Entre las decenas de carteles contra el rrrrégimen colocados por los jóvenes de Los Palos Grandes destaca uno: “Cuando los de abajo se mueven, los de arriba caen”. ¿Los de abajo? Nada, simplemente copia de consignas utilizadas por los indignados en España. Sorprendente, no. Un producto más del control que ejerce el imperio sobre las mentes de los pueblos dominados.
Ya en el año 1953 Allen W Dulles, en su libro El Arte de la Inteligencia, exponía sin ningún empacho la estrategia estadounidense frente a su entonces enemigo principal, la Unión Soviética: Los EEUU poseen el 50% de la riqueza del mundo, pero sólo el 6% de su población… Nuestra tarea consiste en mantener esta disparidad sin detrimento de nuestra seguridad nacional…Para lograrlo hemos de dejarnos de objetivos irreales como los derechos humanos, la mejora de los niveles de vida y la democratización.
EEUU debe imponerle su visión, estilo de vida e intereses particulares al resto del mundo… La literatura, el cine, y el teatro, deberán enaltecer los más bajos sentimientos humanos… encumbraremos a los denominados artistas, que inculcarán en la conciencia humana el culto del sexo, de la violencia, el sadismo, la traición… de cualquier tipo de inmoralidad”.
Sembrando el caos en la URSS sin que sea percibido, sustituiremos sus valores por otros falsos y les obligaremos a creer en ellos…Encontraremos a nuestros aliados y correligionarios en la propia Rusia…Sólo unos pocos acertarán a comprender lo que realmente sucede…Nuestra principal apuesta será la juventud. La corromperemos, desmoralizaremos y pervertiremos.
El objetivo final de la estrategia a escala planetaria, es derrotar en el terreno de la ideas las alternativas a nuestro dominio…lograr que las víctimas lleguen a comprender y compartir la lógica de sus verdugos.
Pasados 60 años vemos los resultados de esa estrategia en el mundo. De allí que nuestro Comandante eterno haya insistido tanto en la batalla de ideas, en avivar el espíritu libertario nuestro americano y en revolucionar el contexto mundial y regional del proyecto bolivariano. Es nuestro deber ahora poner completamente patas arriba la educación alienante que aún prevalece en nuestro país.