Múltiples intentos se han formulado para contrarrestar la crisis
económica y productiva en Venezuela. El democratizar las tierras para
el pueblo o la expropiación sin planificación no ha podido consolidar
a Venezuela como una potencia productiva. La economía de puertos,
sigue siendo nuestra principal característica económica, en nuestra
configuración de Estado Nación desde tiempos de la colonia. País rico,
sin suficiente producción para alimentar a su población, pero con
tierras óptimas para generar cosechas que nos alimentarían en
condiciones de sustentabilidad. ¿Pero que nos falta para lograr esa
tan esperada seguridad y soberanía agroalimentaria? A mi entender el
transito a una economía productiva que se aleje de los monopolios y
rompa con las mafias en la distribución; debe pasar por establecer
metas factibles, con un censo agrícola ético que determine las
potencialidades, las necesidades del sector y con ello el número de
productores que efectivamente conocen del área, para que los
financiamientos tengan mayor efectividad y con ello aumente la
productividad. Es necesario también, apoyar las iniciativas colectivas
que multipliquen el radio de acción de los beneficios, lo que el
Presidente Chávez denominó "Punto y Circulo". Otro aspecto
determinante es la distribución de los alimentos; perdimos una gran
oportunidad con el sistema de ferrocarril en Venezuela (proyecto
prácticamente abandonado); hecho de importancia estratégica para que
la producción dejara de andar en gandola, vía terrestre, para llegar
por los rieles directamente a los mercados populares y centros de
distribución alimentaria.
Doy esta breve explicación, sin ahondar en demasía, por que sumando
los CLAP, ( los indicadores de gestión darán razón de su efectividad y
eficiencia) ahora surgen el PAC (Plan de Abastecimiento
Complementario), con 7 puntos de distribución en el Distrito Capital:
Macarao, Antimano, El Paraiso, Catia, El Cementerio, San Agustín y la
Florida.
Por necesidades de abastecimiento decido ir al centro de la Florida,
muy cerca de Chapellin, y me encuentro con un gran alboroto,
característicos de estas jornadas; informando el personal de custodia,
por medio de colectivos de la zona; que se reparten diariamente 500
números y según esa cifra despachan mercancía, sin restricción de
cantidad, sin necesidad de terminal de cédula o partida de nacimiento
de hijos. Hasta allí el asunto aprecia "normal"; la situación
sorpresa es cuando revisas la lista de los precios de los productos:
Aceite de maíz (1 litro): Bs. 2.390
Aceite de soya (1 litro): Bs. 2.590
Harina de maíz: Bs. 2.590
Arroz: Bs. 1.850
Arveja (amarilla y verde): Bs. 1.190
Avena: Bs. 1.190
Crema Colgate: Bs. 1.790
Desodorante: Bs. 1.190
Detergente: Bs. 1.180
Frijoles rojos: Bs. 1.790
Harina de trigo Robinson: Bs. 1.890
Jabón de baño en barra de 3: Bs. 390
Lavaplatos: Bs. 730
Lentejas: Bs. 1.790
Mantequilla: Bs. 1.910
Mayonesa: Bs. 2.100
Pasta larga (1 kilo): Bs. 1.990
Pañales etapa 1: Bs. 8.750
Pañales etapa 2: Bs. 9.200
Pañales etapa 3: Bs. 10.950
Pañales etapa 4: Bs. 14.300
Protectores diario: Bs. 610
Salsa de tomate: Bs. 2.390
Suavizante: Bs. 1.580
Toallas sanitarias: Bs. 1.100
Envase de 20 litros de aceite en Bs. 55 mil 967
20 kilos de detergente por Bs. 31 mil 800
Fuente corroborada en:
http://laiguana.tv/articulos/38560-precios-productos-importados-caracas-pac
Si leemos de atrás para adelante los el PAC; (Plan Abastecimiento
Complementario) es un paquetazo a lo CAP (Carlos Andrés Pérez);
¿coincidencias? Salvence quien pueda..!
