Con el estudio de la historia nos hemos encontrado con muchos sabios, profetas, adivinos o lo que considero, ciudadanos adelantados mucho a su era y con una visión exacta del desarrollo de la humanidad, los ciudadanos y su comportamiento. Dentro de esta serie de insignes seres humanos contamos con Albert Einstein (AE); nacido en Alemania el 14 de marzo de 1879; considerado por algunos como el "padre de la bomba atómica". Fue Propulsor de la Teoría de la Relatividad, donde uno de sus resultados más importantes fue la equivalencia entre masa y energía, según la conocida fórmula E=mc², en la que c es la velocidad de la luz y E representa la energía obtenible por un cuerpo de masa m cuando toda su masa sea convertida en energía.
Einstein publicó por primera vez en 1949 un artículo titulado ¿Por qué Socialismo?, donde se puede ilustrar la realidad que hoy día vive Venezuela; a tales efectos realizaremos una breve reseña y análisis del mismo: Para Einstein, "Los pueblos conquistadores se establecieron, legal y económicamente, como la clase privilegiada del país conquistado; se aseguraron para sí mismos el monopolio de la propiedad de la tierra y designaron un sacerdocio de entre sus propias filas. Los sacerdotes, con el control de la educación, hicieron de la división de la sociedad en clases una institución permanente y crearon un sistema de valores por el cual la gente estaba a partir de entonces, en gran medida de forma inconsciente, dirigida en su comportamiento social". Esto es exactamente lo que ha combatido el proceso revolucionario.
Einstein consideraba que la anarquía económica de la sociedad capitalista tal como existía era la verdadera fuente del mal. O sea que cuando decimos que el Diablo maneja los hilos de la oposición no lo decimos por simples conjeturas, en nuestro caso el Diablo lo representa el imperio norteamericano. Además indicaba AE que los propietarios de los medios de producción están en posición de comprar la fuerza de trabajo del trabajador. Usando los medios de producción, el trabajador produce nuevos bienes que se convierten en propiedad del capitalista, donde el punto esencial en este es la relación entre lo que produce el trabajador y lo que le es pagado. El capital privado tiende a concentrarse en pocas manos, en parte debido a la competencia entre los capitalistas, y en parte porque el desarrollo tecnológico y el aumento de la división del trabajo animan la formación de unidades de producción más grandes a expensas de las más pequeñas.
Einstein estaba convencido que los capitalistas privados controlan las fuentes principales de información como la prensa y la radio; siendo muy difícil para el ciudadano común obtener conclusiones objetivas y hacer un uso inteligente de sus derechos políticos, porque se está manipulando la información e inculcando en nuestra población situaciones de división, enfrentamientos y propiciando el desabastecimiento y una guerra económica criminal en términos generales.
Para culminar este análisis es necesario traer a colación algunas frases de Einstein relacionados con la situación actual: "La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa". "Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos"; y la que considero un ataque atroz de la oposición venezolana a las políticas sociales del gobierno Bolivariano: "Los grandes espíritus siempre han encontrado una violenta oposición de parte de mentes mediocres".