Si el socialismo se decidiera con música, Venezuela ya habría ganado la batalla y la revolución sería una revolución musical.
Pero, aunque el desenlace de los últimos acontecimientos se dio desde la lucha política, de no ser con ese casi medio millón de músicos tiernos con que cuenta la revolución, jamás se habría podido aislar a los violentos guarimberos. La música desempeñó un papel aglutinador y pacificador de la conducta social de los venezolanos revolucionarios. Que no salieron a la carrera gritando en las calles ¡muerte a la oligarquía! Como los derechistas hacían contra el gobierno y Maduro. Creo que el espíritu de asumir los riesgos con integridad y humanismo, salvó a Venezuela, momentáneamente de la agresión imperialista.
Y es que la revolución Venezolana, es como es, gracias a su pueblo organizado y consciente: unos analizaban la realidad para pronosticar objetivamente la ruta estratégica de la derecha otros, se aferraron a los principios éticos revolucionarios que lograron impedir que la derecha torciera el rumbo del proceso revolucionario y muchos, lograron marginar y aislar a los violentos haciendo prevalecer la convivencia pacífica. Todo esto tiene sus costes humanos, el ejército, la guardia, las milicias y pueblo tuvieron sus bajas. Estas hay que honrarlas con más lucha.
Era imposible torcer el desarrollo del proyecto musical vinculado al Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela es una obra social y cultural del Estado venezolano. También conocido como El Sistema, fue concebido y fundado en 1975 por el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu para sistematizar la instrucción y la práctica colectiva e individual de la música a través de orquestas sinfónicas y coros, como instrumentos de organización social y de desarrollo humanístico. Este modelo pedagógico, artístico y social, que ha alcanzado relevancia en el mundo entero, constituye el programa de responsabilidad social de mayor impacto en la historia de Venezuela. Que cuenta ahora no solamente con el maestro José Antonio Abreu, sino también con los directores de orquestas sinfónicas como Christian Vásquez y Gustavo Dudamel y orquestas sinfónicas internacionales como la sinfónica juvenil Teresa Carreño o la Orquesta sinfónica juvenil simón Bolívar y los 285 núcleos que atienden 400,000 niños y jóvenes venezolanos de todos los Estados del país.
Es imposible revertir el proceso de las misiones, los avances tecnológicos como los
Logros Bolivarianos en Ciencia y Tecnología
Fuente aporrea.org/ Por: Prensa Minci | Miércoles, 14/07/2004 01:56 AM |
Desde 1999 el Estado venezolano emprende el esfuerzo creativo dirigido a contar con una verdadera política de Estado en materia de Ciencia y Tecnología, impulsando la independencia tecnológica, la elevación de la productividad y la calidad de vida de la población, dando respuestas a las necesidades de las mayorías sociales.
Es creado el Ministerio de Ciencia y Tecnología (MCT) como ente rector de las políticas públicas en el área, marcando una nueva fase del conocimiento científico y tecnológico y sus aplicaciones. Con una visión prospectiva y voluntad política se supera el atraso jurídico e institucional en el área, históricamente abandonada y subestimada en su papel transformador de la sociedad. El MCT recibe y da respuesta favorable a los requerimientos sociales, emprendiendo planes, programas y proyectos en cooperación con otras instituciones del Estado y la sociedad, canalizando el impacto positivo de la ciencia, la tecnología y la innovación en función del progreso social y económico, generando conocimientos, incrementando la eficiencia empresarial, la calidad de los servicios públicos y la transparencia de los procesos de gestión, demostrando su pertinencia social como instrumentos impulsores de la Soberanía Nacional y de la calidad de vida de toda la población.
Todo este proceso iniciado por Chávez y luchadores anteriores. Está vigente y con buena salud, aunque la derecha ha sido derrotada temporalmente; ahora, lo que sigue es profundizar la revolución a más socialismo y hay que seguir escribiendo porque la construcción del socialismo es un acto heroico y ese proceso apenas comienza.