Estoy leyendo de nuevo la historia de mi país, gracias a las Librerías del Sur y los textos nuevos que ya se encuentran expuestos al lector. Hay que repotenciar la democracia y fundamentar las doctrinas políticas en un solo ideal nacional, para lograr percibir una nueva nación y determinar las nuevas estructuras ideológicas que compartirán el destino de lo que será éste nuevo país. Necesitamos hablar en presente y asumir un mejor destino para esmerarnos por los sueños que han de venir. Ya, no es el tiempo de los pretextos. Es el tránsito de un camino largo cuya ruta fenece en el 2012. Tiempo, suficiente para hablar de concertación e iniciar el camino de una pedagogía histórica profunda que movilice los cimientos de la patria y seamos capaces de formar un nuevo liderazgo, que, cercene la ruta de una crisis política y el derrumbe de la fe patriótica y bolivariana, ya es imposible mirar el pasado como una solución, solo es válido el presente y nuestra inquietud por tener una mayoría preparada en los organismos de atención institucional.
Hay que consolidar la imagen de un liderazgo verdaderamente patriótico y con un mensaje vivificador de la realidad humana. Nada de espejismos. Hay que especificar la identidad del candidato para visualizar su cuadro ideológico, es necesario demostrar la fuerza partidista y contemplar los factores democráticos que determinan un criterio en el mensaje que se le viene dando al país. Es necesario cambiar los equipos de trabajo para aumentar la resonancia de la fuerza política reflejada en las organizaciones políticas.
Es necesario disciplinar al militante. Implementar una escuela de carácter ideológica para sentar cátedra del discurso público, ya no es achicar las rutas que se dañaron en los caminos de nuestra patria. Es transitar un solo liderazgo y marcar el proyecto que llevamos dentro de sí, solo se deben marcar las diferencias y avanzar hacia un proceso dialéctico de nuestra realidad histórica para equilibrar nuestros sueños hacia una verdadera identidad nacional.
Esta campaña electoral, será larga, su fin es en el 2012. Tiene un carácter presidencial y su característica fundamental es la demolición. Todo esta escrito, pero debemos aclarar los puntos acerca de la migración extranjera descontrolada que existe en nuestra patria y, que la frontera es un fantasma con su propio espejo de zombies. Necesitamos una línea editorial crítica que marque pautas. Es fundamental la información homogeneizada para motivar disciplina ideológica e informativa que determine una tarea, cuando surgen los eventos electorales, todos deben estar preparados hacia esa realidad.
Lo creativo, debe ser genial. Las noticias deben escribirse sin arrepentimiento para lograr defenestrar a quienes no aman la patria. Son incapaces de desprenderse del ego y luchar contra la rutina del pasado y descubrir éste mundo tecnológico y de forcejeo democrático que vivimos, para cristalizar un nuevo ideal nacional. Es el momento de dimensionar los presagios de la economía y el mundo partidista. Ya, no es tiempo de estar en ayunas.
Es el momento de las historias, las plazas de toros, deben ser adecuadas para formar al nuevo liderazgo nacional y de reflejar el carácter cultural de nuestros pueblos y presentar novilladas, sin matar a este noble animal. Hay que esbozar una nueva alegría en nuestro corazón, es la nueva patria que se avecina, todos estamos obligados a disfrutarlas.
*escritor. Miembro de la Asociación de Escritores de Venezuela. Capitulo Carabobo
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