Muchos asumiendo conductas clasistas y elitistas han cuestionado que el actual Presidente de la República Bolivariana de Venezuela no posea título universitario o estudios de educación superior sabiendo perfectamente que esto no es un requisito constitucional para ser electo a la Primera Magistratura del país, pero aun así desde que el Sr. Nicolás Maduro fue electo Presidente Constitucional (2013) no desperdician ocasión de enrostrarle el "pecado" de no ser un egresado universitario.
Entre estos no faltan los que en la cuarta república derrochaban loas y elogios sobre Carlos Andrés Pérez (CAP), quien sin tener títulos de educación superior fue también electo a la Presidencia en dos ocasiones, con aplastante mayoría en ambos casos, por cierto. Claro el "carismático" Carlosandres, el hombre que si caminaba, al aparecer Chávez y el chavismo comenzó a ser querido por los adoradores de la cuarta, llegando incluso a ser añorado hasta por los copeyanos que, en el pasado, naturalmente lo adversaron por liderar la tolda blanca.
Pero entre los que tienen devoción por políticos con formación universitaria se cuentan los que ignoran que el primer presidente de un país que ellos admiran mucho, tenía oficio de agrimensor (no obtuvo título universitario alguno) y a pesar de ello dejo huellas profundas, al punto que es un símbolo destacado de la moneda de su país. Pero no fue la excepción el primero, porque tampoco el quinto presidente tuvo título universitario; así como al menos otros nueve presidentes mas que ha tenido este país, hasta hoy.
A los adoradores de la academia en nuestro país les cuesta aceptar que más que cuestionar al Presidente Maduro por haber llegado a la Presidencia sin poseer credenciales universitarias, habría que reconocer que cuenta con una aceptación superior a la de otros aspirantes al cargo que si poseen dichas credenciales.
Todos sabemos que antes de fallecer Hugo Chávez (2013) fue el quien posiciono el nombre del hasta entonces Canciller Nicolás Maduro como candidato para reemplazarlo en la Presidencia. No eran pocos los egresados universitarios que rodeaban al Comandante entonces, pero solo su agudo olfato político y su instinto hicieron posible que escogiera al candidato que hasta hoy se mantiene invicto en Miraflores.
No digo que el Presidente Maduro no haya cometido errores en su desempeño en la Presidencia, muy al contrario llevo tiempo sosteniendo, como algunos, que su gobierno enfrenta profundas contradicciones con lo que hasta el 2012 se vivió en la Venezuela de Hugo Chávez. Pero el desprecio y odio de clase que muchos exudan a diario contra Nicolás Maduro me han motivado a escribir estas reflexiones.
Es lamentable que muchos de los que hoy forman parte de los profesionales universitarios de este país, no todos por favor, manifiesten tanto odio de clase y resentimiento contra quienes por los motivos que fueren no accedieron a estudios superiores.
No dejare de insistir, por todos los medios posibles, que es impostergable que haya un mejoramiento de las condiciones materiales de los trabajadores y del pueblo en general, ya que no es posible que nuestro país mejore sus condiciones si su gente apenas tiene ingresos de subsistencia.
¡Revisión inmediata de la política de sueldos y salarios ya!
