La situación política en nuestro país sufre cambios radicales cada vez que la popularidad del gobierno, por una u otra razón, llega a sus puntos más bajos.
La aprobación del grupo de leyes habilitantes en el año 2.001 trajo una serie de malestares y protestas en el país, repercutiendo en una situación económica que se tornaba insoportable y conllevó al golpe del 11 de Abril de 2.002, pero la enorme torpeza de la dirigencia política del país al borrar todo hilo de constitucionalidad con un solo plumazo, enardeció al pueblo y este salió a la calle a recuperar el orden legal y como consecuencia reponer al presidente Chávez en la presidencia de la República, subiendo el mandatario nacional su nivel de popularidad. Pero la crisis seguía en toda la estructura social del estado y luego de un breve receso continuaron violentas manifestaciones desde mediados del mismo año (2.002), cuando un grupo de militares activos y retirados se pronunciaron en contra del gobierno en la Plaza Altamira de Caracas, mediante un alzamiento no armado, acompasado con distintos tipos de huelgas. A finales del 2.002, cuando la huelga ya comenzó a preocupar al gobierno por el avance del paro, Chávez decidió poner mano dura, y en enero de 2.003 logró recuperar el control de PDVSA, finalizando con la culminación definitiva del paro en febrero de 2.003. La consecuencia directa de esta situación fue que repuntó la popularidad del presidente, con más énfasis, por la crisis provocada que vivió el país y de donde el gobierno salió muy bien librado, porque si bien es cierto pudieron haberse tomado medidas inadecuadas, la crisis generada le fue endosada a la oposición, quien ante todos fue la única responsable de la preocupante situación que vivió la nación, y de la que duró mucho tiempo en recuperarse, teniendo la población que lidiar con la escasez de alimentos y gasolina durante y después del paro; muchas empresas pequeñas y medianas quebraron; los índices de desempleo y comercio informal aumentaron enormemente. En el aspecto macroeconómico las consecuencias también fueron muy negativas: la inflación se disparó, al igual que el desempleo y cayó el Producto Interno Bruto (PIB). Situación de la que el Presidente sacó provecho estratégicamente, responsabilizando a la oposición, y fue reelecto posteriormente con una holgada mayoría.
Traspolandonos a este 2.011, ante otros sucesos que de distintas magnitudes afectan la economía, se presenta la enfermedad del presidente, situación que preocupó a propios y a extraños, donde algunos comenzaron a plantear un escenario de sustitución del presidente por falta absoluta. En otras épocas, los candidatos en las luchas electorales se inventaban una de que su contrincante estaba enfermo para restarle votos y así pasaba; pero de acuerdo a la encuesta publicada este fin de semana pudimos ver que con el Presidente Chávez pasó todo lo contrario, creció en popularidad la evaluación de su gestión, que pasó del 49% en julio al 59% en septiembre, observándose una gran admiración al primer mandatario nacional por su batalla contra el cáncer.
Si bien es cierto la encuesta no habla de intención de voto, también es cierto que gran parte de ese nivel de popularidad se traduce en apoyo electoral, subiendo de un solo golpe 10 puntos que es muchísimo. Ante esta real situación, si el presidente se mantiene con buena salud o estable, es muy difícil que candidato alguno le arrebate la presidencia el año 2.012.
Email: reinaldosilva119@hotmail.com
