La mentira es una afirmación expresada por alguien, con intención malévola o no, con la certeza que lo comunicado es falso, confiado en que lo difundido en el mensaje lo creerán los oyentes. Mentir es una forma de ocultar la realidad o la verdad en forma total o parcial. Por lo general, la mentira resulta contraria a lo que sabe, cree o piensa la persona que la formula. Esta palabra tiene diversidad de sinónimos tales como: embuste, bola, calumnia, coba, mojón, falacia, ardid, argucia, chapucería, invención, patraña, infundio, cuento, embuste, mendacidad, entre tantos. Es por esa razón que, quien practica con frecuencia la mentira, se le llama mentiroso, embustero, chapucero, cuentero, mojonero, mendaz, patrañero, falso, calumniador, entre los adjetivos derivados de mentir y sus análogos. En verdad, decir embustes implica un engaño intencionado y consiente.
Este vago y senil escribidor se prometió realizar una clasificación de las mentiras, sólo con el objeto de molestar a mis semejantes que creen a ciencia cierta, por flojera o por ignorancia o por estupidez, lo que leen o lo que le dicen los demás, sin procurarse otra vía para dilucidar si lo escuchado o leído es veraz. Vemos lo que encontré:
Mentiras históricas: aquellas difundidas por los textos especializados que permitió crear un verdad verdadera partiendo de mentiras, entre las que debo destacar: las innumerables ficciones escritas en La Biblia, como la creación del mundo en siete días, la existencia del cielo, el purgatorio y el infierno; Colón no fue un versado navegante, sino hubiese sido por los hermanos Pinzón, Cristóbal, nunca hubiese llegado a las Indias Occidentales; Napoleón no era un hombre de baja estatura, medía 1,68 m; Nerón no quemó a Roma, en el momento del incendio se encontraba en Anzio, a 50 km de la ciudad en llamas; Bin Laden no fue el primero que atacó a EEUU, fue Pancho Villa en 1916 cuando cruzó Río Grande y embistió la ciudad de Columbis; los cascos de vikingos no tienen cachos; Hernán Cortes jamás quemó las naves; Van Gogh nunca se cortó una oreja sino un pedazo del lóbulo; Juana de Arco no era francesa, era originaria de Bar una localidad Lorena, un ducado independiente; las brujas de Salem no fueron quemadas en la hoguera sino ahorcadas….
Mentiras piadosas: es una afirmación falsa expresada con buena intención, algunos las llaman mentiras blancas. En el lenguaje coloquial son frecuentes, por ejemplo cuando vemos un amigo o amiga con indudable cara de enfermo (a) y lo (a) reverenciamos con un "te ves muy bien"; al saludar a una conocida con evidente signos de obesidad la adulamos con frases como: "mujer pero que flaca estas, te ves chévere"; cuando un fiscal de tránsito detiene a un chofer y le reclama el exceso de velocidad, de seguro conductor expresará "oficial, no tenía idea de lo rápido que iba"; las palabras expresadas por una dama a su pareja: "nunca me había acostado con un hombre tan macho como tú"….
Mentiras publicitarias: Son afirmaciones falsas (engaños) formuladas por publicistas a través de la prensa escrita, televisión y radio, solamente con la intención de promocionar un producto para la venta. Por ejemplo: compre este cereal que contiene vitamina A, C, D, E, K, omega 3, bajo de colesterol, aumenta la capacidad auditiva y contribuye a desarrollar la inteligencia del niño; dele a su bebé leche Mamy, con la misma fórmula que la de la leche materna; use zapatos Red que le ayudarán a rebajar de peso; no se deje engañar, utilice pantalones Pepitona que le mantendrá el trasero levantado hasta lo setenta años…
Mentiras estúpidas o mentiras risibles: a este grupo pertenecen las falacias expresadas por ciertos individuos (por lo general, políticos mediocres y laboratorios de expertos) y están dirigidas hacia un público súper especializado, personas que monopolizan la estupidez y la ignorancia. Son estos quienes creen a ciencia cierta todo lo escuchado, lo leído y lo observado. El único propósito de estos embustes es generar intranquilidad en la población. Con frecuencia son propagadas por los medios de comunicación escrita, la televisión, radio, las redes sociales, los pin, de boca a boca, en fin, se utiliza cualquier medio de difusión para crear verdaderos estados psicóticos. Dado el carácter de la mentira las considero bastante risibles, consecuencia de la hilaridad que causan estos caricaturescos embustes a una persona medio normal como yo. Veamos algunas de estas falacias: "Chávez le va quitar la patria potestad a los padres para quedarse con los menores de quince años"; "están secuestrando a los niños para sacrificarlos en los ritos de sectas satánicas y para robarles los órganos"; "a las mujeres de larga melena la están secuestrando para raparle la cabeza y vender sus cabellos"; "el agua que consumen los caraqueños proviene de la aguas servidas de Maracay"; "si tienes en tu casa una habitación vacía o en tu apartamento debes alquilarla, en caso contrario ten van a meter a un cubano en tu hogar"; "los médicos cubanos no son universitarios, se gradúan de enfermeros en un curso por correspondencia en dieciocho meses"; "el satélite Simón Bolívar se escoñetó en el desierto de Gobi"; "Diosdado es el dueño de cinco centros comerciales, tres camaroneras y está negociando la compra de las Petronas" en Kuala Lumpur; "la administración de EEUU nunca ha respaldado gobiernos provenientes de golpes de estado o por vía no constitucionales"; "Felipe González va a defender a Leopoldo López, para garantizarle sus derechos humanos"; "los comunistas comen niños"; "los judíos sacrifican a los bebes cristianos para preparar el pan para las fiesta del Sabbat"; "Venezuela está sometida a la potencia imperial cubana", "Bill Clinton no tuvo relaciones sexuales son Mónica, solo se trató de una cándida mamaíta"…Podría escribir una antología sobre tales chapucerías, pero el Diario Aporrea de seguro no me concederá 150 páginas para enumerar tantas mentiras estúpidas: Lo prodigioso de esto es: no sé cómo y ni en dónde le caben en el cerebro de estas personas tantos mojones.
Mentiras que matan: en este renglón ocuparé más espacio que los anteriores dado la gravedad de estos embustes. A estas falacias las considero mordaces, cínicas, mal intencionadas y peligrosas y más aún, cuando los medios de comunicación de masa pretende utilizar el poder mediático por encima del poder político. Por lo general, este tipo de chapucerías tienen un fin determinado y yo diría, algo localizado, lo malo es que el efecto de tales invenciones es impredecible. Lamentablemente, las secuelas que estas mentiras produjeron y actualmente producen se conocen por fotografías y en la actualidad están registradas en numerosos videos. Veamos algunas de estas falsedades: los judíos fueron culpables de la muerte de Jesús; los judíos, después de la segunda guerra Mundial, fueron responsables de la situación económica de Alemania; el gobierno de España fue la causante de la explosión del acorazado Maine propiedad de la armada de EEUU; Polonia invadió Alemania; Vietnam del Norte disparó sobre dos naves norteamericanas anclada en aguas internacionales en el golfo de Tonkin; la armada imperial japonesa bombardeó la base naval de EEUU de Pearl Harbor ubicada en Hawái; Afganistán está involucrada en el derribo de las Torres Gemelas de N.Y; en Irak se almacenan armas de destrucción masiva; el gobierno de Libia bombardeó la población civil; en Ucrania se violan los derechos humanos…Todas estas falacias fueron propagadas en su mayoría por gobiernos imperiales y en especial, por el de EEUU y cuyas consecuencias hoy son hartas conocidas. Son las mentiras que matan.
Hoy nuevamente el emperador de EEUU, Mr. Obama lanza otra mentira más sobre Venezuela, como es que nuestra nación es una amenaza extraordinaria e inusual contra el país del Norte y en la actualidad el Pentágono está en alerta roja, previniendo un ataque de nuestras Fuerzas Armadas Bolivarianas. Estimado soberano norteño, todos sabemos las consecuencias derivadas de las mentiras que matan y, a riesgo de cometer un delito de lesa majestad lo inculpo de mentir descaradamente con la alevosa intención de apoderarse de nuestro petróleo. Por fortuna, mi comandante Chávez escogió como presidente a Nicolás, un veterano en tantas lides plenipotenciarias. Hugo vislumbraba que un nuevo ataque de este tenor se dilucidaría mediante ofensiva diplomática de los pueblos que desean vivir en paz. Debemos tener claro que, si el emperador Obama y el corrupto Felipe González están defendiendo a Leopoldo López y a Ledezma, lo hacen en calidad de socios, dado que son hienas del mismo cenagal. Estimada majestad Barack, no sea mojonero, aprenda de las lecciones de jurisprudencia internacional que recién le dio nuestra egregia canciller Delcy Rodríguez y no siga poniendo la cag….perdón, la torta. Por favor Mr. Obama, derogue el decreto, en caso contrario será postulado y laureado, de seguro, con un Grammy como el emperador más estúpido en los anales de la historia.