Hace más de 20 años leí por primera vez este excelente libro de Salom Mesa Espinoza y quedé completamente conquistado por un relato tan vivo y cálido como este, que me hizo realizar un viaje por la historia contemporánea de nuestra querida Venezuela.
En estos días en el eterno recorrido que hago por mi biblioteca; que consta mayormente de libros de historia del Abya Ayala; de nuestra América; escogí a este texto para poder disfrutar de esta narración tan especial que retrata de una forma amena los acontecimientos ocurridos después de la muerte de Juan Vicente Gómez, hecha por un hombre que nunca pudieron quitarle su bizarría y su hombría de bien.
Salom Mesa irreductible nos narra todo su protagonismo en la lucha contra la dictadura de Pérez Jiménez, su participación en el movimientos sindicales y en un partido que después que era del pueblo, se olvidó completamente de su ideología para convertirse en la representación de la clase más poderosa de Venezuela a espalda de los más necesitados.
Esta autobiografía tan llena de vivencias, momentos, luchas, principios, en donde describe la vida de la clase trabajadora venezolana.
Mesa Espinoza fiel a sus principios, que defiende como idea principal de este texto, nos cuenta como por la muerte de su caballo y el olvido de una mujer lo hace viajar a Caracas y de ser un muchacho campesino, sufre una transformación para convertirse en un destacado dirigente sindical y fundador de partidos como lo fueron AD y el MEP.
Un hombre enamorado de la libertad y fiel a sus principios, con un gran amor hacia su tierra que lo refleja en cada palabra, en cada verbo de "Por un Caballo y una Mujer", con temple de varón y raza venezolana, digno heredero de nuestros caudillos indígenas y de nuestros libertadores.
Este libro escrito desde la prisión del Cuartel San Carlos en 1977 nos describe la persecución de las dictaduras perejimenistas y puntofijistas sin poder quebrar la estirpe de un revolucionario, que el gobierno de esa época lo mantuvo encarcelado por razones que el autor prefiere mantener en un silencio bravío.
Pude enriquecer con esta obra el conocimiento de mi país, de mi gente, de mi historia, pero de la misma forma repudiar más situaciones que ya hemos superado y que debemos luchar para que nunca vuelvan a la tierra de Bolívar.
"Por un Caballo y una Mujer" es un libro denuncia del puntofijismo, pero sin odio, de una forma comprometida en la construcción de un destino feliz para Venezuela como lo soñaron tanto de sus hijos como lo fueron el gran Simón y el recordado y extrañado "arañero de Barinas.
Con un prólogo del Maestro de Maestros Luis Beltrán Prieto Figueroa que nos hace una perfecta introducción de la narrativa que nos encontraremos en cada una de sus páginas. Salom rinde un homenaje al finalizar sus páginas a este insigne venezolano como lo fue Prieto Figueroa, donde lo describe como un hombre recto, inteligente, sencillo y bueno comparándolo con un palo que existe en Guaribe llamado Acapro que siendo duro como el jade es útil como una madre.
Mesa expresa al inicio de este texto que no quiere ser juzgado por testimonios referenciales sino por sus propias palabras y leyéndolo juzgamos a Salom como lo que fue el espíritu mismo de la Venezuela brava que no se rinde. Ejemplo para las generaciones que algún día seguirán haciendo de este país, lo quisieron, el soñador del Monte Sacro y el hombre del "Por Ahora".