Desde las gloriosas luchas
en el 2002 para reactivar PDVSA y el posterior rescate del sector protagonico
de los trabajadores, que demostró que ni una gerencia ejecutiva apátrida,
ni una gerencia menor, ni una nomina mayor, podría contener la fuerza
de un pueblo que rompió las cadenas de la ignominia y la traición,
para poner a su servicio la mayor empresa estratégica del País.
El gremio en pleno de obreros,
nomina diaria y contractual invertimos la paradigmática figura triangular,
donde el líder aburguesado y vendido al imperio norteamericano gerenciaba
desde su cúpula a la base sostenida por trabajadores explotados y vejados,
al exigir las mínimas reivindicaciones y calidad de vida.
Pero hemos sentido estos 7 años de revolución y bajo la gerencia emergente, supuestamente comprometida con este proceso un detrimento mayor al vivido en la cuarta república y los logros alcanzados se han diluido al igual que la esperanza.
La industria se ha convertido
en un cascarón vacío, donde la desidia, la mala gestión y el
escualidismo han prevalecido amenazando seriamente el proceso revolucionario
y su existencia.
La meta inmediata de los camaradas
de la NUEVA PDVSA, fue la de consolidar al Comandante Hugo Chávez
al frente de nuestras acciones con el “SI” rotundo a su reelección
y ahora con su mismo espíritu inspirador de lucha, trabajaremos
afanosamente por revertir el deterioro impulsado por sectores contrarevolucionarios
y activaremos todos los mecanismos de poder otorgados por el pueblo
para rescatar de nuevo si es necesario la industria de la canalla que
intenta hundir sus afilados dientes.
El ataque ha sido constante
y sin pausa desde el 2002, a todos los niveles, apelando al desgaste
revolucionario, la destrucción de la calidad de vida, la perdida progresiva
de reivindicaciones, el deterioro de instalaciones y el colapso de transporte
acuático, la precariedad en la asistencia medica, entre otros, que
han vulnerado nuestros sueños y sumido en frustraciones al tener falsos
lideres e ineficientes contralores traidores a la empresa y a un pueblo,
que inocente espera no volver a vivir aquellos nefastos días de ayer.
Es necesario camaradas aunar
esfuerzos y dirigir un mensaje de aliento a los luchadores de siempre,
los que rescatamos PDVSA y queremos seguir teniéndola como derrotero
de lucha y progreso de la mano del único líder Hugo Rafael Chávez
Frías y ponerla bonita y productiva como el sueño truncado en estos
7 años de revolución.
Patria, Socialismo o Muerte………Venceremos