James Mattis, ministro de defensa del imperio estadunidense ha realizado una intensa gira por varios de los países del Grupo de Lima, cuyos gobiernos son totalmente afines a la administración norteña, a nivel de sucursales. En esta oportunidad, se apersonó en Argentina, Chile, Brasil y Colombia. Los temas públicos: bases militares, seguridad cibernética, formación, financiamiento de operaciones, venta de armas (en nuestra opinión el principales tema comercial) y por supuesto Venezuela.
Antes de esta gira a sus aliados y clientes, el gobierno de Trump ha preparado el camino con otros enviados como el Subsecretario de Defensa, el Jefe del Comando Sur y su equipo, que se han distribuido por todos esos países en la Fase Cero ("0") del Plan de "Ayuda Humanitaria".
En Perú, un Coronel del Comando Sur, explicó con detalles en que consiste dicho plan. Tiene 5 fases que se enumeran del cero al cinco (0 al 5). La "0" ya comenzó con las andanadas propagandísticas sobre la situación venezolana. La matriz utilizada es la "crisis humanitaria". Eso se repite en las cadenas de televisión, radio, redes, prensa y conferencias. En este momento, en cualquier universidad de EEUU, de la Unión Europea y del Grupo de Lima, en las embajadas de esos países en el mundo, están repitiendo el mismo guión de la crisis humanitaria. Las mismas imágenestrucadas, las medias verdades.
Si para Iraq usaron el eslogan de "armas de destrucción masiva", para Libia el de "bombardeo a la población civil" y para Siria "posesión y uso de armas químicas", para Venezuela es "crisis humanitaria".
La fase 1 es la de coordinación de la "ayuda" con instituciones nacionales. El desconocimiento de las elecciones presidenciales por EEUU y prácticamente por el grupo de Lima, así como la creación de un TSJ fantasma, auspiciar a la AN, y recibir protocolarmente a delincuentes políticos que huyen de la justicia, confirma la ejecución de esta fase. La fase 2 será la intervención disfrazada, con buques tipo hospitales, con movimientos militares en las fronteras terrestres en Colombia, Brasil y en las plataformas continentales fronterizas en el Caribe. Esta fase está en pleno proceso.
Mientras se busca una falsa legalidad de la OEA o algún grupo subregional fantasma que cumpla el papel de comparsa en la intervención para desarrollar las otras fases. En este momento la diplomacia venezolana debe estar en plena acción, en especial con los países del Sur, la siempre amiga África, Asia con China, Rusia y los países nuestroamericanos que defiende a América como zona de paz.
Es la hora de los pueblos organizados, que se alcen las voces irreverentes en todos los continentes, en Europa, en EEUU, en Japón, en Canadá, en Israel. Las voces por la paz, por la solidaridad, contra las hegemonías y la barbarie.
Alerta máxima Venezuela, a denunciar esta mortal injerencia externa.