El sistema económico capitalista es la culminación histórica de una serie de sistemas económicos basados en la apropiación de la riqueza social producidos por la mayoría de la población, por una minoría. La violación masiva de los derechos humanos fundamentales a los hombres y mujeres como el derecho a la alimentación, la educación y la salud. En el año 2011, según Naciones Unidas el planeta tierra alcanzó la cifra de siete mil millones de personas. Se calcula que el 1% de la población se apropia del 99% de lo que se produce todos los años en el mundo.
En los países con sistema capitalista los empresarios pueden producir y vender cualquier tipo de mercancía sin ningún control. No existe la posibilidad, por ejemplo, de priorizar la producción de los alimentos o cualquiera otro renglón de primera necesidad por parte del Estado. Esto produce una anarquía en la producción que al final perjudica a los habitantes de bajo recursos, que conforman en todo el mundo el 90% de la población mundial. Además, el empresario fija libremente el precio de venta del producto a su criterio especulativo.
La situación de pobreza mundial es tan grave, que Naciones Unidas en el año 2.000, se vio en la necesidad de convocar una Asamblea para obligar a 189 de sus países miembros, a cumplir con ocho objetivos del Desarrollo del Milenio que consiste en lo siguiente. 1. reducir la pobreza extrema y el hambre a la mitad para el año 2015. 2. Lograr la educación primaria a la mitad. 3. Promover la igualdad entre el hombre y la mujer. 4. Reducir la mortalidad infantil. 5. Mejorar la salud materna. 6. Combatir el VIH SIDA, el paludismo y otras enfermedades. 7. Mejorar el medio ambiente. 8. Fomentar la cooperación internacional.
Estamos en el 2015, y solo 38 países han cumplido con el primer objetivo del milenio, reducir la pobreza a la mitad. Este fracaso viene a ratificar la imposibilidad de medir el éxito de un país o el bienestar de la población, únicamente a partir del ingreso económico del país. Las pruebas son claras y concluyentes, los países pueden lograr muchos avances en salud y educación, pese a los aumentos moderados en los ingresos. Otros países con mejores ingresos no lo ha logrado una buena calidad de vida para la población. Esto lo demuestra el hecho que entre los 38 países que lograron reducir la pobreza extrema a la mitad para el año 2015, no están las cinco primeras potencias económicas. El hambre es la forma común de morir en el planeta tierra y pocas personas se preocupan por eso, porque son los pobres del planeta. La mitad del planeta no tiene agua potable y no tiene electricidad permanente. Mueren todos los días 50 mil personas, o sea más de 18 millones de personas al año por hambre y enfermedades previsibles y eso no aparece en los medios de comunicación.
El modelo capitalista ha fracasado y no ofrece solución a la humanidad, solo puede provocar una guerra termonuclear que sería la extinción de la vida en el planeta. La lucha de hoy es por la sobrevivencia de la especie humana. La solución es el sistema económico socialista, definido como un sistema social donde lo importante es la propiedad social de los medios de producción como la tierra, las maquinarias, el capital y con la producción social por parte del Estado se podría disminuir la pobreza en el mundo, y brindarle educación, salud, trabajo y vivienda. La verdadera riqueza de una nación está en su gente, no en la acumulación de riqueza en manos de una minoría.