Lo que esta pasando en Ciudad Guayana por desidia o mala intención de las autoridades u organismos encargados de supervisar, dirigir o coordinar la corrección de los problemas que afectan la imagen de la Revolución Bolivariana en relación a la alimentación de las clases humildes, se esta convirtiendo para los que la adversan en un arma efectiva para desprestigiar al gobierno y a las misiones de alimentación intentando achacar al presidente lo que las grandes empresas distribuidoras de alimentos hacen entregando los productos a fomentadores del mercado negro.

Se ve con estupor como que en el mismo Mercado Municipal de San Félix se expenden productos de la cesta básica regulados, incluso algunos provenientes de las misiones de alimentación a cuatro o cinco veces de su precio regulado, lo mismo pasa en los tarantines que se sitúan en los alrededores de este centro de acopio.

Internamente dentro del mercado se supone que existe un control directo de la Alcaldía de Caroní  la policía municipal (policía administrativa) y la guardia nacional pero estos organismos hacen la vista gorda e Indepabis no existe . Al reclamar una anciana el precio de una botella de aceite en un tarantín (Bs 20) el expendedor se la arrebato violentamente de las manos y le expreso que “le reclamara a Chávez si le daba la gana” pero que el pagaba a 12 bolívares cada botella a los chinos mas el transporte en carrucha etc. Quise intervenir pidiéndole a un GN que estaba en la esquina que verificara esta agresión y el me manifestó que les estaba prohibido intervenir en situaciones como la mencionada y que si seguía reclamando podía ser llevado al puesto de la GN a la chalana por falta de respeto a la autoridad (¿?).

Las balanzas (pesos) que usan la mayoría de los expendios de alimentos de este mercado por raras coincidencias y muy mala intención  son de 20 kilos hacia arriba lo que posibilita el robo en la pesada pues es imposible verificar la exactitud de lo adquirido cuando se compra cantidades pequeñas, muchas veces el robo es de 200 o mas gramos por kilo.

Se vende carne sin saber su origen sin contro sanitario y en plena calle en mesones improvisados sin la mas minima normas de sanidad y aunado al robo de gramos se pone en peligro las salud de los usuarios ya que los excrementos corren libremente hacia el mercado por falta absoluta de cloacas en ese sector y centro de San Félix.

Ha habido una excelente idea de los consejos comunales de la Parroquia Simon Bolívar de efectuar en el puerto de las chalanas una feria de Mercal todos los días, pero por la viveza criolla ha distorsionado esta iniciativa es así como vemos a familias completas y muchas veces con amigos y vecinos comprando aceite, harina de trigo, detergente, café, azúcar y todos los productos que se expenden en Mercal y a menos de cien metros montan con un par de tablas un tarantín de los mencionados vendiendo y estafando a los compradores a vista y paciencia y protección de las autoridades, incluso los indígenas que hasta ahora también por falta de oportunidades se dedicaban a mendigar en los semáforos hoy venden aceite y harina como mejor negocio, llevan la tribu completa a comprar para eso duermen en el piso de los alrededores de las chalanas y son los primeros clientes de la feria de Mercal.

Dentro de poco tiempo inauguraran un nuevo mercado municipal, pero antes el señor Alcalde del Municipio debiera publicar en la prensa un reglamento de uso y las normas internas de comercialización para que los locatarios y usuarios conozcan y se atengan a las normas internas y a la regulación de precios establecidos por el gobierno además en el contrato que se firme por cada local se debería especificar las limitaciones y prohibiciones que impidan el sub arrendamiento de los espacios, el traspaso,  especifiquen el uso de las balanzas y pesos previamente auditados por las autoridades además de las cláusulas de revocación de la concesión en caso de faltas graves. Son fuerte los rumores de guarimbas preparadas por los mismos actuales locatarios del mercado viejo si se les imponen restricciones a lo que ellos llaman libertad de comercialización y que no es más que malandrajes disfrazado y estafas a los usuarios, se comenta de la existencias de mafias que sub. arriendan los espacios internos y externos.

Es necesario acabar con las cuotas que se cobran a diario por cada local o espacio con la escusa que es para pagar el aseo ( muy mal ejecutado) reemplazándolo por una alícuota por metro cuadrado anexo al recibo del alquiler mensual.

Así como se ha implementado con gran acierto el Dibise para contener los delitos contra las personas, se debiera implementar un organismo similar independiente con la participación de Indepabis, distrito sanitario (que no funciona), metrología legal (pesos y medidas), policía municipal, GN, fiscalía y personal estrenado de los consejos comunales con oficinas para impedir el delito con la alimentación del pueblo y con autoridad suficiente para cerrar y multar además de requisar la mercadería de los tarantines que expendan con sobreprecio alimentos regulados o estafen en los pesos  deteniendo a los reincidentes.

También en Guayana vemos quizás con envidia como a través de canal 8 se muestran Areperas Socialistas, Camiones Carnicerías, Ferias Populares de Mercal etc. en Caracas (aquí en Guayana las ferias se hacen en el Estadio de la Ceiba donde es casi imposible que los humildes que no cuentan con vehículos lleguen al lugar por falta de transporte publico) pareciera que no interesa que el resto del país se beneficie de estas posibilidades de acceder a alimentos a bajos costos.

Esta en manos de las autoridades tanto municipales como nacionales poner coto a estas situaciones de menoscabo de las regiones e instruir a los organismos encargados de que hagan cumplir las leyes o nuestra anhelada revolución se nos ira a pique por desidia de quienes deben asumir las responsabilidades de garantizar la alimentación al pueblo.

Patria sin socialismo es muerte

Debemos vencer