El Consejo Nacional Electoral, cuando reanude sus reuniones suspendidas, seguramente tomará en los próximos días la decisión de no contabilizar los resultados del simulacro del pasado domingo.
Así estará en armonía con sus oportunos anuncios sobre los objetivos que en realidad buscaban con ese simulacro, los que alcanzaron incluida la necesidad de algunas rectificaciones. También el Psuv constató deficiencias en sus movilizaciones de ese día, y ya habrán tomado las medidas correspondientes. Parece que la MUD no tuvo fallas, según declaraciones de algunos de sus dirigentes. En buena hora.
¿Qué ocurriría si totalizan? Se confirmarían los anuncios de Jorge Rodríguez de que el Psuv obtuvo el 80% de los votos, así como lo que pareció ser una pobre votación opositora, pues ni siquiera hicieron llamados reiterativos, nada bueno a tan pocos días de las elecciones. Y quedarán dos perdedores, la MUD que verá descubierta su derrota, y el CNE que perderá confianza y credibilidad al cambiar su opinión sobre una cuestión que se hizo controversial por factores ajenos a ese organismo. De allí que lo más lógico y razonable es prescindir de cualquier intento de contar esos votos, que por lo demás es tarea bastante difícil a estas alturas. Y nadie perderá.
LA AGENDA SECRETA
Desde que el exdiputado y exgobernador David de Lima informó de la existencia de una agenda secreta de la MUD, no ha habido una contundente respuesta que despeje las naturales dudas, de manera que hay razones para suponer que ese otro programa es tan real como supuesto.
Esta suposición la confirman las declaraciones de William Ojeda, marcando distancia con su contenido, y haciendo algo que cualquier opositor en cualquier país, incluso Venezuela en otros años, habría hecho: reconocer aspectos positivos de la gestión gubernamental, sin dejar de ser duro crítico. Ojeda lo hizo en referencia a la agenda social desarrollada durante varios años, y con obras y estadísticas que están a la vista de todos. Además, llamó a debatir sus reservas sobre el área de economía del programa y las propuestas neoliberales; y ya ustedes saben lo que hizo su partido: expulsarlo. UNT no lo escuchó, ni le abrió un proceso, menos aun la discusión propuesta. Le acusan de ¡dar declaraciones “inoportunas” y de alejarse “del sentimiento del partido” ¿Ven la gravedad de la falta? Lo que quieren es el censurado pensamiento único.
Negociar la paz
Parece que por primera vez existen reales condiciones para alcanzar el cese de tan largo conflicto en Colombia, porque ambas partes coinciden en no repetir los errores de los otros procesos de negociación, y en segundo lugar, se hace evidente que existe una verdadera voluntad de llegar a acuerdos, esto es, de ceder para recibir. Varios países, entre ellos Venezuela, participarán de este proceso, interesados, como los pueblos latinoamericanos, en que se logren acuerdos en el largo y espinoso camino hacia la paz. Nadie olvida que están en Colombia sus primeros enemigos, que harán lo imposible por sabotearlos. El N° 1 se llama Álvaro Uribe.
Mi cáncer
El 5 de enero me diagnosticaron un cáncer en el sistema linfático, conocido como linfoma de Hodgkin, uno de los menos agresivos, según opinión médica. El tratamiento fue de quimioterapia aplicado en el Hospital Militar (P9), que me afectó mucho, con severa debilidad, inapetencia, anemia, etc.
Siempre tuve confianza en sus resultados, y todo el círculo familiar, y los deseos de amigos y amigas, de compañeros y compañeras de trabajo, las oraciones que se dijeron por mi salud, y la capacidad y atenciones del grupo médico y paramédico, me sacaron adelante. De todos, altamente agradecido.
En julio me hicieron en el Hospital Universitario un examen especial PET-CE, altamente costoso en las pocas clínicas privadas que lo hacen, y se determinó que estaba libre de células malignas. Ahora estoy en proceso de recuperación, me reincorporé esta semana al trabajo, gradualmente, después de nueve meses ausente. No tanto, porque pude conservar esta página, aun en los peores momentos.