Amigo disociado: de pana y todo, por tan sólo cinco minutos deje de escuchar lo que le dicen por Globovisión, o por el programa de radio de su periodista odiador de Chávez preferido, o de meterse en la página web fascista de su elección, y enfrente la realidad verdadera.
TENEMOS VIADUCTO
Aunque Usted no lo crea, hoy se inaugura el Viaducto Caracas-La Guaira. No lo hizo Pérez Jiménez resucitado, ni tampoco los marines norteamericanos como vía de acceso rápida para venir a salvarle a usted de este “comunismo que lo está matando y le está violando los derechos humanos”. No hermano. Lo hizo Chávez y el equipo de gobierno que lo acompaña, los mismos que acusan en esas agencias de propaganda que usted llama medios de comunicación que supuestamente son unos incompetentes corruptos. Y yo sé que le va a costar mucho trabajo, pero aunque esta realidad se le haga más difícil de asimilar, debo recordarle que este viaducto además fue construido en tiempo record, en tan solo unos meses. En otras palabras, por difícil que le parezca entender, lo que no hizo la Cuarta República en más de 40 años, lo hizo el Gobierno Bolivariano en menos de uno.
PERSISTIENDO EN LA REALIDAD VIRTUAL
Claro está. Usted se puede quedar en su casa, cerrar las ventanas, bajar las cortinas, para que no entre el sol, de modo que pueda tranquilamente ser adoctrinado por su agencia de propaganda preferida cuando le digan que no es verdad, que eso no es un viaducto, que es un puentecito y que, en el caso de que sea un viaducto está mal construido. Seguro los dueños de esa agencia propagandística enviarán a un reportero (como ya han hecho antes), que presentará la toma de un tornillo que está flojo, de una defensa que según ese periodista se va a caer y pondrá en peligro la vida de los que intenten circular por esta vía, en fin, que casi es una tragedia nacional que se esté inaugurando esa obra. También le van a decir que está mal construida, que alguien se robó unos reales y que Chávez es el culpable de la falla geológica que pronto derribará este nuevo viaducto.
El problemita se le va a presentar cuando usted tenga que salir de su pequeña venezuelita (esa que limita por el Este con el Parque del Este, y por el Oeste con el Centro Lido, además de una pequeña isla en la Universidad Católica) y quiera tomar un avión, o simplemente bajar a la playa. Cuando las ruedas de su vehículo quieran circular por el viaducto, usted tendrá una crisis disociativa que puede llegar a extremos de gravedad. ¡Pero no se preocupe! Le tenemos la solución.
UN GOBIERNO CONDESCENDIENTE CON LOS DISOCIADOS
Para que usted no tenga que enfrentar la cruda realidad de comprobar que su agencia propagandística le ha vuelto a mentir, que lo manipulan otra vez, el gobierno ha previsto dejar abierta la vía alterna (esa que en su agencia propagandística llaman “la trocha”). Así, cuando la necesite, usted la podrá seguir usando. Eso sí, colóquese lejos de la ventana para que no tenga que divisar el espectáculo de estructura que hicieron insignes trabajadores venezolanos. Si es usted el que maneja, no le quite la vista a la placa del carro de enfrente, para que no corra riesgo de ver semejante coloso, que lo saque de un solo golpe de su mundo globovisado.
¡Ah! Y otra cosita. Procure no pasar tampoco por Mérida, Puerto Ordaz, Maracaibo, San Cristóbal, Maturín, Barinas o Puerto La Cruz, no vaya a ser que se tropiece son alguna de las obras de la Copa América y entonces sí, la crisis disociativa se vuelva incontrolable.
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