A 780 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en el transcurso de la semana 112 de esta contingencia, y siendo el miércoles 04 de mayo de 2022, hoy quiero referirme al por qué el Presidente Nicolás Maduro no procedió al decreto de aumento de salario el pasado 1 de mayo de 2022.

Es importante señalar que en el mes de marzo del presente año, en el marco de la presentación de las conclusiones del II Congreso de la Clase Obrera, el Presidente Nicolás Maduro Moros indicó en el referido acto que hay un plan para dar con la recuperación paulatina y gradual no sólo del salario mínimo y su consecuente impacto en las tablas de la Administración Pública y en Venezuela. Además del tema de la discusión de las contrataciones colectivas y los beneficios para los trabajadores y trabajadoras de la Patria.

Pero no es menos cierto también que el Estado de Bienestar producto de nuestro modelo político, social y económico contenido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela fue trastocado por las medidas coercitivas unilaterales impuestas desde el año 2015 por las administraciones de Obama y Trump, y es apenas desde los años 2021 y 2022 cuando algunos signos de recuperación económica se observan dentro del país.

Esto hay que reconocerlo sin duda alguna. Hay un esfuerzo. Que no sea suficiente aun, indudablemente que estamos de acuerdo y habrá que seguir trabajando.

Y sobre todo, hay que tomar debida nota de algunos anuncios positivos que hizo el presidente Nicolás Maduro en su discurso del 1 de mayo, que no podemos despreciar, antes de entrar en el objetivo fundamental de esta nota de hoy.

a) Un bono 2250$ para los jubilados, es decir, 10.000 bolívares.

b) Autorizó a los distintos sindicatos a firmas sus respectivos contratos colectivos que eso tenía parado como 10 años y por ahí vendrán nuevos beneficios para todos

c) Un plan para recreación

d) Nuevas leyes para proteger a algunos trabajadores y trabajadoras, en especial las trabajadoras y trabajadores del hogar, por solo colocar un ejemplo.

Ahora bien, el tema central y que ha generado toda una controversia sobre el por qué el Presidente Nicolás Maduro no decretó un nuevo aumento del salario mínimo, tiene causas diversas y variadas. Pero hay una que fue lo que de alguna manera bloqueó esa decisión.

El diputado de la AN por el PSUV Portuguesa e integrante de la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores y Trabajadoras, Francisco Torrealba, quien fungió en un momento como Ministro del Poder Popular del Proceso Social del Trabajo y en múltiples ocasiones en esta materia ha fungido como vocero de anuncios en materia laboral del Presidente Maduro, había señalado en el mes de marzo, cuando se dio el aumento salarial de medio petro (130 bolívares para la fecha), indicó que "no se descartaba un aumento salarial para el 1 de mayo".

Y esto es así no solo porque culturalmente la Revolución Bolivariana nos acostumbró que en la marcha clasista y revolucionaria del 1 de mayo siempre se anunciaba eso, sino que además de eso, como ya lo señalé, existe un plan para la recuperación paulatina, gradual, pero sobre todo sostenible del salario de los trabajadores y trabajadoras de la Patria.

Ante la desazón y la amargura en algunos y algunas debido a que tan esperado anuncio no fue realizado por el Presidente Maduro, el canal del sistema patria reprodujo unas declaraciones que dio el deleznable ex presidente de Fedecámaras y renegado de la izquierda venezolana (se le olvidaron sus tiempos de militancia en el partido Causa R y cuando fue parlamentario en el antiguo Congreso por esa tolda política nada más y nada menos que por el estado Bolívar, algunos conocemos su verdadera historia) Jorge Roig, quien explicó las razones del no aumento salarial del pasado 1 de mayo.

En la información que salió en el canal de telegram del sistema Patria y que fue rápidamente viralizado por diferentes plataformas tecnológicas y redes sociales digitales, señaló Roig de que no se dio el aumento por acuerdos del Ejecutivo Nacional con la OIT de que de ahora en adelante decretar los aumentos salariales en mesa tripartita (Gobierno, empresarios y trabajadores).

Cabe recordar que a finales del mes de abril una delegación de la OIT estuvo en el país fomentando ese diálogo entre Gobierno, empresarios y trabajadores. Y todo ello fue motivado a denuncias que en su momento Fedecámaras, y fundamentalmente Jorge Roig, llevaron denuncias a la OIT en contra del Ejecutivo Nacional por no cumplir con los convenios con ese organismo multilateral.

Ahora Roig luego de su salida de Fedecámaras es flamante integrante del Consejo de Administración de la OIT. ¿Qué tal?

No desaprovecho la ocasión Roig en sus declaraciones para descalificar a los sindicatos al indicar que se encuentran dispersos y no hay coordinación entre ellos.

La otra sarta de sandeces que señaló Roig no vale la pena reproducirlas en esta nota.

Pero lo que si he explicado a algunos camaradas es que aunque no nos agrade, Venezuela hace parte de la OIT y ha suscrito una serie de convenios que son de obligatorio cumplimiento para el país. Por eso y aunque no nos agrade, los mismos debemos respetarlos.

Y si a eso le agregamos la Comisión de Encuestas que estuvo en el país en 2019 y 2021 de la OIT en Venezuela por esos llamados de Fedecamaras, ya ustedes se podrán imaginar entonces las consecuencias de todo esto.

A los fines pedagógicos, una comisión de encuesta es el procedimiento de investigación del más alto nivel del que dispone la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y cuando se recurre a esta Comisión es porque un Estado Miembro es acusado de cometer violaciones persistentes y graves en materia laboral, y este se hubiese negado reiteradamente a ello.

De hecho la Comisión de la OIT estima volver al país en el mes de septiembre de este año, a seguir monitoreando y actuando como facilitador de esos diálogos tripartitos que deben continuar dándose.

En el caso de Venezuela, hay que tomar debida nota de la imposición de medidas coercitivas unilaterales, la política de asedio y bloqueo contra el país, que no se puede obviar para poder entender la actual situación del país.

Lo cierto, repito, es que las declaraciones de Jorge Roig salieron en el canal de telegram del sistema patria y por otros lados. Incluso hasta en estos días el actual presidente de Fedecámaras, Carlos Fernández (no el que estuvo implicado en el paro sabotaje petrolero aclaro de antemano) y no fueron desmentidas por ningún vocero del Gobierno Bolivariano, por lo que a pesar del personaje tan desacreditado que las dio, sin embargo la información es cierta.

Y en el marco del reformateo del diálogo que ha venido planteando el Presidente Nicolás Maduro, hasta este tipo de temas entran dentro de las agendas que se escenifican en estos momentos. En reuniones públicas, otras privadas, pero que se están dando.

Para concluir la edición de esta columna, esperando haber sido lo más pedagógico en la explicación de este tema que ha generado controversias y que sin duda seguirá generando buenos debates que habrá que seguirlos dando, pero, lo más importante que hay que destacar es lo siguiente.

Que antes de que finalice el año 2022 dios mediante, habrá nuevos aumentos salariales y el plan del presidente Maduro de restitución de la calidad de vida y el poder adquisitivo seguirá adelante

¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!

¡Independencia y patria socialista!

¡Viviremos y Venceremos!