Henry Ramos Allup le pedirá la dirección de un odontólogo cibernético que le pueda adaptar una nueva prótesis dental que le permita hablar con palabras coherentes, es decir que no se le escuche esa voz de vieja de orquesta, altisonante, esdrújula, aberrante y cochifrita. Además le pedirá una hemeroteca de fácil uso, para deleitarse recordando aquellos años cuando se la pasó en el antiguo Congreso Nacional levantando la mano y roncando como buen adeco que es y cobrado sin trabajar. Igualmente le pedirá un cochino de plástico gigantesco para guardad el menudo que le produjo sus duros años en ese sitio gastando energía, en pro de la "democracia" adeca que disparaba primero y averiguaba después.
Antonio Ledezma le pedirá al santo niño el manual de Buenas y Malas Palabras para obsequiarlo a su compañera a ver si aprende a entender que históricamente en nuestros hogares a los hijos se les enseñó que existen unas palabras llamadas groserías que en boca, principalmente de una dama, suenan a lija ochenta sobre una superficie de latón oxidado. "Quienes utilizan grosería son ignorantes que desconocen su propio idioma". Antonio Ledezma le pedirá una iglesia portátil al niño Jesús para colocarla en su habitación y arrodillarse todas las noches ante ella a pedirle perdón a todos esas personas que su partido AD asesinó desde que llegó al poder en 1959. le pedirá un pañuelo gigante para secarse las lágima al recordar los muertos que ocasionó su partido AD con el Caracazo y una linterna de gran luz para irse en las noches al sector del cementerio conocido como la Peste a llorar ante el agujero donde el gobierno de su partido AD lanzó a hombres, mujeres, adolescentes y niños, que solamente estaban pidiendo ser partícipes de las riquezas de su país que se llevaba la oligarquía facista del Este de Caracas e igualmente protestando por la injerencia de los yanquis en Venezuela a los cuales AD su partido, le regalaba el petróleo.
Julio Borges le pedirá al nativo de Palestina, Jesús el Cristo, un Herodes nuevo para que acabe con los niños de El Caribe y no puedan ser protegidos por el humanitario Hugo Chávez Frías. Le pedirá un huracán, un tsunami eterno, para que todas las islas del Caribe sean borradas del mapa y que esa gente que lo hace rabiar porque Venezuela los ayuda cada vez que quedan a la intemperie pasando frío y hambre, se hundan en el mar. Le pedirá que a Chávez se le meta el diablo facista en el alma y actúe como ellos, solamente pensando en dinero, en lujos, en sambiles, en "eso es mío y no me importa lo demás", le pedirá que regrese Carmona Estanga para que los tres ministros que les dio en 2002 consigan trabajo en esa "matoncracia" de los ricos.
Alberto Federico Ravell le pedirá unos periodistas sumisos, que no sepan lo que es ética ni dignidad para que trabajen en Globovisión, viendo "el mundo al revés, o sea, distorsionando la verdad y jalándole metras a él. Le pedirá al niño que Chávez se enferme con una hallaca navideña y que le de diarrea para que los pueblos del mundo que lo aman PORQUE ES UNA PERSONA DEL PUEBLO, QUE SIENTE Y PADECE, QUE SUFRE Y LLORA POR LOS POBRES, sufran por el gran líder venezolano.
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