La crisis del agua en Maracaibo

Como es público y notorio el servicio de agua ha experimentado, bajo la administración del ingeniero forestal, Fredy Rodríguez Morales, un deterioro tan pronunciado, que mantiene a las poblaciones de Maracaibo y San Francisco padeciendo la crisis más severa desde los tiempos heroicos en que el agua se vendía en burro. Desde aquella lejana época, Maracaibo no había sido tan castigada por la carencia de este vital líquido como lo está siendo en estos momentos.

¿A qué se debe esta increíble calamidad que desde hace treinta y un año ininterrumpidos venimos padeciendo los maracuchos? ¿A que no haya agua? ¿A la época de sequía, como es la socorrida excusa del inefable ingeniero? Falso, porque el agua que se le suministra a la población no se toma directamente de las lluvias. Pero, además, porque desde el año pasado hasta hoy casi no ha dejado de llover, ha llovido casi ininterrumpidamente desde entonces, incluyendo este año 2010. Razón por la cual los embalses, que es de donde se toma el agua para abastecer de este líquido vital a la población, tanto en las épocas de sequía como en las de lluvia, se encuentran completamente repletos. Entonces ¿a qué se debe esta calamidad que mantiene en el colmo de la desesperación a los habitantes de esta populosa urbe? Para tratar de darle una respuesta a esta interrogante, el flamante ingeniero forestal ha ensayado varias, explicaciones que, por contradictorias y sin sentido carecen de credibilidad.

En efecto, tan pronto este funcionario tomó las riendas de Hidrolago, anunció que el racionamiento sería ampliado a cuarenta y ocho horas, es decir, 24 con agua y 48 sin ella. Y trató de justificar la medida apelando a un sedicente verano que, como ya hemos visto, jamás existió. Desde ese momento, el suministro del agua, que ya era sumamente irregular y pésimo, empezó a experimentar mayores interrupciones y retrasos, hasta que se produjo la rotura de un tubo madre que él achacó al envejecimiento del mismo. Sin embargo, esta excusa tampoco es creíble, porque las cosas como las personas no envejecen por partes sino de una manera integral y uniforme. De manera que si la causa de la rotura del tubo fue su envejecimiento, ya se han debido haber producido roturas por otros sitios del mismo, y eso no ha vuelto a ocurrir. . De manera que es lícito pensar, con muy pocas probabilidades de equivocación, que la explicación dada por Rodríguez sobre este hecho, obedeció al intento de ocultar que la avería se produjo como consecuencia de un sabotaje, con lo cual se estaba haciendo cómplice de este incalificable acto terrorista.

Otro hecho que nos hace pensar que algo muy oscuro, pero muy oscuro, repito, se encuentra detrás del repentino agravamiento que ha experimentado la crisis del agua en los últimos meses, son las reiteradas mentiras y contradicciones en las que a cada rato incurre el presidente de Hidrolago. Por ejemplo, él, en todas las declaraciones que da, afirma que el agua se está suministrando bajo un régimen de 24 por 24, es decir, 24 horas con agua y 24 sin ella, y esto a pesar de que todo el mundo sabe que tal afirmación es totalmente falsa. En el caso nuestro, por ejemplo, en un lapso de 48 horas, apenas nos suministra agua durante 15. Pero como el mayor tiempo de suministro transcurre durante la noche y la madrugada, el suministro efectivo y aprovechable sólo es de 6 horas. Por otra parte, trata de atribuir la deficiencia del servicio en lugares como Veritas, Delicias, San Jacinto y otras zonas del norte de la ciudad, apelando a la desgastada muletilla del Metro que, como es archiconocido, se está construyendo en la parte sur de la ciudad..

La última excusa que le hemos escuchado, y que es tan infantil como las anteriores, consiste en decir que la aguda escasez de agua que experimenta esta ciudad obedece a la incapacidad de las plantas de tratamiento, lo cual es otra mentira más, porque en realidad es todo lo contrario. En este sentido no se exagera si se afirma que existe una considerable capacidad potabilizadora ociosa. Expliquemos: antes de establecerse el criminal racionamiento que desde la cuarta República venimos padeciendo, la ciudad de Maracaibo y San Francisco eran servida de agua potable todos los días. Con ciertas deficiencias en algunas partes, pero jamás faltaba el agua potable en estas dos ciudades. Al establecerse en tiempos del primer gobierno de Caldera el actual racionamiento, y al haberse dividido las zonas urbanas en dos sectores, los cuales son servidos cada uno de ellos un día sí y otro no (ahora son dos días no y uno sí), la cantidad de agua bombeada a través de la red a las dos ciudades, disminuyó exactamente en la mitad. Lo que significa, no hay que ser un gran genio para entenderlo, que el proceso de potabilización disminuyó también un 50 por ciento y que el resto de ese potencial de potabilización quedó ocioso. Esto demuestra que el tecnócrata Freddy Rodríguez también en esta como en las anteriores excusas miente descaradamente.

Pero, además, ya hoy, el agua que siempre viene con un color extremadamente turbio, completament6e sucia, está despidiendo un olor nauseabundo. Una prueba más de que no está siendo trada adecuadamente. Por lo que no tendría nada de raro que aquí en cualquier momento se desatara una epidemia de cólera o cualesquiera otras enfermedades igualmente peligrosas.

Ahora bien, si a quien esto escribe le preguntaran qué piensa de todo esto, tomando en cuenta el pasado político del ingeniero forestal que lo vinculan con Copey, contestaría que está conspirando. El Dpto. de Estado y la CIA están muy activos, y su deseo es provocar a toda costa el mayor malestar posible en ls población marabina. Eso es más que evidente.

Hace poco, los integrante del bloque del cambio, dando una conmovedora demostración de austeridad y espíritu revolucionario, se encerraron la semana pasada en el Hotel del Lago para discutir acerca del sexo de los ángeles, degustar exquisitos platos exóticos y rajarla consabida cañandonga. Y del gas, el agua y el aseo, los tres jinetes del Apocalipsis, que agobia a todos los que tenemos la desgracia de vivir en esta olvidada región del país, nada. Después se extrañan de que la gente apoye al bobo de la yuca Rosales.

Pocos moment5os después de haber escrito esta nota, me entero de que la inefable Hidrolago, o sea, el tecnócrata ingeniero forestal, Freddy Rodríguez, está cobrando las reconexiones del servicio. Esto es monstruoso por varias razones. Primero, porque el estado está en la obligación de suministrar los servicios básicos sin fines de lucro, y esta medida los convierte en un rentable y lucrativo negocio. Lo cual desmiente por completo la cacareada orientación socialista del actual proceso político. En el socialismo, para que se sepa, se tienda a suministrar el agua en forma gratuita, y el agua aquí no sólo no se suministra en forma gratuita sino que hasta se especula y se negocia con ella. Y segundo, es monstruoso también porque es la primera vez que ocurre tal arbitrariedad. Nunca antes ningún gobierno, por reaccionario, antipopular y corrupto que fuera, se le había ocurrido semejante barbaridad. Ni a Lusinchi. pues, que trató de hacerle pagar a la gente las obras públicas que construyera el gobierno se le había ocurrido semejante atentado contra la vida y la salud de las personas.. Pero además de lo dicho, existe otra cosa más que adquiere relieves de escándalo. Porque a las familias zulianas se les cobra, como ya dijimos, la reconexión del servicio del agua, y el gobierno nacional jamás se ha referido a este angustiante problema.

NOTA: Ahora mismo le está cayendo un tremendo aguacero a Chávez en el Pachencho Romero. Lo cual no tiene nada de extraño, porque es algo que viene ocurriendo ininterrumpidamente desde marzo y mientras más llueve menos agua hay en los hogares.

alfredoschmilinsky@hotmail.com




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Alfredo Schmilinsky Ochoa


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