El papado desde el Siglo XVI al XXII, reclama para sí más soberanía y que cada gobierno respalde su posición del Estado de4l Vaticano. El asunto primordial es saber cómo manejar el mercado y las tecnologías. Siempre ha sido su preocupación desde la oleada revolucionaria de 1848. En 1825, Inglaterra se conmocionó con la primera línea del ferrocarril del Reino Unido, ya las sirenas se dejaban oír en cada paso ferroviario., Lo que implicó un cambio significativo en las condiciones de la vida económica, política y social que en el presente denominamos revolución industrial. Llegando a Belgrado, Holanda, Francia y Bélgica, Suiza, Francia hasta avanzar en Alemania, y finalmente a mediados de siglo al resto de Europa, Rusia y Japón.
Más allá de lo político, nos encontramos con asociaciones eclesiásticas que ejercían el poder. Es toda una estructura desde órdenes religiosas hasta el clero y laicado. En cualquier caso, se perseguían dos objetivos políticos, la victoria sobre el comunismo y, la de preservar la institución eclesiástica, pero, el gran problema es que ya la curia y el Estado Religioso en los monasterios ya estaban infiltrados por el nazismo y la influencia judía.
Nos encontramos en una transición y debemos saber equilibrar los mundos que sobrevienen el pasado y presente con el devenir del futuro que, ya no es una miopía. Esas esferas se encuentran en movimiento gravitacional y sujetas a la ley del tiempo para inspirar una renovación de la historia política y religiosa de las naciones. Lo que implica una gran intercesión de hechos que mediante acciones diplomáticas especifican la dominación de los territorios para transformarlos en colonias.
La historia futura se hace presente, tal como se escribe cada día. Es un tiempo de juicios que nos harán recordar a losa grandes filósofos del pasado. Putin, solo enlaza estos pasos de la historia, constituye un esnobismo que llama la atención porque todo viene regularizado por el factor clima, lo que sucede en Venezuela entre vaguadas, aluviones y deslaves ya se sabia desde el año 1983. Solo bastaba leer las revistas sobre el Lago de Los Tacariguas en una oficina de una Fundación Ambiental que estaba ubicada en la Avenida Bolívar de la capital carabobeña
Karl Gabriel, en su visión propia del mundo, específico a la sociedad puramente católica, solamente Inocencio III, era el único capaz de haber llevado al catolicismo por un sendero diferente. Hoy, el apostolado se encuentra militarizado y polítilizado, en oportunidades un arzobispo gana más que un gobernador o presidente.
La civilización mundial crea arquetipos para manifestar sus condiciones naturales de desarrollo, pero, corre paralelamente a los conceptos espirituales del género humano, solo se debe tener presente las ideologías, donde está su pureza. Los protestantes luchan por prevalecer y se dividen en micro grupos cayendo en una confusión que no trae tranquilidad a los pueblos.
La burguesía mantiene un control de todo lo que se mueve en la faz terrestre y olvídese que un presidente de la izquierda va a ayudar al proletariado en esta época contemporánea, es más una utopía.
Truman Capote en su libro, El placer fugaz, “No se nada de Newton desde diciembre pasado. Tendré que averiguar que pasa con el pobre.”.
Cada grupo humano que se encuentra en situación deprimida jugarás con el fuego. Siempre estará sujeto a la naturaleza.
La mayoría de las personas están en un nivel deprimente y de alerta. Hay expresiones que alarman y causan expectación. Es un espionaje completo, donde abunda el desamparado, la generación que pasa preexiste de una manera difícil, incluye a mucha gente de izquierda.