A pocos días del inicio de la campaña electoral por las gobernaciones y consejos legislativos se abre en Bolívar una importante puerta a la recomposición de las fuerzas revolucionarias con el anuncio del Partido Comunista de su disposición a la unidad si el PSUV considera una nueva candidatura a la actual.
Es una propuesta política, no es una imposición y mucho menos un chantaje, en Política, así con “P” mayúscula, las soluciones se construyen en colectivo, afincándose en el diálogo, el entendimiento y el reconociendo al aliado no como un subalterno sino como individualidades, grupos u organizaciones que tienen todo el derecho a hacer sus propuestas y a ser escuchadas.
Es bien significativo el hecho de acercamiento de las direcciones del PCV y el PSUV y haber logrado, ojalá definitivamente, aislar a quienes pretenden “extirpar” como un cáncer maligno a quienes disientan de decisiones que se toman no siempre con claridad en el objetivo porque toda la teoría revolucionaria, y hasta el propio líder del proceso, llaman permanentemente a ser críticos y propositivos; hará mucho bien entender que todos somos actores importantes en este proceso y en todos recae la responsabilidad de su defensa y profundización.
En definitiva, sí un personaje, uno solo, es la traba para la unidad electoral lo que luce responsable es cambiarlo y quienes tienen esa posibilidad en sus manos no pueden fallarle al pueblo revolucionario que está esperando esos gestos de las dirigencias políticas que las hagan coherentes con los sacrificios cotidianos a los que ese pueblo se ve sometido en el impulso a un proceso de liberación nacional tan complejo como el que vivimos.
Más allá de las decisiones finales en lo electoral estamos todos coincidiendo en la necesidad de la recomposición política de la alianza a través de la revisión profunda de la política sindical, minera, campesina y de masas que se ejecuta en el estado Bolívar a nombre del proceso, en Guayana urgen los encuentros partiendo del debate y dejar de lado las conductas represivas y persecutorias a la disidencia porque eso no tiene nada que ver con revolución.
Está abierta una gran posibilidad de unidad electoral revolucionaria, todos trabajemos porque sea aprovechada para bien del proceso.
Profundización del proceso bolivariano
Luego de las elecciones presidenciales que significaron una nueva victoria popular y revolucionaria en nuestro país, cuyos números necesitan una lectura muy profunda y cuidadosa para sacar de ellos conclusiones importantes, es imprescindible abrir, pero abrirlo de verdad, el debate donde se expresen las distintas visiones sobre qué es la profundización del proceso bolivariano, lo cual pasa, a mi entender, por la necesidad de insistir sobre la caracterización del mismo.
El problema del proceso va mucho más allá de ser un simple tema de gestión, que es importante nadie puede negarlo, pero la caracterización y profundización de la revolución bolivariana es un problema fundamentalmente político que nos señala la obligación de una revisión profunda de los objetivos y metas históricas que esta importante coyuntura está obligada a cumplir para ir avanzando hacia estadios superiores, y en ese sentido hay que reconocer que el presidente Chávez ha hecho grandes esfuerzos en la teorización y en la sistematización de esos objetivos cuyos documentos y planes bien pueden ser el punto de partida de ese gran debate nacional.
El autor es: Militante del PCV
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@edgarmelendez79