeconómico, pero en su interior la que hay es hambre, miseria, represión y exclusión por todas partes.

Estas elecciones en Perú debemos verla dentro del contexto de la geopolítica continental y mundial. Mientras la derecha se afianza electoralmente en Europa, en este Continente las fuerzas progresistas, izquierda y de avanzada insurgen en rebelión contra el orden establecido (diversos matices). Alli están Chile, Colombia, Brasil, Honduras; donde los pueblos marcan la pauta en la búsqueda de nuevos caminos y horizontes. La derecha luce con una gobernanza agotada, sin discurso y solo le queda apelar a la represión y al viejo y anacrónico discurso Macartista (1) para confundir y crear miedo en la población votante. Y es precisante lo que ha predominado en esta campaña electoral en Perú. Los grupos de poder (económicos, mediáticos, iglesia, latifundistas, entre otros) han entrado en pánico y terror ante la posibilidad de un triunfo de Pedro Castillo, y han apelado a una narrativa de un anticomunismo barato para confundir y espantar a los electores del maestro candidato. Han dicho y han llamado de todo a Pedro Castillo con una narrativa del miedo y la mentira: "te quitarán tu propiedad" … "cuidado con Maduro" … "No al comunismo" … "viene el castro comunismo". Han buscado a como dé lugar un linchamiento mediático al candidato Pedro Castillo. Es el mismo formato utilizado en otros países.

Dice a tal efecto el escritor y defensor de los derechos humanos Ollantay Itzamná:

"El miedo entonces, no es solo al "insolente" campesino que avanza hacia el Perú criollo de la limeñidad, decidido a gobernar el país, sino el terror es ante todo al campesino que lápiz en mano acecha al feudo de la podredumbre corrupta del Perú oficial para emprender una prometida revolución intelectual y moral. Pedro Castillo, al parecer, ahora es el Brujo de Los Andes que la oligarquía peruana y sus limeños temen."

Por otra parte, han tratado de maquillar a la corrupta de Keiko para que el pueblo se olvide de su terrible pasado político y de lo que representa en sí. Hasta el converso y metiche escritor Vargas Llosa ha metido sus manos a favor de Keiko y ha dicho que se justifica un golpe de estado si gana Pedro Castillo (?). ¡Que demócratas!... Montaron recientemente una burda emboscada militar de "sendero luminoso" (FALSO POSITIVO) para echarle la culpa al candidato Castillo. La desesperación es tan grande que se llevaron al prófugo y fascista Leopoldo López para que echara peste sobre lo que sucede en Venezuela. Lo último que han hecho es hablar anticipadamente de "FRAUDE" cuando ellos controlan todas las instituciones en Perú, incluyendo al Jurado Nacional Electoral (JNE). Lo mismo que hizo el supremacista Expresidente de los EE.UU Donald Trump. ¿No será que conocen de los verdaderos números electorales donde Castillo le gana cómodamente a la Keiko? El pueblo no se tragó la pretensión de vender a última hora unas encuestas tarifadas donde hablaban de un "empate técnico" entre los dos candidatos. Son trucos viejos que ya el pueblo no se las cala.

Tengo la impresión que PERÚ decidió dar un paso al frente y quitarse de encima a esta clase política de la oligarquía rancia y corrupta. Apostamos por el triunfo de Pedro Castillo. Sabemos que de llegar al Palacio de Pizarro no la tendrá fácil. La pelea es peleando. Les toca a los peruanos decidir su presente y futuro. Debe ser: "creación heroica" como decía el pensador marxista Mariátegui. A Perú está regresando el legendario Tupac Amaru hecho millones. En Perú, Bolívar Vive y Vive, a pesar que han querido borrarlo de la historia. Apostamos por la Patria grande de unidad e integración. ¡¡VAMOS PERÚ LIBRE!! ¡¡INDEPENDENCIA O NADA!! ¡¡Viva la unidad de nuestros pueblos!! ¡¡VENCEREMOS!!

(1) Movimiento o corriente político e ideológico de las décadas de los 40 y 50 en la sociedad norteamericana, impulsada por el congresista de esa nación Joe MacCarhy quien desató toda una persecución y odio al movimiento intelectual y progresista acusándolo de ser agentes o propagandista de la llamada "expansión soviética" (guerra fría). Buscaba entre otras cosas, que los norteamericanos se olvidaran por un momento de sus problemas sociales y centraron su mirada en el "enemigo soviético". En el año de 1955, el mismo Congreso lo destituye de la subcomisión que presidía y le quita todo poder en relación a este tema.