El reaccionario que llevamos por dentro
Me encontraba viviendo en Canadadá en los difíciles días del golpe de abril del 2002, atrapada entre los calabozos mediáticos: Cayó el tirano. Las imágenes del Puente Llaguno (hordas chavista asesinando...) me generaban heridas. Llamaba a Venezuela a algunos cálidos amigos de “izquierda” y me confirmaban que Chávez era un asesino. Me llegaban emailes en las que se nos acusaban por haber votado por Chávez. Recibí una llamada de una amistad muy querida que también se encontraba en el exterior y me manifestaba entre llanto que mi voto sirvió para asesinar a nuestro pueblo.
Ahora digo
todo esto, es decir, la demonización recibida en el exterior y que
luego descubro que no sólo es mentira sino que, entre tantas cosas,
quisiera hacer relucir un detalle más bien contrario a esa demonización
ya que humanamente es esperanzador: y es ver a Isaías Rodríguez, en
los días del golpe contra el pueblo, que los calabozos mediáticos
nacionales mercantiles articulaban: Ver que corriendo peligro su vida y
una vez salvo y retomando el poder se dirige a algunos de esos que
amenazaban su vida y él les dice: ustedes tienen garantizada sus
derechos ciudadanos….este escenario es de escuela, resguardar ante todo
la condición humana.
Resulta significativo ver como el
ministro Eduardo Samán se encontraba en el programa La Hojilla,
denunciando la corrupción del empresario Guillermo Zuloaga. El ministro
nos explicaba con detalles: cifras, fuentes, números, con claridad
desglosa la mafia de este poderoso empresario. El ministro Samán que ha
sido agredido físicamente y moralmente, en su apóstol trabajo, vemos
que no atenta contra la condición humana. Denuncia con pruebas
acompañadas de respeto humano.
No puedo continuar sin manifestar
mi solidaridad y apoyo a todos y todas las trabajadoras de la
comunicación que fueron agredidos el día de la llegada del intelectual
Mario Vargas Llosa y a diario por las represivas y discriminatorias
fuerzas bien anti democráticas (reacias a las emergentes expresiones
populares).
La periodista Beatriz Adrian es una patan. Su crisis
radica en no asimilar la democratización de la información, la
masificación de la comunicación, le resulta un insulto, la inclusión de
la populaza, le es una pena que entorpece su trabajo debido a su lógica
excluyente de alienación clasista. Ella esperaba a su entrevistado, el
intelectual (los neo dioses del secularismo), invitado por la mafia
feudo empresarial. (Intelectuales: Mario Vargas Llosa promotor del
libre monopolio. Deportistas: Michael Jordan, promotor de zapatos NIKE
y se les paga por dicho servicio). Eso entre otros, le dio pie a la
periodista a agredir al otro y el derecho del colega a ejercer su
labor, pero para ella no es un colega, es un/ una marginal, un mono…
Ahora resulta lamentable en lo humano cuando alguien que es víctima termina atropellando.
Resulta
decepcionante como en el programa La Hojilla, teniendo la oportunidad
contundente de denunciar las violaciones a los derechos humanos,
terminan burlándose de los homosexuales.
Anteriormente los
atropellos que se cometían contra el pueblo y sobre todo contra la
Izquierda eran censurados y ahora que tenemos un espectro radio
eléctrico, lo usamos para burlarnos del pueblo, en este caso de nuestra
comunidad homosexual. Que falta de conciencia histórica…!
Los
pueblos se encuentran atrapados entre los calabozos mediáticos
privados, luchemos contra esa represión pero también construyamos la
referencia, la alternativa en la que las masas encuentren una visión y
un sentido, afecto y provecho humano.
Que lástima que en La
Hojilla teniendo en las manos la ocasión de sensibilizar respecto a los
atropellos que viven los periodistas comunitarios y alternativos etc.
terminen burlándose de los adolescentes de su propio pueblo por ser
afeminados u homosexuales.
Es clara la brutalidad,
discriminación y vulgaridad del Diputado Ismael García cuando golpea
desde la moto a Amorin por tan sólo ejercer su labor informativa, pero
al mismo tiempo es decepcionante ver a Amorin servirse de nuestros
medios para burlarse de un joven del pueblo por ser afeminado u
homosexual. No se burla cuando los entrevista sino cuando está en el
programa de La Hojilla.
Es frecuente escuchar que esta es una
revolución humanista, pero que lo humanista no sea un elemento
discursivo, fetiche, un relleno estético, aroma auditiva.
Es
contradictorio y opuesto a al pensamiento socialista, libertario,
democrático, igualitario, incluyente, pluralista, en fin humanista,
continuar con los prejuicios, discriminaciones y humillaciones a todo
aquel que no sea heterosexual.
Esa risa, ese ji-ji…! Es infantil, inhumana, retrograda, pobre y ajena a la conciencia revolucionaria.
Una
revolución es un hecho de honesto dolor porque implica un laberinto
interno de liberarnos de nuestros inhumanos prejuicios provenientes de
nuestras sagradas familias.
Marxistas, progresistas, ateos, liberémonos de nuestro amargo tronco monoteísta judío-cristiano-musulmán.
La
mediocridad y los prejuicios, son también corruptas. No seamos cómodos
y esforcémonos por combatir nuestra propia mediocridad. Seamos
dialécticos.
La burla no es humor, la burla es humillación, es la otra forma de tortura. La burla agrede el humor.
La mediocridad se disfraza de moralista y no es más que derecha pura.
Son
millones de hombres y mujeres que se han retirado de la vida, renuncian
a existir, suicidándose. Calcinados ante el infernal sufrimiento
discriminatorio.
Saben ustedes el índice de suicidio de esta comunidad?
La tasa de suicidio de jóvenes homosexuales es mayor a la de jóvenes heterosexuales.
Saben cuántos homosexuales son asesinados en el mundo?
Debemos
ser responsables porque las repercusiones pueden ser criminales sobre
todo cuando la burla es promovida desde el espectro radio eléctrico.
Yo no quiero hacer promoción a la homosexualidad lo que intento es hacer es un llamado al respeto humano.
Que
nuestra revolución sea una plataforma de una sociedad de libres
pensantes, atrevámonos a ser el pueblo más libre del mundo, eso
embarga amor, sanidad, honestidad y respeto.
Somos muchos los
heterosexuales en la que sentimos la necesidad de justicia humana por
esta comunidad, aunque muy pocos somos los que nos atrevemos a tomar la
bandera de su causa, justamente porque es tanta la discriminación que
nos aterra estar en ese infierno social … no seamos hipócritas se trata
de una causa humana, se trata de la revolución.
No tengo el
honor de ser lesbiana, tengo el honor de amar a los hombres y todo debe
ser honrado dentro y fuera de la mágica higiene de la sexualidad y
sensualidad humana.
Si por ejemplo hoy en Venezuela defendemos
la justa causa de palestina, que anteriormente era un tabú, y hoy sin
ser palestinos proclamamos: todos somos palestinos. Proclamemos: todos
somos homosexuales, porque en el fondo lo que estamos buscando es la
justicia de la humanidad y la humanidad es una sola.
No
defendamos una causa justa y nos ocultemos ante otra causa justa. Que
nuestros temores a los prejuicios de nuestra sociedad no haga de
nosotros unos, unas hipócritas ante la humanidad.
Ojalá que en el programa La Hojilla se invite a la comunidad homosexual a expresarse. Hay un universo humano por descubrir.
Ojalá
que el presidente Chávez en un Aló Presidente, en un Domingo de Misa,
como parte de ese proceso educativo, de sensibilización, reflexión,
respeto y por el crecimiento de nuestra sociedad y en compañía de la
comunidad homosexual de Venezuela se pronuncie a favor del respecto
humano que merece esta colectividad.