Cuando uno mete el oído en las conversaciones que se están produciendo en el entorno político, se escuchan cosas interesantes que bien merecen ser parte del análisis politológico, veamos dos que me llamaron la atención:
Primero: "Esto va a ser muy difícil enderezarlo. Debemos comenzar de cero, pues todo está destruido". Según esta primera argumentación, el chavismo acabó con todo. Estos fueron unos "barbarazos", que dejaron al país en la "carraplana" y por lo tanto lograr poner en marcha el aparato productivo, a fin de satisfacer las necesidades básicas de la población va a ser tarea de varios años. "Acabar con las colas, eso es imposible a corto plazo".
Los supuestos "nuevos dueños del país", surgidos a partir del 6D, como que se están dando cuenta que no pueden seguir sosteniendo las mentiras del "Cambio yá", y que esa consigna no tiene asidero en la realidad para seguir manteniéndola frente a sus electores. Eso de que: "el lunes 7D amanecemos sin Maduro y sin colas", como que no fue ni será posible.
"Se puede engañar a todo el mundo, una parte del tiempo", pero no todo el tiempo. Esa frase asignada a Abraham Lincoln, tiene mucho de verdad y más cuando la realidad evidencia hechos y fenómenos que la confirman. Decir, en una campaña electoral, que aquí en 17 años se hizo "tierra arrasada" con todo el aparato productivo nacional , puede ser creído en un momento de éxtasis colectivo ante un predigistador de la palabra; pero cuando revisas los valores e indicadores, que muestran estadísticamente el desarrollo del país y los comparas con la década de los año 90, las diferencias son exponenciales. Tómese usted el trabajo de investigar cualquier factor indicativo, el que sea, y vea si alguno de ellos es menor al actual. (Desarrollo Humano, Tecnología, Calidad de Vida, Indicadores Macroeconómicos, Reservas y sobre todo respeto y apoyo de la Comunidad Internacional).
En contrapartida no me vaya a argumentar que ahora somos más habitantes y que los precios petroleros son ahora más altos, pues esos dos indicadores también se le deben a la revolución bolivariana.
El Segundo argumento: "Nosotros somos mayoría y los chavistas tienen que someterse a lo que nosotros decidamos". "No puede el gobierno oponerse a lo que la Asamblea Nacional decida". ¿O sea que nosotros los chavistas, que ganamos 18 elecciones de las 20 realizadas, que teníamos el control de todos los poderes públicos, no teníamos el derecho ni la potestad de tomar decisiones y ellos si la tienen por el sólo hecho de controlar a uno de los 5 poderes que constituyen la legalidad del Estado Nación.? (Hasta golpes de Estado nos dieron para impedir la ejecución de las decisiones que tomábamos y considerábamos las mejores para el país.)
¿Creen estos "nuevos amos del poder politico", que nosotros los chavistas nos vamos a dejar quitar las grandes conquistas sociales, políticas y económicas que hemos logrado con tanto esfuerzo y apoyo del pueblo sin pelear?. ¿Creerán en verdad, estos "residuos de la IV República", que Chávez está muerto y descansando en paz en el cuartel de la montaña?.
¿Qué habría pasado con el Cristianismo, si los que siguieron a Jesús, hubieran pensado que al morir éste en la cruz, ya todo se había acabado?.
Vamos a suponer que nuestras fuerzas fueron reducidas al 42% del total de la población, vamos también a aceptar que cometimos muchos errores tácticos y que perdimos parte de nuestros mejores batallones, pero de lo que si estamos seguros, es que no hemos perdido la brújula y ésta nos señala que nuestro destino es el SUR. Los que quieran volver a mirar al NORTE, que lo hagan, están en su derecho. El Comandante Eterno nos dio la orientación y las coordenadas, tenemos el Plan de la Patria y no nos vamos a desviar, aunque en ello se nos vaya la existencia. " Pal ante, es pa llá. No tenemos alternativa.