Estudiantes, estudiantes, están ponchaos. Lo que parecía se un año electoral caliente, ha comenzado a enfriarse por la premura en las estrategias de la oposición para la Asamblea Nacional. Nunca se entendió a ciencia cierta el motivo de las marchas de estudiantes. El argumento de la libertad de expresión y RCTV fue un error grave, porque ni existe violación a la libertad de expresión y el dueño de la empresa privada RCTV terminó acudiendo a Conatel para introducir los documentos que se le exigieron y apegarse a las leyes venezolanas si quiere emitir su señal en las cableras del país. Muy sencillo, sin traumas ni conflictos. Solo que estudiantes desinformados, manipulados y también los hay sanganos con sus intereses políticos, salieron a la calle a manifestar violentamente para preparar el escenario y los argumentos de los candidatos de la oposición. No es tan fácil, fue una estrategia desproporcionada que causa malestar en los transeúntes.
Lo curioso es que iniciando el año, el viento parecía a favor de la oposición por cuanto se decretaron medidas económicas inesperadas para el común de la gente, disparando la malicia de los especuladores, pues aun cuando la incertidumbre reinó en los ciudadanos, la estrategia de la oposición también fue exagerada y poco entendida. La clave estuvo en que el Gobierno Nacional comenzó un plan de expropiación que paró las intenciones especuladoras a mayor escala, al tiempo que llamaba a empresarios de todo nivel para invertir en producción, con miras a la exportación. El tiempo demostró que la medida económica no dio para hacer escenarios políticos adversos. El gran error del Gobierno Nacional fue no informar a tiempo la difícil situación del suministro de electricidad que finalmente le costó el cargo a dos ministros de energía. Informar a tiempo es una tarea difícil en una Venezuela donde los medios asumen el rol de partidos políticos.
El mayor problema es que se trata de una información exageradamente técnica que pocos políticos por excelente oratoria que posean, pueden explicar en lenguaje coloquial. Prueba de ello, es que la mayoría de la oposición argumenta que el fenómeno del Niño es mentira, porque debería afectarnos a todos por igual y en Colombia por ejemplo no hay racionamiento eléctrico. Olvidan que en Colombia se dieron racionamientos más severos hace algunos años también por un fenómeno climatológico y en Venezuela no hubo problemas. Obvian que se disparó el consumo de electricidad en nuestro país, incluyendo el consumo industrial, más el derroche. Y en este último punto, los venezolanos somos expertos, en derrochar gasolina, agua, electricidad, etc.
A pocos meses de las elecciones, la oposición busca desesperadamente espacios en la Asamblea Nacional para imitar el golpe en Honduras. Su primera estrategia ha fracasado y por el bien de todos esperamos que no vuelvan a las delictivas estrategias de abril del año 2002. Tensa calma y se me antoja citar nuevamente a Stanislaw J. Lec cuando dice “De qué estás formado, depende de la genética; en qué te convertirás, de la política”
davidjavier18@gmail.com
