En el año 1985 la escuela de Comunicación Social de la UCV, publicó un libro en conmemoración de su cuadragésimo aniversario llamado “Estudios de Comunicación Social”, donde el profesor Eleazar Díaz Rangel, entre otros profesores disertan sobre diferentes temas relacionados con la comunicación. En este libro el profesor Díaz Rangel nos habla sobre el origen de las agencias de noticias en Venezuela. Allí nos narra como llegaron estas agencias al país en plena dictadura gomecista, en el contexto nacional y en el plano internacional la coincidencia de esta llegada, precisamente en el momento en que los Estados Unidos surgían de la primera guerra mundial como la potencia imperialista que es actualmente.

El texto nos ofrece datos muy importantes como la llegada en 1929 de Unite Press a Venezuela con la publicación de noticias en el Diario El Impulso de Barquisimeto, rompiendo con el monopolio mediático que tenía la agencia gubernamental de noticias francesa HAVAS desde 1909, que inició sus operaciones en nuestro país a través de un contrato suscrito entre la dictadura gomecista y la compañía francesa de cable telegráfico.

Otro dato importante es la influencia que ejercía el gobierno norteamericano en estas agencias, a través del Departamento de Estado, el cual contribuía en el sostenimiento de la dictadura de Gómez: “La AP y la UP se hacen fuerte en Venezuela, como reflejo de la dependencia de nuestra economía respecto de la norteamericana y de la influencia política que ejerce el Departamento de Estado. Los diarios venezolanos prefieren la óptica norteamericana de los sucesos mundiales. Las versiones de la AP y de la UP serán cada vez más utilizadas, incluso en los casos de noticias latinoamericanas. La pérdida gradual de influencia de los países europeo contribuye a generar dificultades para que HAVAS obtenga clientes venezolanos”.

Igualmente Días Rangel nos muestra como contribuían estas agencias de noticias directamente en el “maquillamiento” de la realidad venezolana para no afectar la imagen del dictador venezolano tanto en nuestro país como en el exterior: “La imagen de Venezuela en el exterior se formaba con las escasas noticias que desde Caracas transmitían los nuevos corresponsales de la AP y de la UP. No significaron un cambio importante porque estas agencias se ocupaban de preservar la imagen que la dictadura de Gómez quería para Venezuela en el extranjero”.

Para 1938 los diarios de Caracas que recibían información del exterior, a través de estas agencias noticiosas, eran los siguientes: Ahora: AP-UP, El Heraldo: AP; La Esfera: UP; El Universal: UP; Crítica: AP.

También para esta época un fenómeno negativo del periodismo que esta presente es la tendencia al sensacionalismo promovido por estas agencias; tan solo por el interés de llegar primero con la noticia obvian la necesidad de verificar la información antes de despacharla.

La complicidad entre esta empresas mediáticas y los grupos de poder venezolanos continua para resguardar sus mutuos intereses, pero esta vez con el gobierno de Pérez Jiménez: ” Los años de la llamada “guerra fría”, en la década del 50, son de un anticomunismo obsesivo y sensible como era América Latina a cualquier cambio en la política exterior norteamericana, se producen varios golpes de Estados. En Venezuela fue derrocado el gobierno democrático de Rómulo Gallegos y se abrió un período de abolición de las libertades y de completa sumisión de la política exterior a los dictados del Departamento de Estado. Las noticias de la UP y de la AP refuerzan esas relaciones de dependencia. Bajo un severo régimen de censura de prensa y con la colaboración de casi toda la burguesía con el gobierno perezjimenista, los más importantes diarios no ofrecen resistencia y debieron adaptar sus políticas informativas a las exigencias de la dictadura”.

Como podemos darnos cuenta estas agencias de noticias le daban mayor importancia a su carácter de empresa privada que a su responsabilidad social y ético de orientar, educar y de informar veraz y oportunamente a las masas; anteponiendo a sus intereses individuales y de procedencia sirviendo de instrumento de manipulación y obstaculizador de los cambios sociales que necesariamente necesita un país para su desarrollo.

Por todo esto vemos con mucha satisfacción que en los actuales momentos nuestro país cuenta con nuevos medios oficiales y privados nacionales e internacionales y de carácter comunitarios para alimentarnos de una óptica real, venezolana y Latinoamericana: Venezolana de Televisión, VIVE TV, Catia TV, Los canales comunitarios en toda Venezuela, RNV, YVKE, Telesur, Las emisoras comunitarias en toda Venezuela y otros medios privados como Aporrea y VEA.

Es lamentable que estos medios no hayan sido creado antes por los pasados gobernantes de nuestro país para contrarrestar la avalancha de informaciones tergiversadas y manipuladas que contribuyeron a minar nuestra dignidad y soberanía trayendo como consecuencia el robo de nuestras riquezas y recursos en nuestras propias narices hasta llegar a plagar de pobreza a nuestro pueblo.