Comentaba Paco Ignacio Taibo que Benito Juárez siguió adelante con el fusilamiento de Maximiliano por su importancia simbólica para el respeto a la soberanía de México. Los tiempos han cambiado pero la indignación y las exigencias de justicia, no.
El Gobierno está ha enfrentado exitosamente al hampa común y está haciendo lo imposible por someter a la no tan común, al servicio de los intereses del gran capital, del narcotráfico y de los perros de la guerra. La batalla es intensa y sostenida.
Aunque es casi imposible no reaccionar ante las ejecuciones y demás acciones terroristas, las pseudo protestas, las agresiones y abusos de la burguesía, la corrupción, la desidia, la desatención, etc., no podemos caer en provocaciones. Tenemos que mantener la calma, tenemos que acompañar al Presidente y a las autoridades en la lucha por la paz. Sin embargo como corresponsables de la gestión pública y del futuro de Venezuela y los venezolanos, también tenemos que exigir mano dura y justicia. Donde no hay justicia no puede haber paz.
Enfrentar la agresión imperial contra las iniciativas libertarias en América Latina es tarea de todo revolucionario. El gobierno necesita ayuda y debe dejarse ayudar por grupos y personas que estén dispuestos a hacerlo y puedan colaborar en la realización de tareas complementarias a las que están asumiendo las estructuras del PSUV y jóvenes que deben invertir gran parte de su tiempo en formarse política y prácticamente para trabajar por la nueva Venezuela productiva.
El Gobierno puede repartir entre un ejército escribidores la terea de responder a las infamias que se escriben sobre nuestro país. Puede crear canales para recibir información de “cooperantes”. Puede conformar equipos que diseñen sistemas inteligentes para el seguimiento de operaciones en divisas desde la presentación de una solicitud hasta la consecución del objetivo para el cual fueron otorgadas, para la supervisión de financiamientos específicos, para el rastreo de casos en manos del poder judicial, etc.
Puede repartir el control de las firmas macro importadoras entre equipos de personas retiradas con experiencia en las áreas de comercio, aduanas y supervisión de operaciones. Puede apoyarse en especialistas y docentes jubilados para la formación de maestros en distintas áreas. Etc. etc. etc.