La reciente decisión del Citibank de anunciar el cierre de cuentas en esa entidad al Banco Central de Venezuela y al Banco de Venezuela, es una acción que se enmarca en el tablero de la guerra económica que desde fuera se gesta contra Venezuela. Es un acto más de sabotaje a las operaciones financieras internacionales de nuestro país, que llega en un momento donde la economía y las finanzas del país, empiezan a dar muestras de recuperación.
Hace más de un siglo los EEUU organizaron y se empoderaron de las operaciones financieras internacionales junto a la Gran Bretaña con el objetivo de controlar y dominar a todos los países. Dictaron normas extraterritoriales que con el tiempo se convirtieron en Ley y que hoy son un mecanismo de chantaje cuando de presionar a un país se trata.
Los EEUU y la UK monitorean y controlan todas las transacciones financieras internacionales, por vía del control de los medios de pagos y cobros que validan esas operaciones entre los países del mundo.
Por vía de las bolsas de valores especulan y atentan contra los Estados, atacando el valor real de los bonos soberanos, por conducto de las calificadoras de riesgo forjan opiniones fraudulentas acerca de la salud económica de los países y por medio de los Bancos Globales controlan el flujo de operaciones financieras en el Mundo entero.
Lo mismo hacen con los precios de las materias primas, al alterar su valor real cuando promueven la especulación y la alteración de los volúmenes comercializados de esas materias primas, alterando de forma dolosa los precios de referencia.
Hoy por fortuna Rusia y China han logrado ensamblar nuevos sistemas de pagos y cobros internacionales que permitirá salir al paso a esta dominación neo colonial.
Venezuela y el mundo pueden quitarse de encima el control y el sabotaje que EEUU pretende seguir agudizando contra sus ciudadanos y nuestro gobierno, dando paso a una nueva arquitectura financiera internacional y establecer base de operación desde China y Rusia, para cerrar ese oscuro capítulo de sabotaje financiero.
Un nuevo orden mundial está naciendo.