El tiempo se agota, Gran Bretaña a nadie va a engañar, las máquinas de propaganda vienen trabajando con gran intensidad sobre papel, mientras los misiles acaban con los pueblos, impulsados desde Drones.
Hay un chantaje mundial contra Latinoamérica y en Venezuela, tenemos conspiradores internos que le dan un mediátismo a cada hecho u acto político. Los cabalistas opositores, tratan de recuperar el control sobre la opinión pública, pero no pueden. El pueblo, sigue apoyando al gobierno bolivariano en éstos últimos quince años.
Ahora, nos quieren aterrar, bajo la influencia nazi, la mano levantada, las fotos de muchos dirigentes se ven por allí levantadas en páginas de Internet.
El espionaje, abraza a Brasil, buscan darle una hegemonía al dólar de una manera global y, bajo éste principio derrocar al régimen socialista y democrático del presidente Nicolás Maduro Moros, bajo razones políticas domésticas. La presidente del presidente de Brasil se reunió con el premier de Guyana, más no con el presidente Maduro.
A través del Consejo de Seguridad de la ONU, Washington impone sanciones para disfrazar sus agresiones económicas hacia Venezuela y de una manera unilateral utiliza elementos foráneos de combate fascista como bachaqueros, paramilitarismo, comercio informal y por último narcotráfico, para asediar a los venezolanos y muestren su rebeldía.
En definitiva, Estados Unidos copta a individuos que controlan toda una red de comercialización que llega hasta los empleados de supermercados como abastos, quienes controlan la entrada y salida de los alimentos básicos a un costo elevado, desangrando el dinero del venezolano, adquirido por su fuerza laboral.
El Estado, debe actuar, porque es toda una estructura de usurpación que el mismo Estado proporciona con la entrega de dólares a las transnacionales para producir alimentos, pero, que ellos segmentan para crear subversión y guarimbas armada y civil en el país.
Una de las grandes controversias de la geopolítica mundial, es el cuestionamiento de los ingleses hacia los judíos. Deseaban a toda costa que ayudasen en la reconstrucción de Europa, luego de la II Guerra Mundial y no fuesen a Tierra Santa, sobretodo los sionistas que manejaban el capital de empresas y minas y deseaban formar un centro operativo central en un país o isla asiática, como Taiwan, lo hicieron. Los árabes, se dedicaron a la producción agrícola y ser vigilantes de las murallas de aquellos pueblos temporales que se perdieron en la historia.
Gran Bretaña, es un brazo ejecutor armado peor que Estados Unidos y Alemania juntos. Sus objetivos fueron cumplidos al principio al dominar tierras judías y La India. Sus mares se prestaban a comercializar y conformar organizaciones armadas con sus goletas.
El sionismo se centró al principio en la Rusia de 1880- 1990, luego se extendieron hacia Italia, Polonia, Serbia, Irlanda hasta llegar a Grecia y Argentina. Luego se trasladaban con algunos ingleses hacia el Continente virgen del Sur que se denominaba Latinoamérica.
Gran Bretaña, siempre ha aprovechado lo que le dejan los países invasores y los criterios de la ONU poco les importa. Son expertos en formar teorías de la conspiración, creando bulas y expedientes bajo la asesoría de España para formar laudos territoriales y arbitrajes, son unos ladrones de tierras, luego le dan un plácet a los países convencionales para su intervención en actos de guerra.
El escenario más realista, es el cobro de múltiples billones de dólares, producto de la extracción a nivel mundial y, a cada gobierno derrumbado le establecen en forma gradual un nuevo sistema financiero, justificando sus operaciones secretas, incluso su acercamiento a Asia.