Gobiernos de todo el continente americano se reúnen en la ciudad de Panamá (09-10 abril, 2015), en calidad de akelarre para una interesante conversa intra-grupo y asimétrica en los intereses para así marcar pulsos sistémicos actuales que pululan a lo transversal americano; por cierto, desconocemos sí los “territorios de ultramar” francés y estados asociados a Washington tendrán los derechos correspondientes para estar presente aún y cuando no se les permita participar.
Al tiempo del referido akelarre político también se realizarán cónclaves interesantes, a saber: la que tratará cómo impulsar la reingeniería del sistema dependiente capitalista para todos los países americanos donde estará como “speaker fundamental” quien firma órdenes ejecutivas porque se las ponen delante; estará la interesante e importante reunión de los rectores de las universidades de nuestras geografías con propuestas íntimamente relacionadas con la nueva realidad laboral local enmarcada en las políticas que se vienen impulsando desde los puestos de mando capitalistas en considerando la contradicción: “colchón laboral” versus plusvalía, es decir, cómo deberá sobrevivir el capitalismo para que siga imperando el Capital sobre las sociedades en componentes de “seres creados”; y, por último, una subversiva reunión de “comunistas, socialistas, nacionalista, anarquista, revolucionarios de oficio, contra-capitalistas, conspiradores de izquierda, pueblos originarios” y todo esa fauna de gentes que no les gusta el capitalismo donde, seguramente, expondrán ideas revolucionarias líderes latinoamericanos.
La Cumbre de Panamá tendrá por los pasillos y calles conversas sobre política, economía, asuntos sociales, asuntos ideológicos, revoluciones, contra-revoluciones, conspiradores, mirones y ni-ni pero, curiosamente, no estará presente el “tema militar” que, en todo el continente americano, históricamente, siempre ha estado presente en sus paradigmas locales más en estos tiempos históricos cuando el “tema militar” también está inmerso en una profunda re-ingeniería no solo continental sino en los marcos referentes a la “nueva política Obama” como la define con precisión José Vicente Rangel Vale (JVR). ¿Hipocresía?
En la Cumbre de Panamá estará latente aquella verdad histórica expuesta por don Simón Bolívar, “El Libertador”, sobre nuestro inamovible vecino del norte ahora, en estos tiempos, acompañado en cruel matrimonio por Canadá adosándose “el antiguo Imperio británico”. Estará presente el “ideario de Chávez Frías” quizás hasta por encima del líder revolucionario del siglo XX, Comandante Fidel Castro Ruz, aquel que diría, en actual e histórica ironía, que la “…Organización de Estados Americanos (OEA) es el ministerio de las colonias…”. Pero es aún más curioso y muy digno de considerar que don Simón Bolívar, “El Libertador”, que nuestro Comandante en Jefe, Hugo Rafael Chávez Frías y el Comandante Fidel Castro Ruz son “hombres de armas” a contrario del Presidente Barack Husseim Obama que, quizás nunca le dieran la oportunidad de “…vestirse de uniforme…” a pesar de ser Comandante en Jefe de las huestes atílico-mongólicas estadounidenses. Por cierto e interesante sí tratamos de conocer el componente social del ejército global estadounidense podríamos percibir el alto número de afro-americanos, latinos, blancos de estados muy tradicionales y conservadores y otros migrantes.
Ahora ¿Por qué no se trata el tema militar en tan importante akelarre americano donde se tratarán temas extremadamente sensibles, importantes, fundamentales no solo para la Región americana sino para los denominados equilibrios globales? Es decir, sí nos llenamos la boca de ser sociedades orgullosas de nuestros militares, suponemos que también tienen tanto derecho de estar presentes en Panamá como están los empresarios, los doctos en enseñanzas universitarias, los pueblos. En pocas palabras, eso de sociedades cívico-militares, en estos momentos panameños, están cojeando en la cuarta pata de la mesa. Claro, debemos considerar en contrario que hay políticos que aún no han comprendido que los militares no solo son uniformes y condecoraciones sino los que van en la vanguardia cuando de defender la Patria se trata. Pero el capitalismo es así, te uso y utilizo según mis intereses personales de clase. Cualquiera con dos dedos de frente lo percibe.
Pero ¿Por qué de nuestra insistencia en la necesidad de la presencia militar en un akelarre como el de Panamá, como conjunto social de estas sociedades post-modernas capitalista, en las actuales realidades globales de reingeniería global de todo cuanto significa el progreso? Cualquiera de los analistas e investigadores que se reunieron en la Casa Amarilla en el foro de intelectuales podría responder tan tamaña inquietud pero fue un tema tangencial para una mayoría de los presentes aunque estaban presentes las inquietudes en la atmósfera de tan importante y transcendental reunión.
El escenario actual mundial nos está mostrando como miembros de los diferentes componentes militares estadounidenses están “montándose en un avión” para aterrizar en cualesquiera país-miembro de la OTAN. Estamos conociendo un día sí y otro también como altos funcionarios del Departamento de Defensa estadounidense viajan a Japón, Corea del Sur, Filipinas, Singapur, Australia, Tailandia, Malasia hasta Myanmar para sostener una conversa sobre la necesaria reingeniería de acuerdos militares, de ejercicios conjuntos humanitarios, de aterrizajes forzosos y provocadores en Taiwan con las finalidades, en ambos casos, es decir, Comunidad Europea y Asia-Pacífico de desarrollar cercos estratégico-tácticos alrededor de Rusia y China para estar preparados sobre la supuesta invasión de tropas rusas sobre países del Báltico y de reconfirmar los espacios territoriales de China en el Mar Oriental de China y en el Mar del Sur de China. Esa es la realidad militar actual en el marco de las profundas reingenierías del sistema capitalista en comprendiendo el real significado histórico de ese sistema socio-económico mundializado para unos, globalizado para otros, es decir, para “tirios y troyanos”.
Entonces ¿Qué expondrá el Presidente constitucional según las leyes estadounidenses y Comandante en Jefe de los ejércitos del Imperio estadounidense, Barack Husseim Obama, en la Cumbre de Panamá? Sencillo, repetirá su frase: “…habrá que torcer algunos brazos…” porque lo que está en juego es la pervivencia del sistema capitalista. Nos explicamos.
Por los mundos de Dios hay una persona que no para de criticarnos porque nos considera contra-capitalista y comunista. Bien la respuesta es sencilla: el sistema capitalista está en su proceso kaputt.
¿Todos los paradigmas del capitalismo son errados y/o son malos, malucos? Para nada! Es verdad que hay dogmáticos en ambas aceras pero un análisis objetivo nos lleva a comprender las limitaciones históricas a las cuales se tuvo que adaptar Karl Marx y otra es el impacto de las ciencias y tecnologías más en estos momentos cuando la nano-tecnología por razones de costos tanto de materias primas, costos laborales y de las impropias distribución de la plusvalía enfrenta ese sistema histórico. Pero esa realidad se puede revertir aunque no se debe permitir que se revierta; para poder llevar a consideración esa reversión son necesarios las fuerzas armadas nacionales cuales, actualmente, según la nueva doctrina militar en el marco de la “nueva política Obama” (JVR dixit), ha trasmutado de aquella propuesta de convertir a los ejércitos latinoamericanos en “policía de punto” a la actual doctrina de una conjunción de “ejércitos privados” en el marco de la política socio-económica capitalista de privatizar todo lo fundamental-estructural para la supervivencia del sistema capitalista en el marco de la actual realidad de la globalización-en-crisis-estructural y en la consecución de lo que nos hemos permitido conceptualizar como la “fase superior del imperialismo”.
¿Cómo revertir la actual crisis en un escenario de permanencia de los nuevos paradigmas del capitalismo global en el marco de su reingeniería según la doctrina contenida en la “nueva política Obama” que llevará el Presidente Obama a la Cumbre de Panamá? Es evidente que “poner el dedo en la llaga” no lo desea ningún mandatario menos el representante del Imperio estadounidense. Analicemos.
EEUU de América ha decidido “romper su propio cerco” que se había auto-impuesto contra Cuba sin desconsiderar los terribles efectos sobre la sociedad cubana con lo cual nos muestra una incontestable prueba de cómo el capitalismo respeta al “ser creado” como “ser social”, en este caso concreto, al pueblo cubano. La necesidad de romper ese cerco se sustenta en las realdades que se han venido desarrollando con la presencia legal, legítima y constitucional del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías en Miraflores y sus certeras y demostrables influencias en el continente americano incluyendo los EEUU de América. Un simple vuelo de pájaro en referencia al triunfo electoral de Nicolás Maduro Moros y el momento cuando Washington decide mencionar la “frase histórica” sobre el “Bloqueo a Cuba” percibimos una intencionalidad geo-táctica en el marco de la “nueva política Obama” (JVR dixit) que hemos referido en algunos de sus paradigmas más arriba. A ello debemos considerar la propuesta en unidad sobre el Pacífico y el envío de tropas estadounidenses a Perú y el envío de un buque-hospital a naciones del Caribe en el marco de la nueva doctrina geoéstratégico-militar estadounidense para América Latina y el Caribe. Es decir, “…la zanahoria y el garrote…”. (aka: política humanitaria pentagonista)
En ese orden, tendríamos dos doctrinas confrontadas: la nueva doctrina geo-estratégica estadounidense arriba en corto desglose y la propuesta del Comandante ugo Rafael Chávez Frías en el marco del “pensamiento Chávez” de “unidad cívico-militar”.
¿Qué hacer?
UNIDAD, LUCHA, BATALLA, VICTORIA.