En un episodio novelesco se ha convertido la llamada por la oposición "Asamblea Legítima" de 2015, la cual marcha sin rumbo definido hacia el abismo total, guiada su dirigencia por los sectores externos imperialistas y motivados por el más virulento odio demostrado en el país por sector político alguno en otro tiempo. El llamado estatuto de transición no es más que un mamotreto que no tiene ninguna base jurídica-constitucional, son los deseos reaccionarios de los poderes fácticos mundiales que ven en la revolución bolivariana "una amenaza inusual y extraordinaria" que "justifica" lo más absurdo. Pero a lo torcido del argumento se suma la torpeza de los ejecutantes que se reparten lo robado al país cuan piñata y de la manera más descarada, allí está Guaidó, el astronauta sin tren de aterrizaje. El imperio se mantiene detrás de todo esto, en sus ansias por derrocar la revolución bolivariana, que se le ha convertido en un hueso duro de roer y a cada plan imperial le riposta con el poder de la verdad y la justicia.
De los 60 países que al inicio acompañaron el llamado "interinato" de Guaidó hoy solo los más acólitos se mantienen y no llegan a la veintena, la UE con todo y su rabia ha tenido que tragarse lo dicho y reconocer los que no se puede ocultar, la verdad de Venezuela, ésta no es otra que la de un país que democráticamente, su pueblo ha decidido seguir un camino distinto al sometimiento imperialista y se atrevió a desafiar los demonios, comenzar a levantarse y caminar con sus propios pies. En el camino no hemos estado exentos de errores, fallas y equivocaciones, pero a pesar de ello no queda duda de la disposición de un pueblo a labrarse su destino fuera del tutelaje externo. De nada han servido los sabotajes, los atentados, el bloqueo económico y financiero, el intento de aislarnos del mundo, las pretensiones de rendirnos por hambre y desesperación. A cada acción imperialista el pueblo ha respondido con estoicismo, con paciencia y con madurez. De nada han valido las mentiras vertidas en el mundo por la dictadura mediática internacional, pero el daño en la economía y al bienestar de la población es evidente. Hemos vivido años de inmenso sacrificio, ha sido una batalla dura contra mil demonios, pero la colectividad nacional, el espíritu nacional se ha impuesto y hemos sacado de nuestra herencia libertaria, el temple necesario para vencer en resistencia.
Imagino que los expertos de la derecha mundial jamás se imaginaron de lo que somos capaces, nos subestimaron, nos creyeron de genes esclavos y se tropezaron con lo que será la peor derrota sufrida por el imperio estadounidense en su historia. Vietnam se quedará pequeño al lado de esta victoria del pueblo venezolano que se acrisola cada día que pasa y se consolida en medio de dificultades enormes. Nos subestimaron los ricachones del mundo y los venezolanos, quienes pensaron que nos doblegarían por el estómago.
Los mismos que intentaron el golpe de estado contra Chávez en abril del 2002 y que ahora actúan encubiertos en unos seudo políticos tipo Guaidó y Cia que a costa de enriquecerse son capaces de vender a sus progenitoras. Políticos que la patria le sabe a caca y la soberanía les importa un bledo con tal de tener chequera llena y la panza full. Los expertos del capitalismo mundial evaluaron al pueblo en base a esos politiqueros y se estrellaron, y seguirán en lo mismo condenados a una derrota inexorable.
Guaidó y sus astronautas de la política bien podrían hacer buen papel en los planes de los magnates más ricos del planeta en sus objetivos de viajar al espacio apoyados en sus chequeras llenas producto del robo y a costa de la pobreza de millones, pero ni siquiera para eso servirán porque definitivamente son incapaces, torpes y cobardes. Sus niveles de malinchismo llegan al ridículo al aceptar la estupidez de "renovar" una conformación de una Asamblea Nacional que feneció hace rato, y no hablamos de tiempo-espacio, hablamos de esencia, de contenido, de razón y de legalidad. La AN de 2015 murió al violar la constitución nacional y entregar la soberanía del país al departamento de estado estadounidense y a la mafia narcotraficante que gobierna colombia, como cuña geo-estratégica del imperio en la región, ese narco-gobierno de Duque-Uribe ha desempeñado un papel que nos ha hecho mucho daño, pero también saldrán revolcados, tengan la plena seguridad, y no es Maduro, es este pueblo, el mismo que marchó presto allá hace apenas 200 años y les dió nombre y patria.
Todas las decisiones de esa AN de 2015 violatorias de la CRB la pone en situación de rebeldía y golpismo, es decir, la hace ilegal, sin embargo, el exceso de democracia existente en el país, la madurez de un pueblo noble, la consciencia humanista de nuestra gente permitió que la ilegal AN de 2015 se mantuviera allí, con absolutas libertades de acción, desplazamiento y convivencia de sus integrantes que más temprano que tarde tendrán que responder por tamaña traición a la patria. Esos personajes se creen inmunes por estar "protegidos" por el imperio, pero "no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista" y el tic tac de la historia avanza inexorable hacia la llegada de la hora en que haya justicia y los traidores paguen lo que tengan que pagar.
Por ahora el país está concentrado en la mayor prueba, hacernos libres de poderes externos, desarrollarnos y crecer para beneficio de todas y todos. La política de Maduro ha sido la de un cirujano para sacar al país de la tormenta de la violencia con la cual se le amenaza permanentemente. Esta estrategia ha permitido que surjan dentro de la misma oposición sectores, que aún cuando enfrentan al gobierno y no están de acuerdo con la revolución y el socialismo, no obstante, se mantienen en una posición constructiva y pacífica, se mantienen en los canales democráticos. Creo que el país necesita una oposición seria y nacionalista que ayude a construir y que defienda el proyecto nacional; ellos lo plantearán en el marco del capitalismo, nosotros seguiremos pregonando el socialismo, pero aún con posiciones en las antípodas, lo importante es pensar en el país,, en el crecimiento, en el desarrollo, en el fortalecimiento de nuestra economía nacional y en el bienestar de todas y todos.
Lo paradójico es que los astronautas de Guaidó cuando ven un chance electoral se anotan de primeros, si ganan utilizan las instituciones para socavar la democracia, si pierden hacen guarimba cantando fraude, manejan la doble cara, la participación en actos democráticos como las elecciones y en planes subversivos a la vez como el plan gedeón, entre otros... ¿Hacia dónde puede conducirlos esa paradoja? Sin duda que hacia el abismo y eso en política no tiene tren de aterrizaje.