La libertad religiosa siempre ha sido imperativa en Centroamérica y el Sur. En estos últimos años se han dedicado a una doctrina de liberación como una fuente primaria de la Fe, La lucha religiosa en Nicaragua, siempre ha sido para concretar una acción en el religioso comprometido. Es un drama de sacrificio en el hacedor campesino que debe cumplir jornadas de trabajo muy duro en sus acras. Estoy hablando de los derechos de las personas y sus compromisos, más que todo a su apego a las creencias del evangelio, en plena zona montañosa, haciendo énfasis en las serranías hasta los campamentos mapuches, estoy hablando de indigenismo.
Ernesto Cardenal, como buen revolucionario sentó las bases en las comunidades por su espíritu contestatario. Su grupo no se dejo amilanar por preceptos políticos ni por la ideología de moda. La lucha progresista sandinista exploto el potencial humano a un nivel local e internacional, luego al país nica llegaron los misioneros protestantes que se expandieron hasta El Salvador y se unieron a los carismáticos para conformar parroquias eclesiásticas, según las instrucciones del Sínodo en la preciosa época de Paulo VI.
Es cuestión de promoción humana y ya el sandinismo se encontraba conformado en un trajinar diario con celo, compromiso, responsabilidad y divulgación de textos de una manera universalista, más no sectaria. Lo que implica un doble mensaje, el marxista y aquellas unidas al mensaje de sus pastores. En las grandes ciudades urbanas ya los románicos se dedicaban a enseñar un mensaje distinto dirigido al corazón de las masas. Lo que implicaba ya un acto de censura de parte del gobierno sandinista centralizado en el comandante Daniel Ortega Saavedra. Ya en una época pasada trataron de destabilizar el Estado Bolivariano de Venezuela bajo la acción de un voluntariado de masas dado desde iglesias locales que se enfocó en un Golpe de Estado y guarimbas protagonizadas por jóvenes matrimonios, jóvenes, profesionales que bajo los tutelajes de Juan Guaido y Leopoldo López buscaron lesionar la potestad plena de la república.
Los nicaragüenses, siempre han estado aferrados al trabajo. Y a una predicación elocuente y, esto fue aprovechado por un numero reducido de curas para encender a las ciudades pequeñas y aldeas, cuyas fuentes primarias son el cultivo de hortalizas y abrazo a los grupos no cristianos de buena voluntad, lo cual incidió en una serie de protestas sensibles, donde la jerarquía bajo una coordinación pastoral mostro su aversión al sandinismo.
Aquellos campesinos y labriegos engañados en sus acres repentinamente se vieron sin hogar, humillados, a la vista de todos, La CIA siempre ha estado presente en los Estados progresistas de la región y, el miedo los desnudó. Los norteamericanos carecen del amor a la vida y recientemente el sistema HARRPP, lo viene demostrando de una manera pública. Nicaragua viene degustando una profecía desde la época de Los Somoza. Alcanzada la revolución, toda la población se dedicó a trabajar en faenas agrícolas, pecuarias e industrial, sus productos son de óptima calidad y el sistema de procesamiento de enlatados es riguroso. La moneda está estabilizada y, es muy bajo los niveles de desnutrición.
Nadie se imaginó que la curia de manera abierta se iba a convulsionar junto a 220 presos políticos. De modo que Centroamérica viene sufriendo calamidades desde la época del mundo español y sus habitantes siempre han tenido una prioridad, crecer en el espacio dado, y aceptar huéspedes útiles a la patria.
La comunidad política de todo el espectro indigenista Inca- maya- azteca, nos lleva a un carácter conflictivo de estas naciones, porque, hay una constante oposición entre el ideal normativo de la igual y, la realidad social de la división de identidad de cualquier tipo. Así que tenemos nuevas formas de unidad pública ante una heterogeneidad o la diferencia social de individuos y comunidades. La única vía era mandar a estos dirigentes políticos y empresarios al exilio estadounidenses bajo documentos ya acusatorios por la vía jurídica y declararlos apátridas.
Nicaragua seguirá creciendo en plena libertad, es un mundo maravilloso de trabajo proyectado en el tiempo, para vivir bien no se necesita mansiones ni camionetas blindadas. Solo vivienda y alimento, buenas escuelas y, las casas de campo se llenen de frutos, ganado y de hijos. Las reglas ya se encuentran establecidas para convivir con el espíritu del verdadero sentir. Es un universo, maravilloso que solo necesita ingenio
Hay una revolución rebelde que nos hace un llamado a la conciencia de todos los hispanos e Iberoamérica como del Sur, ya los ciudadanos buscan su identidad en cada calle, esquina, poco en los centros educativos, porque los docentes también alzan su voz como es el caso venezolano, donde el salario mínimo fue llevado a su mínima expresión. Ya la crisis estadunidense se cruza y se superpone con la vida de todos los hombres y mujeres de mi generación, a su vez, la de cristal. Es la manera de ver la política de nuestro quehacer cotidiano. La revolución del Estado es cultural y, es sorprendente ver el curso de la historia norteamericana y del mundo, se ha alterado para darnos versiones de otra realidad. A las claras, los ideales de libertad se han truncado y, estamos casi destinados a andar descalzos.
Nicaragua en lo ficción, viene sufriendo de una verdadera estrategia para la mejoría del pueblo, que siempre lo ha apoyado, en lo económico. A Daniel Ortega Saavedra se le ha olvidado su condición de comandante de las fuerzas sandinistas para convertirse en dictador y, sus métodos de represión agotan el camino que nos lleva a la paz y a un Estado de Bienestar placentero.
He venido leyendo sobre el bloque italiano muy cercano al papa fallecido Benedicto o Ratzinger que le ha pedido al papa Bergoglio que levante una voz de protesta por el juicio y encarcelamiento del Obispo del país nica. Se busca una clarificación exacta de los hechos y que, se deje de lado la teatralidad. A sabiendas que estas tierras fueron levantadas bajo la sangre de un pueblo esforzado en la búsqueda de su estabilidad económica, financiera y cultural. La Iglesia Católica ha dejado oír su voz y, todavía queda mucha gente por indultar, sobretodo de jóvenes de la Democracia Cristiana Internacional.
Son tiempos turbulentos para Centroamérica ya que es un preámbulo profundo y general de las políticas abiertas del Foro de Sao Paulo que la mayoría ignora, aunque las voces de protestas se dejan sonar en todo el globo terráqueo. Sin duda, hay una presión de los monopolios burgueses que han negociado con países progresistas y, que ya están invadiendo a Chile con la carta aval de grupos anárquicos de socialistas que exigen una cuota de poder en los núcleos de las mafias de minerías que se dan desde México hasta territorio mapuche.
Los rasgos que definen al pueblo mica lo mencionan como tener un carácter colectivo. Y, con ello, nuestra historia es un devenir. Los más escépticos definen a Latinoamérica como tierras futuristas, modernistas y cultural. Lo que viene haciendo el comandante Ortega no tiene la aprobación de las mayorías y, lo llamamos cultura occidental. Es la búsqueda de caminos, una vez, bajo la guía de Sandino, sumado a la moción carismática de la Iglesia, Occidente ya no quiere caudillos políticos o figuras ejemplares, ese colectivo que ya es masa popular, desean el abordaje de temas populares, donde todos tenga derecho a participar el campo social, político y religioso.
Se debe comprender nuestro devenir histórico para contractarlo con las ciudades industriales. En nuestro caso, Venezuela fue un país netamente agrícola para convertirse en petrolero y su principal industria ser destruida por los amantes de la riqueza y de destruir países.
El resurgimiento religioso, el indigenismo y de los nacionalismos demuestran la hegemonía lograda en el plano político y económico. La izquierda no toca a los reformistas y protestantes evangélicos, pero, sí a los carismáticos religiosos del romanismo.
