Estados Unidos gasta millones de dólares en cupones alimentarios, por la gran cantidad de desempleados y subempleados en su estructura social, sumada a los inmigrantes y migrantes que ven ese Estado nórdico como la repuesta adecuada a sus problemas sociales. Constituye un sarcasmo, como un Imperio decae por la acción guerrerista que desempeña aunado al consumo de drogas que tanto daño ocasiona a su juventud y efectivos que se encuentran en Irak y Afganistán. Lo interesante, es que se quedan sin alimentos y ven a Latinoamérica como la gran hacienda en invertir, por esto, preparan sus fragatas y personal desde Costa Rica, Honduras, Colombia y Perú.
Es cuestión de corto, tiempo para esta nueva hazaña. Mientras la oposición en una campaña no clara permite en sus Estados controlados por organizaciones partidistas afines, que la delincuencia y la droga corran en sus barriadas para juzgar a quienes trabajan por un nuevo proyecto sea factible o no. Pero, la idea es caer en una suma de aforismos negativos que dañen la esencia de nuestra juventud, su fuerza para el trabajo y el estudio. El problema no es el petróleo, lo constituye el agua y el gas. Los nórdicos cancelan grandes sumas de dólares para el sabotaje energético y amilanar las fuerzas bolivarianas de ataque estratégico.
Más allá de un proceso de cambio exigido por el nuevo orden mundial, todos debemos asumir el perfil de la nueva patria. Ese cuerpo de principios legislativos escondidos por el extinto Rafael Caldera y que Carlos Blanco, como presidente de la Comisión de Reforma del Estado, (COPRE), le entregó después de varios años de análisis estructural una nueva versión de lo que se supone es el Estado y debe ser. Solo el presidente Hugo Rafael Chávez Frías fue capaz de someter a consideración del pueblo, con sus reformulaciones ésta Reforma Estadal llegando a unos logros fundamentales para el desarrollo del país.
Colombia esta intervenida por Estado Unidos, con sus siete cuarteles con tropa norteamericana y, lo del Plan Colombia es un encierro de mentiras para observar a Venezuela, los paramilitares lo han hecho bien, impregnan nuestro país de muchas negatividades y el Ministerio Público es débil en su accionar. Ojala no nos sorprendan, ya el alerta esta dado y los norteños desean originar un temblor en nuestro país para ver nuestra reacción, lo anuncian desde hace tres años en las Iglesias evangélicas, todos desean repetir lo de Haití.
USA, tiene su propio proyecto de descalabro para el mundo, desean imponerse a fuego limpio y cadáveres, nunca colaborando con tecnología a los aliados. Israel, Inglaterra y los Estados Unidos son la misma gente y parten del mismo tronco común, el protentatismo. Leemos la visión de la Iglesia protestante hacia el Cono Sur con sus misioneros canadienses, ingleses, irlandeses, norteamericanos. No el romanismo, ellos son una secta falsa de aduladores que entregaron a Jesús en su tiempo para el cumplimiento de las profecías, pero el maceramiento de su cuerpo y ofensas llegó más allá de lo escrito.
El agua dulce del Amazonas venezolano y Brasileño, es fundamental, igual que sus plantaciones, lo necesitan para su industria farmacéutica y necesita minerales para el desarrollo nanotecnologico de sus empresas.
El silencio, es una expresión utilizada por Colombia para penetrarnos. Es una batalla de baja intensidad que se inició con la movilización de sus residentes bajo la excusa de la guerrilla, luego la droga y paramilitares. Estos últimos contratados por ganaderos venezolanos para defender sus haciendas y líderizados por Álvaro Uribe, expresidente de esa región andina. Son elementos para el análisis de una realidad y donde el explosivo esta latente en nuestro propio territorio. Las barriadas y poblaciones suburbanas tienen el primer oficio en sus manos de sabotaje con las redes populares de Leopoldo López, gerentes de la Hidrológica, Corpoeléc y las ONGS. Las debilidades de un ejecutivo nos han derrotado por mantener gente no definida con el proyecto bolivariano y Obama, solo espera la oportunidad para activar su artillería hacia Venezuela desde Colombia, Aruba, Curazao y Costa Rica. Mientras, nuestros jóvenes conviven con el consumismo transnacional, completamente erráticos de una verdad cercana-
*escritor. Miembro de La Asociación de Escritores de Venezuela. Capítulo Carabobo.
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