El domingo 14 de abril se eligió al primer presidente chavista en la historia venezolana, un gran honor que tuvo como beneficiario a Nicolás Maduro, a quien el presidente antes de irse por última vez a Cuba a realizar una segunda intervención quirúrgica, ya vislumbrando su partida definitiva de este mundo terrenal, dijo a todos los venezolanos: “Nicolás Maduro no sólo en esa situación debe concluir como manda la constitución el periodo sino que mi opinión firme, plena como la luna llena, irrevocable absoluta, total, es que en ese escenario que obligaría a convocar a elecciones presidenciales ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente”.
El pueblo cumplió con la última voluntad de su máximo líder, y ahora creo necesario registrar un partido político acorde con esa ideología y pensamientos que impulsaron el proceso revolucionario; porque más que socialistas u otra tendencia ahora somos chavistas, y qué mayor honor que en los venideros procesos electores luchemos con una tarjeta que sin necesidad de más argumentos ilustre lo qué significa y a quien representa, pudiendo entre muchas alternativas llamarse ese partido: Partido Chavista de Venezuela (PCHV).
Nuestro máximo líder político inicio sus pasos con el denominado Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR200); luego se postuló a los comicios presidenciales de 1998 con el apoyo del Movimiento Quinta República (MVR), obteniendo la primera de muchas y sucesivas victorias posteriores, consolidando la Revolución Bolivariana basada en su proyecto socialismo del siglo XXI.
En la campaña electoral de 2006, Chávez propuso en varias oportunidades la creación de un partido único donde se fusionaran todas las fuerzas políticas que apoyaran su gestión en caso de resultar electo en la elección presidencial de 2006. Luego de obtener el triunfo en la elección, Chávez le dio nombre de “Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)”, en cuyo partido político se fusionaron algunas de las fuerzas políticas y sociales que apoyaban a la Revolución Bolivariana impulsada por Hugo Chávez.
Ahora, la corriente de pensamiento y el proyecto mismo de Hugo Chávez, que llamamos chavismo, va a seguir vivo tanto en Venezuela como en América Latina y el mundo.
En el PCHV se destacarán los ideales socialistas del presidente inmortal, su promoción de la integración latinoamericana y su enérgico criticismo a la política exterior de los Estados Unidos de América y demás potencias que buscan mancillar a los más necesitados, e imponer a la fuerza sus decisiones y antojos al mundo entero.
Chavez quería seguir viviendo para lograr sus metas primordiales, y por eso pidió a Cristo: “Dame tu corona Cristo, dámela que yo sangro. Dame tu cruz, 100 cruces que yo las llevo, pero dame vida porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo, por esta patria. No me lleves todavía”; pero lamentablemente se fue, aunque dejando muy adelantado su proyecto político, que Nicolás Maduro continuará para la satisfacción y beneficio de todos los venezolanos.
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